La película terminó y como siempre Kaleb acabó llorando. Claro, ¿quién no lloraría con Marley y yo? Pero como la hemos visto cientos de veces no es el mismo sentimienoto para mi.
-Kaleb-dije riendo-
-No te rías de mí, es triste... pobre perrito.-tapó su cara con sus manos-
Suspiré y lo abracé.
-El está en un lugar mejor, Kaleb-correspondió mi abrazo-
-Tienes razón.
Me separé y subí a ni habitación. Me di una ducha super rápido y me cambié com un vestido azul marino casualy unos tenis negros, no tenía ganas de usar "zapatos". Cepillé mi cabello y lo trenzé para después soltar algunos mechones para que no se vea tan.... arreglado. Puse un poco de maquillaje y bajé.
-Wow, ¿tan especial es?-dijo serio-
-Puede que sea guapo-dije con una sonrisa pícara-
Este rodó los ojos.
-Broma, broma-le tiré del brazo-te amo a ti-junte mi frente con la suya-
-¿No crees que te amo es muy apresurado?
-Para nada, no necesito dos años para darme cuenta que te amo y que eres el chico que quiero conmigo.-sonreí y este me besó-
-En ese caso, ¿ahora somos novios?-alzó la ceja derecha y asentí-
Me abrazó obligándome a enrollar mis piernas alrededor de él para después fundirnos en un lento, tierno y perfecto beso.
No nos dimos cuenta del clima, estaba nublado y pronto empezaría a llover.
-Wow, en el clima no anunciaron esto-dijo mirando por la ventana-
Un relámpago sonó haciendo que Kaleb diera un salto y yo reí.
Mi celular hizo el típico sonido de la burbuja, era un dm.
Jacob Sartorius: No nos veremos hoy el cielo está que se cae, quizá mañana, sin falta :) nos vemos linda.
Sentí mis mejillas arder un poco, ¿es que estoy loca?
______Kevanagh: Claro, hasta mañana :)
Respondí para después bloquear mi celular.
-¿Qué haremos?-me miró Kaleb-
-No lo sé....
-Tal vez debería volver a casa-hizo una mueca-
Otro relámpago sonó para que despues de este la lluvia se dejara venir, parecía que el destino quería que Kaleb estuviera aquí, conmigo.
-O al parecer no-rió-
-No sonrías-susurré y este me miró-
-¿Dijiste algo?
-No, no, para nada-sonreí y suspiré.
Kaleb se sentó en el sofá y yo me recosté apoyando mi cabeza en su regazo. Comenzó a jugar con mi pelo haciendo que un sueño inmenso llegara a mi y sin esperarlo quedé dormida.
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©Un Pasado Contigo |j.s|©
RomanceEsta historia es la continuación de Ambivalencia, la puedes encontrar en mi perfil.