Capítulo 17.

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Desperté y lo primero que vi fue a Lucas.

-Hola dormilona.

-Hola.

-El Cholo tienes 3 habitaciones de invitados en su casa, ahí tenemos que caber todos, espero que me toque dormir contigo.

-Mmm...-¿Y este que se ha creído? O sea, te digo que mi novio es Fernando y me tiras fichas? Pero chicoo.-¿Sabes qué? Voy al baño.

Cuando volví del baño aún quedaban 30 minutos para aterrizar; Lucas iba diciéndome algo de una chica que le trató mal o algo , la verdad no le hice mucho caso, iba mirando por la ventana cuando me pone la mano en él muslo.

-¿Que haces Lucas?

-Me gustas.

-Quita la mano de ahí, ahora mismo, si no quieres que...

Abrochense la cinturones, vamos a aterrizar.

Bajamos del avión y nos esperaba un autobús que Diego había encargado, allí nos encontramos todo él equipo, esta vez me senté al lado de Fernando, aun que él camino no fue muy largo nos íbamos besando abrazados.

Nos bajamos en la casa de Diego, era bastante grande, y más un chalet que una casa, como dijo Lucas, había 3 habitaciones, él Cholo nos separó por edades, a mi me puso con Krannevitter, Oliver, Saúl, Lucas, Vietto y sus 3 hijos; Antoine, mi padre, Koke, Godín, Juanfran, Oblak, Moyá, Carrasco y Fernando, y él resto en la otra habitación.

Después de acomodar las camas y las maletas, fuimos a cenar.

Me hice muy amiga de Gianluca, es genial, es muy simpático y me hace mucho de reír.

Estábamos muy cansados así que fuimos a dormir.

Cuando desperté, estaban en mi habitación Fernando , Koke y Carrasco. Me frote los ojos y fui a darle los buenos días a Fer.

-Buenos días, amor.

-Buenos días.-Me sentó encima suya, él estaba sentado como los indios, y me dió un pico.

Estuvimos hablando hasta que pasó Carla, la esposa de Simeone, nos dijo que habían echo ya la comida, ya que eran las 2 o así, y todos salieron corriendo, menos Giuliano y yo.

Íbamos hablando hasta llega al patio trasero, cubierto por un porche. Todos estaban comiendo como animales, así que nosotros dos hicimos lo mismo. Después de comer algunos jugaban al fútbol, otros estaban en la piscina y otros estábamos hablando.

-Gian, voy a la piscina, ¿te vienes?

-Vamos.-Nos acercamos a la piscina , Fernando que estaba jugando al fútbol vino corriendo hacia mi y me abrazó, dejandonos a los dos al borde de caer al agua.

-Fernando, por lo que más quieras, no me empujes.

-¿Te he dicho que te quiero mucho?

-Si me quieres, no me tiras.

-Ups.-Me dejó caer-Te quiero.

-¡Judas!

Acabamos todos en la piscina jugando con la pelota, y cuando se hizo tarde cenamos y nos fuimos a las habitaciones.

La Hija De GabiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora