Era una mañana bastante soleada y calurosa como las que eran comunes en esa época del año y dos mujeres solo podían escuchar en aquella casa rodeada por el bosque el sonido del choque producido por las espadas mientras podían ver como unas figuras lejanas se movían de forma acompasada realizando una especie de danza ya antes ensayada en un innumerable número de ocasiones.
-Vamos papá no se supone que no debo ganar- decía mientras pasaba de una postura de defensa a una de ataque sin ni siquiera pensarlo.
-Y no se supone que tu no debes ser tan presuntuosa- solo respondía mientras recibía ataques tratando de encontrar la forma de cambiar aquella situación donde él estaba perdiendo rápidamente
-Papá eso no pasara sabes que ya me he vuelto demasiado buena en esto- reía mientras seguía atacando de forma rápida y certera
-Si eso crees tú- decía mientras lograba dar un golpe inesperado cambiando de nuevo su defensa por un ataque
-Bueno me harte de escucharlos hablar mientras se miran bonito mejor pelen y gana Ryota por favor- reía mientras seguía detenidamente todos los movimientos que se estaban realizando
Después de esas palabras la corta platica que se había mantenido había cesado por completo dando paso de nuevo solo al sonido de las espadas y los rápidos movimientos realizados por ambos combatientes donde ninguno de los dos quería ceder, la habilidad de ambos era magnifica en uno se notaba la experiencia así como la sabiduría en el uso de la espada, mientras en el otro se podía ver la juventud, la velocidad y la excelente técnica aprendida a lo largo de los años, al parecer era una situación más de orgullo que de otra cosa si continuaban de esa manera esa lucha no acabaría con ningún resultado más que el de empate como venía siendo desde hacía ya varias ocasiones anteriores.
-Papá ya deberías darte por vencido- decía mientras daba un ataque rápido donde casi desarma a su contrincante el cual apenas y logro salvarse de la derrota
-Eso no pasara, sabes que lo último que debes perder es la esperanza del triunfo no importa que tan cansado estés-
-Si claro y tampoco importa que es obvio que voy a ganar- sonreía ampliamente esquivando un golpe al pecho
-Eso no pasara-
-Claro que si- decía para moverse rápidamente para quedar justo detrás de su oponente esperando que este volteara para poder atacar y quitarle por fin la espada al enroscarla de cierta manera con la suya para lanzarla lejos
-Claro que no- volteando y atacando sin permitir aquel movimiento que imaginaba su hija había planeado –Pensase que ganarías- sonrió
-No creí que sería más fácil pero ten por seguro que ganare-
-Eso lo veo muy difícil- decía mientras desenfundaba la espada y comenzaba a atacar de forma ágil pero tranquilo a la chica que estaba ganando –Ryota te ayudare pero solo en esta ocasión para que no pierdas tu honor jajajajaja- decía y seguía atacando
-Gracias Gustave aunque no era muy necesario-
-Me agradeces luego ahora solo acabemos con ella-
-Ahora veo que se ponen en equipo, aun así no ganaran- trataba de esquivar ambos ataques sería difícil pero no se rendiría era algo que había aprendido desde que la habían comenzado a entrenar jamás debía rendirse sobre todo si tu lucha era por algo que valía la pena y aunque en esta ocasión era por orgullo no se dejaría vencer como siempre, debía pensar rápido para poder ganar
-Vamos pequeña ya no ganaras, estas perdida-
-No lo veo así padrino aun ahí una oportunidad estoy segura- decía para agacharse rápidamente esquivando un posible golpe en la cabeza deteniendo otro golpe más que venía de su padre y saltando para esquivar uno que iba dirigido a sus piernas después de ese ágil movimiento lo había logrado los había separado tendría más oportunidad de esa forma
![](https://img.wattpad.com/cover/65230578-288-k343335.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Amando a tu enemiga
RomansaHaruka una simple campesina y plebeya del reino y Michiru la princesa y única heredera de este se conocen por casualidad desde los ocho años pero conforme van creciendo y conociéndose más nace entre ellas un amor profundo que no puede romper ni la s...