Mil Sueños Por Cumplir (Inazuma Eleven)

Cap.41

- ¿Qué hacéis todos aquí?

Los chicos se me quedan mirando con cara seria mientras que las chicas suspiran ante su protección.

- ¿Quien era? - dice Jude mirándome.

Levanto las cejas con una sonrisa al ver lo celoso que está.

- Alguien - digo jodiéndolo más.

Se levanta de las escaleras donde estaba sentado y se pone enfrente mía. Subo la mirada para encontrarme con sus ojos.

- Deja de jugar a lo que quiera que estés jugando - dice con furia - ¿no lo entiendes? Nos traes de cabeza a todos. Estoy harto de tener que ir detrás de ti siempre.

Mi cara cambia por completo. Pasa de la sonrisa a la furia.

- Deja de decirme lo que tengo que hacer, no eres mi padre.

- No tienes, alguien te deberá que guiar un poco por lo menos - dice fuera de si.

Abre mucho los ojos alzarse cuenta de lo que ha dicho. Mi cara se descompone. Y Jude empieza a ponerse nervioso.

- Crístal... Yo... No quería...

Le hago callar con la mano. Niego con la cabeza.

- Sí, si que querías decirlo. Da igual - me encojo de hombros y paso por su ldo decaída.

Los chicos me miran sin saber que decir. No dejo de mirar al suelo hasta que llego a la puerta, la abro y la cierro detrás de mi, con llave. Se empiezan a escuchar gritos llamando mi nombre, pero a mi me dan igual. Subo a mi habitación, cojo un cojín y el osito que tengo encima de la cama. Bajo las escaleras y vuelvo a bajar las que me llevan al sótano.

*Narrador en tercera persona*

Los chicos se empiezan a echar en cara los unos a los otros quien tiene la culpa de no haberla parado. Solo Axel es el único que mantiene la calma y mira a la puerta esperando que la chica vuelva a aparecer.

- Crístal tiene razón, no podemos controlarla - dice Nelly mirando acusadoramente a todos.

- Ya es mayor como para elegir que es lo que tiene y no que hacer - dice Silvia.

- Hermanito, te has pasado - ineterviene esta vez Celia.

Jude baja la cabeza avergonzado sabiendo que las chicas tienen razón, que ese ha pasado y que ahora mismo lo único que quiere es que salga la chicha y que le de la ostia bien merecida que la tiene. Mientras tanto Axel aprovecha a colarse por la ventana de la cocina que está abierta. Entra en la casa como si fuera la suya y la recorre buscando a la chica sin darle ningún resultado. Se sienta en la escalera intentando averiguar donde ha podido esconderse. Un llanto llega hasta sus oídos. Se levanta y sigue el ruido por unas escaelras que no había visto antes. Se impresiona al ver el pedazo campo de fútbol que se escuentra debajo de la casa. Nunca había pensado que una estructura asi pudiera ser ocultada. Crístal se encuentra llorando tumbada en medio del campo. Axel se acerca con sigilo, conteniendo las ganas que tiene de abrazar a la chcia de la que de verdad está enamorada. No sabe si fue esa carta que recibió, o si solo fue el miedo a quererla demasiado; pero sabe que no hay vuelta atrás y que nada va a volver a ser como en un principio el chico quiso. Porque, muy a su pesar, tenia que reconocerlo, la había traicionado. Sus pasos se detienen al ver que la chica deja de moverse y su respiración se pausa. Enmarca una ceja y camina hasta ella preocupado. Se arrodilla frente a ella y la acaricia con cuidado la cara. Se ha quedado dormida llorando y las lágrimas le caen todavía por sus mejillas. Se abstiene de quitársela con su boca. Incluso cuando se encuentra en estas situaciones tiene ganas de llevarla a la cama y demostrarla lo que de verdad la quiere. No sabe hacerlo de otra forma. La chica se remueve y abraza más a su peluche. Axel sonríe con ternura. Acerca sus labios a los de Crístal y deposita un pequeño. Suspira pesadamente y marca el numero de Mark, me he tenido que ir a ver a mi hermana no os preocupeis, dice el chico antes de colgar y volver a arrodillarse delante de la chica.

- ¿Alguna vez te han dicho que eres bonita hasta cuando lloras? - susurra colocándole un mechón de pelo.

*Narra Crístal *

Disfruto secretamente de las caricias de Axel. No comprendo porque es tan bipolar conmigo, y creo que nunca lo entenderé. Lo único de lo que estoy segura es que no quiero seguir sufriendo y si estar con Jude o Axel significa eso... Unos brazos me rodean y me elevan. Su colonia inunda mis fosas nasales. Viviré prendada de su aroma para el resto de mis días mientras mi maldito subconsciente me recordará que solo fui una más. Sube las escaleras conmigo y abre la puerta como puede. Me deja en la cama y me se tumba al lado mio. Se que me esta observando y cuando eso pasa me entra la risa. ¿No os ha pasado alguna vez que quieres mantenerte seria pero cuando ves la cara de la persona en concreto os empezáis a partir de risa? Pues eso me está pasando ahora mismo.

- Deja de fingir, Selius - dice Axel con voz ronca.

Abro un ojo y dejo escapar el aire que he contenido para no reírme. Le miro de reojo y recuerdo que estoy enfadada con él.

- ¿Qué haces aquí?

Me mira por unos segundos y después vuelve a mirar al techo.

- Pasar el rato como ves - dice sarcástico.

- Sí, pues creo que ya has tenido suficiente. Largo - digo apoyándome en el codo y señalando la puerta.

Suelta una sonrisa arrogante.

- ¿Oh si no qué?

- Que te juro que de la ostia que te doy no quieres volver a verme - me he cansado de sus juegos.

Me he cansado de que siempre me esté mareando, de que un día sí y a las horas se líe con otra , de que juegue con mis sentimientos como quiere. Porque aunque todavía no se ha dado cuenta, y aunque yo misma lo niegue, mi corazón ya ha elegido. Pero, lo siento ya no puedo más, me he cansado de seguirte el juego Axel Blaze.

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Lo sé he tardado y no es muy buen capítulo, pero mi cabeza no da para más ya. Creo que la única neurona que me quedaba ha echo las maletas y se ha largado. Espero que aún así os guste. Besooos.