Capitulo 54

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CAP

Pagué y bajé del taxi unos diez minutos más tarde. Aún llevaba mi camiseta que ponía “Love Harry” pero entré en la tienda rápidamente y antes de ponerme a buscar como una loca, le pregunté a la dependienta por un disfraz enorme de fresa y ella me llevó hacia la planta de objetos domésticos, y es que la tienda era enorme. Me enseñó varios, pero eran muy poco llamativos hasta que vi uno que me encantó.

- Este es bastante caro ya que es un disfraz especial y se han hecho muy pocos. Si le aprietas la barriga como los osos de peluche, dice: “Quiéreme” con la típica voz de niña.  Aunque creo que es un poco grande para ti –dijo mirándome de arriba abajo.

- Oh, no es para… mi… -¿Qué representaba que éramos? ¿Amigos? ¿Novios? ¿Amigos con derechos?- un amigo

- ¿Crees que este le irá bien? –dijo ella enseñándome la talla, asentí sin prestar mucha atención.

Pagué y al salir caminé un poco para despejarme, entré en Zara un momento ya que no quería ir con la camiseta siempre, me compre una y en el mismo probador me la puse. Era una básica blanca muy holgada y un poco corta, pero en Barcelona hacía mucho calor.

Salí de Zara y empecé a caminar hasta que me llamaron al teléfono.

- ¿Sí? –pregunté ya que no había mirado quien era.

- Teddy, ¿Dónde estás? –preguntó Harry al otro lado.

- Dando una vuelta –respondí

- Ven, e iremos a pasar la tarde en la playa –dijo él. Una sonrisa se me formó en el rostro.

- ¡Claro! En media hora estoy de vuelta –dije.

Corté la llamada y llamé a un taxi que estaba en su parada, le indiqué en el camino y él no se sorprendió.

- ¿Por qué todas van allí a hacer cola? –preguntó el pobre hombre en catalán, reí y le contesté.

- Hoy es el concierto de One Direction –respondí simple.

- Si, si mi hija me lleva dando la tabarra desde hace cinco meses pero yo no tengo dinero para comprar dos entradas…Esta con depresión ya que sus amigas van y ella no. Pero por mucho que lo intenté no pude reunir el dinero…

- Oh lo siento…

- Tranquila, solo espero que no me mate ni nada… Últimamente está tan deprimida, mi mujer nos abandonó hace seis meses y ella se refugió en su música, le cuesta mucho pedir las cosas por una cosa que me pidió y no se lo pude dar…

- Siento que su hija lo esté pasando tan mal, y usted también, es su hija y no me puede mentir, verla así le duele.

- Si, supongo. Oh, disculpe no quería molestarla con mis problemas…

- No es ninguna molestia, de verdad.

Sentí mucha lástima por él, ya que aunque se había esforzado mucho, no le había dado resultado. Entendía que él estaría frustrado y triste por no haber podido llevar a su hija a cumplir su sueño.

- Llegamos, chica –dijo él taxista girándose.

- Oiga… ¿Me espera cinco minutos? –pregunté y él asintió extrañado.

- Pero el taxímetro va corriendo… -dijo él mirándolo pero me encogí de hombros.

- Valdrá la pena –dije, salí del coche y vi a muchísimas chicas, muchísimas.

Me colé entre ellas escondida bajo el gorro que me había dado Harry. No sabía dónde ir así que le envié un Whats App a Niall diciéndole:

“Hey, estoy fuera. No se lo digas a nadie y sal a buscarme, te espero en el parking de taxistas, sal con dos entradas para el concierto, por favor Furby ;) Xx”

Loving my life with youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora