Dreams Of Bad Girl

Despedidas.

Odio las despedidas, aunque más que odiarla, las aborrezco. Ser un mar de lágrimas por días, que, aunque suelen pasar a la semana, dejan un mal sabor de boca. No sé cómo definirlas, realmente. Son lo peor que puede existir, pero aún así, pasamos el mal trago de estar en esa situación. Bueno, pero, ¿Qué es peor que una despedida? Exacto, querer demasiado a alguien y que no puedas despedirte de él o ella. Todo cuanto se ha vivido queda grabado dentro de ti, que, aunque doloroso, es lo poco que te mantiene unido a esa persona porque, así es, nos mantienen los recuerdos, los buenos momentos, las risas, las vivencias compartidas, eso es lo que nos mantiene. Porque, admitámoslo ¿Quién no ha soñado despierto con la persona de la cuál no te pudiste despedir? Yo lo hago cada día, recordar esa tarde de sábado donde solo eran risas, esas caricias y esos besos robados. Y llegó el momento: "Te mando un whatsapp, mañana". Fue lo último que dijo para así desaparecer por esa calle que parecía no tener salida. El coche era cada vez más pequeño y mis esperanzas cada vez más nulas. No hubo despedida, y de eso, es de lo que más me arrepiento en esta vida.