Lluvia la lluvia me levanta para acompañarme en mi primer día en mi nuevo instituto, me levanto tomando mi celular de la mesa para oír música mientras me baño, a pesar del frió igual decido bañarme con agua helada (espero que no me resfrié) para mi primer día llevo unos leggins negros, una camisa ocre manga larga y unos botines converse, dudo si dejarme el cabello suelto o amarrarlo en una cola de caballo , pero al final decido que suelto, mi pelo es de un castaño oscuro , con ondas desiguales o como suelen decir bobo, me gusta osea no es algo del otro mundo pero creo que se me ve lindo y me hace un look como casual y medio elegante ademas que me marca el rostro de manera muy femenina, ya lista bajo para prepararme el desayuno, unas tostadas con mantequilla de maní y mermelada de mora, y un vaso de leche fría, mientras trato de pensar en como podre socializar con la esperanza que por lo menos una o dos amigas podría tener aquí, me preocupa el hecho de que no les agrade a mis nuevas compañeras, agarro mi mochila y salgo hacia el instituto a pie se me harán de 15 a 20 minutos así que voy tranquila quiero ver mas el vecindario antes de usar mi bicicleta, será un día largo por ende tengo que prepararme mentalmente para las posibles cosas negativas que me podrían llegar a pasar como tropezarme enfrente de todos y que se burlen de mi o en las bancas del comedor estén llenas y no encontrar a donde ir, me encanta poder caminar hacia el instituto puedo sentir el clima frio colándose por la tela de mi ropa es una sensación muy agradable ya que me hace cerrar los ojos del gusto, escucho el sonido de pasos, pero pasos pesados, como si fueran de botas de combate me detengo y hecho un vistazo hacia atrás pero no hay nadie, juro que lo escuche y veo hacia los lados de la calle pero no hay ninguna señal de que alguien mas anduviera por allí.
-Hola.-digo prestando atención por si recibo respuesta, viento pasando entre las hojas de los arboles es todo lo que se escucha así que pienso que los mas probable es que sean imaginaciones mías por el estrés acumulado por los últimos cambios en mi vida, sigo mi camino soñando despierta sobre las cosas malas y buenas que me podrían suceder.
Al llegar busco el secretaria con la esperanza de no llamar la atención de alguien, ya allí me dan mi plan de estudios, mis horarios y las llaves de mi casillero , busco mi clase, llamare la atención lo se muy bien ya que en lo que estaba en la secretaria, tocaron el timbre y todos entraron a sus clases por ende no podre hacer la entrada sutil, toco la puerta que se supone será mi primera clase abro la puerta y la maestra me observa le hago señas con la mano para que se acerque.
-Buenos Dios soy Ane Scott estudiante nueva, aquí están mis papeles.-le digo mientras le entrego mis documentos y permisos, la maestra los observa detenidamente mientras la clase guarda silencio.
-Muy bien Bienvenida.- dice sonriéndome.-pasa adelante.-se dirige así el frente de la clase con mucha seguridad.- denle la bienvenida a muestra nueva estudiante Ane Scott confió en que sepan comportarse.
--B-i-e-n-v-e-n-i-d-a.- dice la clase al unísono, así que me apresuro a tomar asiento, el ultimo de lado derecho, solo sentí algunas miradas en mi espalda lo normal es lo que pensé, la clase en esencia estuvo algo entretenida era de las culturas mayas, me encanta sociología, por otra parte mis siguientes clases en lo que resta toda la mañana serian las de matemáticas, si tengo grandes problemas con matemáticas que nunca los resolveré, ósea los podía entender pero a la matemática en si no, porque es algo intangible, nunca me gusto, cuando andaba buscando el salón me perdí y llegue 10 minutos tarde me presente con el profesor de igual manera que lo había hecho poco antes.
-Enhorabuena.-me dice algo animado.-porque vamos hacer un examen de conocimientos generales.-pone cara de extrañes.-solo que hay un problema y es que es en parejas y todavía falta un estudiante.-pero sus ojos pasan de mi hacia la puerta, volteo a ver y es uno de los jóvenes que me encontré en la gasolinera, si es el de las Pringles.- joven James llega tarde como de costumbre pero en este día tendrá el honor de acompañar a la nueva estudiante para el examen.-le dice al joven que al parecer se llama James, este pone cara de póker debajo de su gorro de lana negro y asiente guiándome hacia mi nuevo asiento, nos sentamos a esperar a que nos entreguen las papeletas. y cuando al final llegan solo dice:
-tu encárgate de las primera pagina y yo de la segunda.- dice sin mas, pero las de las segunda pagina son las difíciles.
-creo que para que sea justo tendríamos que hacer uno tu, uno yo y así para que la carga sea igual.- me mira raro ¿tal vez fue por el tono despreocupado de mi voz?.
-esta bien si tu quieres.-dice sin mas, trabajamos en silencio hasta que llego al penúltimo ejercicio eso fue lo ultimo que vi en clases pero en ese tiempo mi mente estaba perdida. escucho que mi compañero para de garabatear, levanto la vista y el esta observando mi ejercicio sin completar.
-aquí tengo un problema crees que me puedes ayudar, esto fue lo ultimo que vi así que no se muy bien como va...
-mmm.. lo que tienes que hacer es despejar esto y y creo que aquí te has equivocado de signo, luego tienes que sacar los porcentajes y listo.- la manera en que los explico me pierde ya que lo dice tan fácil cuando en realidad es complicado.- creo que solo eso.-dice y sigue con lo suyo.
Empiezo a hacer lo que me dijo y efectivamente era así, los compruebo y ya esta todo listo, miro a mi compañero quien con la mano me pide mis ejercicios, se los doy y los revisa despreocupadamente como si fuera lo mas fácil del mundo.
-si están bien.- es todo lo que dice poniendo mis paginas con las de el en orden.
-Gracias por ayudarme antes.-le digo con una media sonrisa, todavía me pone nerviosa cuando conozco nuevas personas.
-no es nada además que si te equivocabas yo me equivocaría porque saliera afectado, no es cuestión de ayuda mutua es solo para que no me afecte.- dice encogiéndose de hombros mientras se levanta para entregar las paginas y finalmente salir del salón.
Antes de regresar a mi casa me dedique a buscar mi casillero, que esta localizado hasta el final del pasillo llegando a las puertas traseras del instituto me tocaría caminar mucho pero ni modo, el regreso a casa fue tranquilo, pero empezó a llover así que salí corriendo, hasta llegar, como la casa esta sola me empecé a desvestir desde la sala hasta mi cuarto, el agua se había colado hasta en mis calcetines, me puse una pijama de esas de cuerpo entero y me fui a desempacar mis libros en la librera, luego escuche como un fuerte golpe proveniente del piso de abajo, me puse de pie rápido, agarre un palo de golf que encontré y empecé a descender las gradas enciendo la luz y no veo nada así que bajo el palo de golf que ya estaba listo para el ataque. y se oye otro ruido pero esta vez en la puerta principal detrás mío eso me sobresalto tanto que levante el brazo por instinto y suelto el palo de golf que dio con el candelabro y algunas piezas del cristal de este se cayeron y se quebraron estrellándose ruidosamente en el suelo, y otra vez el sonido de la puerta pero mas fuerte, espero un segundo a que me tranquilizada recogí el palo otra vez y me dirijo hacia la puerta, la abrí y...
ESTÁS LEYENDO
Jugando con las sombras
ParanormalAne siempre ha sido la hija perfecta, estudiante de un colegio católico le han enseñado que es el camino bueno y el malo ¡el Prohibido! siempre obediente nunca ha hecho travesuras nada que vaya encontra de su educación o religión, siempre siendo la...