Vivamos El Presente *DRAMIONE*

Capítulo 6: Dormir Juntos

Draco y Hermione, lograron hablar con McGonagall y Snape, los jefes de sus respectivas casa, para que estuvieran juntos en una misma torre. Lo cual resultó bastante sospechoso para muchas personas, menos para los que sabían el futuro de esos dos.

Hermione estaba sentada en el sillón de la sala común de Gryffindor, esperando que su nueva torre estuviera lista, con sus mejores amigos y casi hermanos Harry y Ron

-Pueden creer es futuro que nos espera? - dijo Ron - Saben no me imaginaba casado con Astoria y menos a ti con Malfoy Herms.

-Quizás es lo que tenia que pasar chicos - dijo Harry - realmente se ven felices en el futuro, creo que esas serpientes los harán muy felices y si no lo hacen los mato personalmente.

-Los amo mucho chicos -dijo Herms -Son los hermanos que jamás tuve, no se que haría sin ustedes, no puedo creer que vallan a aceptar que me casaré con Malfoy, Gracias.

-También los amo y tampoco creo que ambos nos vamos a casar con serpientes- dijo Ron riendo

-Seremos muy felices, porque estaremos unidos y eso es lo mas importante... - pero Harry no pudo terminar cuando vio a la profesora McGonagall entrar a la sala

-Señorita Granger, el señor Malfoy la espera en su nueva torre, sus pertenencias ya se encuentran allí.

-Muchas gracias, chicos los veo en la cena -dijo la castaña, levantándose del sillón y yendo hacia la salida con la profesora.

*En la torre de Draco y Herms*

Draco miraba a su alrededor, la torre era enorme, había tres grandes sillones, una mesa de café y libreros. A la derecha había una pequeña cocina, a la izquierda un baño, pero sin ducha. Y lo más destacado, se encontraba en el medio, dos grandes escalera que se conectaban en un pasillo donde había dos puertas, una con el escudo de Slythering y otra con Gryffindor, y al medio de estas un gran baño que conectaba las habitaciones.

Era una sala perfecta, podrían estar muy juntos, ya que lo único que los separaba era la puerta de su baño, cosa que ya resolvería.

-Señores, esta es la sala común para estudiantes de intercambio, pero la utilizarán ustedes a su pedido, les ruego que no destruyan nada. Podrán ver que no hay diferencia de casas sólo sus escudos y sin más preámbulo los dejo para que se instalen - dijo McGonagall retirándose.

Pronto se hizo un silencio incómodo que Draco decidió romper.

-Es muy linda Granger.

-Oye, y si me llamas por mi nombre?

-Okey, si es lo que quieres Hermione, ven - dijo señalado el sillón en el que el se encontraba.

Una Hermione un poco sonrojada por como había sonado su nombre desde los labios de rubio, comenzó a caminar para sentarse con el.

Draco con un rápido y ágil movimiento la sentó sobre sus piernas.

-Tu, aun me debes algo- dijo besando lentamente su cuello.

-Que.. que te debo Draco- dijo suspirando por lo que provocaba e rubio en ella.

-Un beso

-Lo lamento, pero tendrás que luchar por el Draquito -dijo ella antes de salir corriendo a carcajadas por dejar al rubio con ese deseo.

Malfoy, río maliciosamente, mientras salía de la sala común hacia el gran comedor. Donde a la entrada vio a Hermione hablando con Ginny Weasley, se acercó hasta la castaña y le susurro.

-Ya me las pagarás, debo recordarte que a nuestros hijos no los trajo la cigüeña, verdad? -dicho esto entró al Gran comedor para cenar en su mesa

Hermione se sonrojo de sobremanera, tanto como el cabello de su amiga, quien se vio obligada a preguntar.

-Ya están avanzando no?- dijo con mirada pícara

-Vamos Ginny - dijo la castaña arrastrando a la Weasley a su mesa.

Luego de la cena, en la cual ninguno de los dos dejaba de mirarse, ambos se dirijan a su torre pero por diferentes caminos.

Cuando Draco llegó encontró a la castaña leyendo acostada en uno de los sillones.

-Jamás cambiarás Leona.

-No pretendo hacerlo serpiente.

-Puedo? - pregunto el señalado el sillón en el que ella se encontraba.

-Si quieres.

Draco se sentó junto a ella, y la posicionó, quedando el acostado y ellas sobre el, pero ambos mirando el techo. El rubio comenzó a acariciar el cabello de ella, mientras leía lo que ella leía.

-Quiero que mañana tengamos nuestra primera cita Hermione.

-Estoy de acuerdo, como, cuando y donde?

-Mañana, durante el almuerzo, en la torre de astronomía. Te parece?

-Claro. Me iré a dormír, tengo mucho sueño.

-Duerme conmigo, aquí - ella lo miro incrédula - Vamos Hermione, no te violare, lo juro.

-Está bien.

Y así pasaron la primer noche juntos. Draco y Hermione, juntos y solos acostados en un sillón durmiendo, abrazados, mientras se acariciaban.

La imagen más imposible de imaginar, estaba sucediendo.