El Chico De Los Tatuajes.

Capítulo 51. (Editado)

Narración de Maggie.

¿Qué? ¿Había oído bien? ¿Andy me estaba pidiendo matrimonio? Yo... jamás pensé en esto, es decir amaba a Andy, pero nunca se me pasó por la mente casarme con él. Me miraba impaciente, mientras se arrodillaba delante de mí y sacaba una cajita de terciopelo con un anillo de compromiso dentro. Sabía que él quería una respuesta rápida, pero estaba tan sorprendida que lo único que podía hacer era llorar y sollozar.

-Cariño, si no quieres está bien. Supongo que lo entiendo.- Dijo él desilusionado.- Tal vez fui muy rápido.- Dijo más para sí mismo.

-No, Andy. Está bien.- Dije tratando de recuperar mi voz.

-Creo que... que deberíamos irnos.-Dijo levantándose.

-No, espera.- Dije y me miró.- Aún no te he respondido.

-No hace falta. Sé lo que dirás.- Dijo sin mirarme a los ojos.

-Sí.

-¿Sí qué?

-Sí, acepto. Quiero casarme contigo.- Sonreí.

-¿Hablas en serio?- Preguntó él sorprendido.

-Claro que sí. Sabes que te amo.

-Me haces tan feliz, princesa.- Dijo a la vez que me ponía el anillo en el dedo anular de la mano izquierda.

-Y tú a mí, príncipe.- Dije y ambos reímos. De repente oímos aplausos, volteamos a ver y todos los clientes del restaurante se habían parado a aplaudirnos.

-Así se hace.- Alentó un joven de unos veinte años.

-¡Los felicito!- Dijo una mujer de avanzada edad.

Ambos sonreímos y nos aceramos a recepción para pagar la cuenta. No nos quisieron cobrar, ya que según ellos no podían cobrarnos en un día tan especial para nosotros así que corrió por cuenta de la casa. Agradecimos y salimos de ahí.

Narrador universal.

Ambos jóvenes estaban felices por la decisión que habían tomado. Sabían que este sería dar un paso muy grande, pero ellos se amaban y por sobre todas las cosas, se respetaban.

A la mañana siguiente, Andy se despertó por el odioso sonido de su celular, el cual le avisaba que tenía una llamada entrante. Tomó el teléfono que estaba sobre la mesita de luz y contestó sin ver quien llamaba.

-Hola.- Gruñó.

-¡Uy, qué carácter, Andy!- Dijeron del otro lado de la línea.

-¿Quién habla?

-¿Ya no reconoces la voz de tu chica?- Preguntó bromeando la persona que lo había llamado.

-¡Alex, hermano!- Dijo Andy feliz.- ¿Cómo has estado?

-Bien, extrañándote.- Respondió su amigo en broma.

-También yo, cariño.- Dijo haciendo voz de mujer.

-¡Ajá, lo sabía!- Chilló Alex.- ¡Tú me amas!- Exclamó.

-Sí, claro.

-¡Hey!- Se quejó su amigo.- ¿Dónde vives?

-Estoy en Nueva York.

-No hablas en serio.

-Sí, claro que sí. Y además,  pronto te invitaré a mi boda.

-¿Te casarás? ¿Me dejarás?- Fingió dolor.

-Lo siento, pero he conocido a alguien más.- Dijo siguiéndole el juego.

-Pero... ¿Sabes? Yo también he conocido a alguien.

-¿Tú?

-Sí, yo. Y... ¿Sabes algo? ¡Estoy embarazado!

-¿Qué?- Gritó Andy. Así mismo, logró despertar a su prometida.

-¿Andy? ¿Qué sucede?- Murmuró ella media dormida.

-Nada, princesa, nada. Duérmete.

-Con que "princesa" ¿Eh?

-Sí, así es. No puedo creer que vayas a ser padre.- Dijo Andy saliendo de la habitación para no volver a despertar a Maggie.

-Lo sé, es loco, pero conocí al amor de mi vida.- Dijo Alex tontamente.

-Te entiendo, bro. El amor es así.

-Bien, Andy. Pronto tenemos que vernos.

-Lo sé, dime cuándo y dónde.

-Ya. ¿Te parece en tu casa o en la mía?

-Claro. ¿Dónde te encuentras exactamente?

-Como ya sabes, vivo en España, pero vine unos días a Nueva York. Así que, podemos ver si en tu casa, o en la mía. Tengo una casa aquí.

-Está bien. Luego te llamo y arreglamos. ¿Este es tu número?

-Sí, An. Nos vemos luego.

-Bien. ¡Hasta luego!

Luego de finalizar la llamada, vio a Maggie al pie de la escalera. ¿Cuándo había bajado? Mientras hablaba por celular, había recorrido toda la casa.

Narración de Andy.

¿Cómo demonios había caminado tan rápido? Pensé. Maggie me miraba fijamente.

-Así que... ¿Con quién hablabas?- Preguntó ella seria.

-¡Buenos días, amor! Con un amigo.- Confesé.

-¿Ah, sí?

-Sí. ¿Sucede algo?

-No, nada.

Ella volvió a subir a la habitación y no me habló en toda la mañana. Algo le había pasado. Tenía que descubrirlo. Como ella no había bajado, yo preparé el desayuno y se lo llevé a la cama, pero ella estaba dormida. Decidí dejarla para que descansara, aunque ella jamás dormía hasta tarde.

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¡Hola, fieles lectoras! ¿Cómo están? Espero que bien. Tal vez a la noche vuelva a subir otro capítulo. ¿Qué dicen? Quería comentarles que la novela ya está llegando a su final. :'( Les agradezco por haberme apoyado en este proyecto. Sin ustedes no hubiese logrado nada. ¡Gracias! :)

PD: No estoy en mi casa, por eso mismo, no puedo subir la foto de Andy y la del anillo. ¡Prometo que después lo voy a editar!

11/5/2016

~Black Angel~