III

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Presenciamos los dos ese desastre, se veía personas colgando de barrotes clavados en su cuerpo, personas caminando ensangrentadas, cadáveres entre las piedras caídas, y el tráiler, completamente destrozado, incluso con la muerte del chofer al caerle un pedazo de cemento del puente en el parabrisas.

Nos levantamos como pudimos y nos tapamos los ojos para no recordar esa fatal escena, pero no dio resultado. Aun la sigo rondando en mi mente. Alin, ni se diga, ella al ser sensible ante los accidentes, casi se ponía a llorar del brutal accidente, afortunadamente, supo resistir. Por un momento pensé que era una coincidencia el accidente, pero descubrí que no era así.

Llegue a mi casa lleno de tierra y un raspado de codo, rompiéndose mi sueter azul, tratando de recuperarme y decilre un buen pretexto a mi madre para no hacerla entrar en pánico. Al abrir la puerta y entrar, veo que tiene la televisión encendida, en el canal de noticias, justamente cuando hacen un directo sobre el lugar del accidente.

-Estabas ahí ¿no?-dice ella, no se si en un tono de susto o de alivio

-Si... si estaba ahí... junto con Alin.

-Ah pero como eres de terco, ¿no sabias que te podias haber matado ahí? Solo era cuestión de segundos para que dejaras de existir en este mundo.

-Mira... ese... ese no era el problema-empezaba a balbucear.-Yo quería salvar a Alin. Evitar... que se subiera... y terminar como una muerta mas.

-Esta bien... toma asiento en el banco, veamos que dicen sobre eso.

Mi madre toma el control y le sube el volumen a la televisión, el corresponsal decía lo siguiente:

"Exacto mi querido Arturo, me encuentro en la zona del accidente donde como pueden observar, un tráiler se ha estampado en un puente peatonal cerca de una escuela de nivel superior. Nos reportan que los muertos ascienden a 30 y heridos a 45. Al parecer, el tráiler se había quedado sin frenos y el acelerador se había atascado 20 kilómetros atrás, el chofer, tratando de realizar un intento de esquivar a los autos, no pudo manejarlo más provocando que este perdiera el control y provocara el desastre. También me están informando que han encontrado un cuerpo a 300 metros de aquí con una herida de bala, se cree que fue algo independiente al accidente. Hasta aquí mi reporte, volvemos al estudio..."

-¿Sin frenos? Pero que... agh, ¿Por qué? ¿Por qué no los pudo revisar antes de salir? Decia refunfuñando, en brazos cruzados y con ganas de golpear algo.

Para evitar esa reprobable actitud, decidí llamar a Alin, para saber si había llegado con bien a su casa. Así que busco en mi bolsillo de i pantalón, pero no lo encuentro, se me había caído entre el bullicio de gente descontrolada. Enojado, decidí tomar el teléfono fijo y marcar su número, que me sabía de memoria.

-¿Alin?-contesto primero.

-¿Is..i?... No te escu... cr... -Dice el otro lado de la bocina, pero no se escucha bien, al parecer hay interferencia y no la puedo oír bien, se quiere "cortar" la llamada.

-No te escucho, habla mas fuerte.-Respondí

-Que... pue... habl... te estoy avis... que salgas ... casa... ahora, ¡Ya! O morir... ¡AH!-Se corta la llamada después del grito.

_Alin, Alin, no, no, no, no por favor no.

Intento marcar otra vez, pero cada uno de los intentos es fallido. No se que me quería decir ella, mas cuando se refería con "casa" y "morir".

No le di demasiada importancia al caso, de seguro fue asustada por una broma de su hermano mayor y se asusto. Ya caia la noche, la hora que ya temia desde un principio, preparándome para la pesadilla. Cene algo ligero, como siempre, bueno, en lo que era la pesadilla.

Fui a mi cuarto y me dormi. Esta vez, no se si era una pesadilla o un sueño tranquilizador. Lo que si estaba seguro es que ya no era el mismo terror nocturno. Vi que estaba mi primo en la casa de Xalapa, donde había pasando buena parte de mi infancia con el, ya que nos divertíamos como primos que eramos: teniendo pijamadas, comiendo de casa en casa, jugando videojuegos o juguetes o cualquier otra cosa que se nos ocurriera.

La peculiaridad de su casa es que se encontraba dentro de otra casa, mas grande, en la cual vivía la madrina de mi padre, la que le ayudo a que él se fuese a México a terminar sus estudios como mecánico automotriz y conseguir un empleo. Siempre se tenia la visita de visitar primero a la madrina, Pero cuando veía a mi primo, se me olvidaba lo primero, dándole mayor importancia a el.

Pero en el sueño, tambien vi a su hermana, Fatima, agarrados de la mano, y viendo como detrás de ellos se deshacía su entorno mediante números de diferente tamaño y estilo, yo traté de correr hacia ellos, pero no podía, algo me estaba agarrando, era una mano, no era la mano morada de aquel monstruo, sino una mano con una manga blanca. Lo más extraño que pude recordar de ese sueño era la frase que ambos repetían:

"Tal vez algunas cosas son mejores dejarlas olvidadas, por ahora"

Cuestión de tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora