El cielo aquel día era azul, no había ninguna sola nube y los pájaros volaban alegremente. Sin embargo, a bajo en el suelo, había un hombre destrozado. ¿Cómo podía estar el cielo burlándose de su desgracia? El sol brillaba alegremente mientras a él se le venía el mundo encima.
Ahí viene de nuevo, pensó.
Esa sensación de vacío. La sensación de que algo le falta. La sensación de que todo lo que hacia no merecía la pena. Al final del día, al llegar a casa, con esas pequeñas conversaciones de almohada, Min Yoongi descubría aquello que temía descubrir; no era feliz.
No había sido feliz desde hacía cinco años. No esa felicidad momentánea que sus amigos o familia o incluso las circunstancias podían proporcionarle, hablo de la felicidad completa de saber que tienes alguien a tu lado, que te apoya, que llena tu corazón al cien por cien.
Y ahí estaba él, borracho, de nuevo. Sentado en el verde césped de un parque, mirando al cielo con rabia. Todos eran felices, todos pasaban riendo, ¿es que nadie tenía compasión por él?
—Levántate, la gente te está mirando.
Una voz masculina sorprendió al rubio. Yoongi se giró pero no pudo ver mucho, el sol brillaba con demasiada intensidad.
—Yoongi, he dicho que te levantes
La mano del castaño levantó a Yoongi y lo estabilizó. Había bebido demasiado.
—Tae, Tae, Tae...¿qué intentas hacer?
Yoongi golpeó con el dedo índice el pecho de Taehyun varias veces mientras reía divertido.
—Lo que intento es llevarte a casa, mírate amigo, das pena.
Comenzó a andar con él, mas Yoongi se negó a seguir caminando y se escabulló del agarre de su amigo.
—Vamos, tengo el coche aparcado aquí cerca.
—Oh vamos,¿dónde ha quedado tu diversión?—preguntó frunciendo el ceño.
Taehyun volvió a cogerlo del brazo para llevarle de vuelta a su casa, a que se diera una ducha, apestaba a alcohol y necesitaba dormir.
—Sabes que cuando se trata de diversión yo soy el primero en aparecer, pero esto no es divertido, Suga.
—Esta bien, si tu lo dices, te lo perdonaré.
[...]
Cuando Taehyun llevó a su borracho amigo a la habitación confirmó lo que ya sabía. La cama seguía intacta, Yoongi no había pasado la noche allí.
No había duda de que la había pasado en algún bar bebiendo hasta la mañana siguiente para después tirarse en un parque asustando a todos los niños que pasaban.
Yoongi no había tenido una borrachera a tal nivel desde hacía cuatro o cinco años, cuando Haeri lo abandonó.
Yoongi salió de la ducha con una toalla en la cintura y la otra en su mano, la cual pasaba por todo su cabello mojado.
—Suga, ¿puedo preguntarte algo?
—Lo acabas de hacer idiota
Ambos rieron, pero la sonrisa de Yoongi se desvanecía rápidamente. No estaba para fingir ser lo que no era; feliz.
—¿Haeri ha...Haeri ha vuelto?
Yoongi asintió. Se sentó en la cama mientras que buscaba su ropa en el cajón más cercano. Estaba de espaldas a su amigo, no podía mirarlo, no podía enfrentarlo, se derrumbaría de nuevo.
—No sólo ha vuelto, ahora está con otro, ahora está feliz.
Todo se había vuelto un caos. Al parecer Min Yoongi no tenía un buen Karma.
Siento que el capitulo quedó muy corto
Espero que les guste, de verdad me gusta escribir sobre suga💕🌊

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wrong way|min yoongi
Fiksi Penggemar"Esto esta mal, vamos por mal camino." •Min Yoongi •Kim Seokjin •BTS •Drama •Heterosexual -shysandy