UN BESO...

37 - De rumba

POV MILLY

Después que llegamos a la casa cada quien se fue a su respectiva habitación, mamá nos dijo que deberíamos salir a divertirnos un poco está noche se perfectamente que nos quiere lejos de la casa -pecaminosa! De tal madre tal hija- hay pero que falta de respeto! Los chicos dijeron que saldríamos desde que se ocultará el sol y por lo visto tengo tiempo de dormir un rato, me acurruco con mi gatita e intento quedarme dormida pero alguien tocó la puerta abrí un solo ojo y me quede mirándola pero sin decir nada, quizás la persona del otro lado piense que no estoy y se valla, pasan unos segundos y cuando voy a cerrar mi ojito vuelven a tocar.

- No hay nadie!.- Grito y la persona al otro lado estalla en risas.

- ¿Puedo pasar hobbit?.- acaso no escucho que no hay nadie -claro que lo escucho ese es el problema... si no hay nadie porque alguien gritó que no había nadie.

- Ummm si.- abrió la puerta lentamente y la luz del pasillo iluminó mi habitación, desde donde estoy parece un ángel iluminado con luz celestial.

- ¿Qué tanto me vez?.- pregunto con una linda sonrisa de lado.

- Nada, solo intentando desaparecerte para poder dormir.

- Te traje un pequeño regalo.- dijo pasándose una mano por la nuca mientras me extendía la otra con una pequeña cajita negra, me desago de mi cobija y me hincó en la cama, toco la pequeña caja y es muy suave, cuando veo lo que tiene dentro pongo los ojos como platos.- ¿Te gusta?

- S...si.- claro que me gusta que pregunta tan tonta, me le tiró encima y envuelvo mis piernas en sus caderas pero no tuvimos equilibrio y terminamos en el suelo.

- Aauch!.- dijo el pobre de Fer a lo que yo me reí.- al parecer te gustó más de lo que pensé.

- Si! Me encanta.- dije a lo que me sentaba a orcajadas enzima de el, nos quedamos mirando fijo a los ojos y llegan los recuerdos de nuestro beso.- ¿Me la puedes poner?.- le pregunto de pronto.

- Claro hobbit.- dijo con una sonrisa que no llega a sus ojos, me paro para que el lo pueda hacer también, me le pongo de espaldas para que el me ponga mi lindo regalo, sentir sus dedos me provoca escalofríos y se me eriza toda la piel, cuando termina me volteo para quedar de frente a el.

- ¿Qué tal me queda?.- pregunto un poco tímida -¿pero tímida porque?.

- Mejor de lo que te imaginas.- dice sonriendo.- mejor me voy para descanses un poco y recuerda que tienes planes hoy pon una alarma o algo así.- le doy un asentamiento y el se va me quedo viendo mi linda cadenita la cual es algo rara pero muy linda, decido buscar que ponerme y luego de eso ver si me queda tiempo para dormir.

*UN AS HORAS MÁS TARDE*

- Ya baja o nos vamos sin si ti.- escuche que gritaba otra vez Miguel mientras me ponía mi otro converse a mi madre le cojio con que la moda de ponerse un vestido con tenis es super linda pero a mi me recuerda a floricienta aunque hay que ser sincera no se ve tan mal si te lo sabes poner y como yo no soy de arreglarme mucho le pedí ayuda a mi madre, me doy una ultima mirada y salgo a toda prisa no sin antes darle un beso a la mujer que amo.- por fin sales!

- Si todo esta listo nos vamos.- dice Fer.

- NOS VAMOS DE RUMBA GENTE MIA!.- Grito mi hermano a lo que Miguel y yo nos reímos.

Mamá nos presto su coche un kia pro ceed y nos pidió que no llegáramos tarde, cuando entramos el la disco la música está hasta el tope, se siente el olor de las diferentes hookah que hay encendidas, yo no estoy acostumbrada a este tipo de ambiente así que se me hace un poco incómodo, hay mucha gente aquí pero eso no impide que algunas personas curiosas que están cerca de la puerta miren cuando entramos, note como algunas chicas miraban a mis dos acompañantes Miguel les sonreía de forma coqueta pero Fer estaba serio verlo así me recordó la primera vez que lo vi que también fue la primera vez que vi a mi hermano, nos acercamos a la barra para pedir que tomar y ver si aparece una mesa vacía o de lo contrario nos sentaremos en los taburetes, voy por mi segunda cerveza mientras que los chicos van Cómo por la quinta.

- Hola preciosa, ¿Qué tal si bailamos?.-me pregunta un chico que llego de la nada, le sonrió por cortesía y antes de que pueda responder Fer se pone a mi lado.

- No, ella viene conmigo.

- Creo que ella puede responder si quiere bailar o no y porque venga contigo no significa que no pueda bailar con otras personas.

- No le vas a poner una mano a mi chica así que vete de aquí, apártate de ella.- ¿desde cuando soy su chica? Aunque no estaría tan mal serlo.

- ¿Tu chica? Si es tu chica porque se ve tan aburrida y se a pasado todo el rato sentada, vamos campeón no tienes chance con ella así que deja el camino libre.

- Ni en tus mejores sueños! Así que aléjate de MI CHICA.

- Deja de decirle así o ¿acaso es tu novia o tu esposa?

- Yo...- no termino de hablar porque los labios de Fer se estampan en los míos, al inicio me quedo helada y cuando mi cuerpo reacciona lo beso con intensidad, lo beso de una forma como si quisiera devorarlo, el me regresa el beso de la misma manera, su lengua se apodera de mi boca sin pedir permiso, puso sus manos en mi cadera y yo abrí las piernas para que se pudiera acercar más, gracias a Dios que estaba en frente de mi porque de no ser así se me vería la ropa interior, nos separamos sin alientos, el seguía con sus manos en mi cadera y yo con las mías en su nuca.

- Busquen una cabaña.- se me había olvidado que Miguel estaba con nosotros aunque su idea no suena tan mal.

- Lo siento mucho pe... pero no se porque lo hice.

- Me gustó y si para que vuelvas a besarme así tienen que invitarme a bailar otra vez pues que lo hagan.- Maldito alcohol -El solo te da la fuerza para decir o hacerlo que sobria no te atreves.

- No creo que sea necesario.- unimos nuestros labios una vez más.

- Hay no! Ya vasta.- dijo Miguel separándonos.- Tu deja de besar a este idiota y tu deja de comerte a mi hermanita.

- Pero no acabas de decirnos que busquemos una...

- No! te callas, mira besucona vamos a bailar.- Miguel me paro y me condujo a la pista de baile.