La felicidad se había acabado, me refiero a que las vacaciones de mi trabajo habían acabado y era hora de volver. Pero nunca pensé que sería tan pronto, ahora esyaba corriendo hasta la parada del autobús, si, necesito un coche urgentemente. Llegué y mi "cola de caballo" si en ese estado se le podría llamar así, estaba hecho un desastre. Miré la hora en mi celular faltaban cinco minutos daba pequeños saltos de la desesperación ya que el autobús no llegaba, di los últimos dos saltos y comencé a correr lo más rápido que podía, esquivando personas ó hasta empujando.
-¿_________?-dijo un chico después de haberlo empujado-
Voltee y logré ver a Jacob.
-Nos vemos después-grité y seguí corriendo-
Por fin había llegado, me detuve dentro del local ponindo mis manos sobre mis rodillas tomando grandes bocanadas de aire. Nunca había corrido así en mi vida. Mire la hora y exactamente faltaba un minuto sonreí internamente y fui al baño de empleadas me arreglé el cabello y abrí la puerta dirigiéndome a comenzar mi turno.
-Disculpe, me da 4 hamburguesas normales y 3 sodas-dijo en tono burlón-
Jacob.
-Idiota-susurré- sal de la fila hay más clientes.
-¿Prefieres a tus clientes antes que a mi?-preguntó indignado-
-Algo así-reí- ahora, muévete. Y así lo hizo.
Seguí con mi trabajo hasta el fin de mi turno acompañada de Jacob. Heche el juguete de Hello Kitty coleccionable que me faltaba a mi mochila. Hoy fue un estupendo día.
-Disculpe, ese juguete-dijo una niña pequeña-quisiera tenerlo. ¿Me lo podría regalar?, señorita-dijo suave y algo avergonzada-
Pues que lástima niña, es coleccionable y yo te lo gané. Pensé.
La niña no dejaba de mirarme con sus enormes y ojos verdes llenos de esperanza.
Mire a Kitty, suspiré y se lo dí. Adiós colección.
La niña comenzó a saltar y me abrazó las piernas diciendo muchos "gracias". Jacob solo miraba expectante y con una sonrisa. La niña se fue a dónde sus padres.
Estaba algo molesta por mi juguete.
-Es sólo un juguete-dijo riendo-
-¿Bromeas? Era mi juguete, mi Hello Kitty. ¿Sabes de cuántas personas lo escondí? No tienes idea, Jacob.-dije apuntandolo con mi dedo índice-
-Bueno, bueno-cortó la plática anterior- Serás una madre perfecta. -sonrió-
Ya ya ya ya yaaaaa me está costando mucho, así que algunos serán algo malos... no se desesperen.
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©Un Pasado Contigo |j.s|©
RomanceEsta historia es la continuación de Ambivalencia, la puedes encontrar en mi perfil.