Mil Sueños Por Cumplir (Inazuma Eleven)

Cap.44

Aviso: No me hago responsable de posibles traumas. No es necesario leer esta pequeña parte para seguir el hilo de la historia.

A trompicones llegamos a la habitaciones. Me empuja contra la pared y junta sus labios con los mios de forma agresiva. Respondo con la misma agresividad. Por Dios, como besa. Sus manos desabrochan diestramente mi sujetador, que junto con la camiseta salen volando hacia la otra punta de la habitación. Se retira para tener unas mejores vistas. Sus pupilas se dilatan y su sonrisa se ensancha. Se pasa la lengua por los labios y a mi me da una punzada en el vientre.

- Son... Perfectos.

Ataca al derecho con sus labios y el otro con l mano. Gimo de placer cuando succiona el pezón erecto. Succión, lametazo, mordisco y así continuamente. Mis manos tiran de su cabeza e incoscientemente hago fricción contra su cadera. Su boca no se detiene y sé que dentro de poco llegaré al límite. Deja el derecho para atacar ahora al izquierdo. Miro hacia abajo con l mirada encendida. Oh, Dios mio. Sus ojos se encuentran con los mios mientras coge el pezón con los dientes y tira de él con propiedad. Suelto un gemido y me dejo ir entre sus brazos. El orgasmo me arrasa de arriba a abajo. Escondo mi cabeza en su cuello todavía entre espasmos. Axel me aprieta contra su cuerpo y nos lleva a la cama. Se tumba encima de mi y nos miramos con las respiraciones agitadas.

- ¿Estas en tus días? - dice cogiendo con los dedos el hilito.

Asiento.

- Pues me parece que me va a tocar a mi terminar el trabajo - dice mirándose la erección.

Madre mía, ¿pero que tiene ahí? Se levanta de entre mis piernas.

- No, ya lo termino yo - digo sonriendo ante la espectación.

Levanta una ceja divertido. Se vuelve a acercar y se baja los boxers sin ningún pudor. Agrando los ojos. ¿Cuanto tiene que medir eso? ¿18-19? ¿Y pretende que eso quepa dentro de mi?

- Es muy grande - digo admirándola y acercando la mano con cuidado.

- No muerde - dice con voz ronca.

Sonrío con lascivia.

- No, la que va a morder soy yo.

Cojo su erección y meto el primer lametazo.

***
Admiro como Axel se cambia y se pone el uniforme. Me muerdo el labio. Le queda genial. Sonríe burlonamente y se acerca a mi. Después de haber llegado a dos orgasmos más, acabamos muertos uno al lado de otro, en la cama.

- Voy a ver como va el entrenamiento, ¿que vas a hacer?

- Quedé el otro día con una amiga para tomar un helado.

Aprieta los puños y cambia de expresión. ¿Qué le pasa a este ahora?

Celos.

No, hay algo más que unos simples celos.

- Vale, pasátelo bien - dice intentando sonar relajado - si pasa algo me llamas. Ah, y habla con Jude, todavía quiero seguir luchando por ti y si estas enfadada con él... No me sale la ecuación - dice guiñándome el ojo.