Cuestión de tiempo

VI

¿Pero como entrar en esa fiesta sin levantar sospecha alguna? Un obstáculo un tanto difícil para los 4. Estuvimos un buen tiempo pensando en una buena solución, hasta que se nos ocurrió una idea, no tan grandiosa, pero si lo suficientemente bien como para no levantar sospecha alguna.

Bajamos con cuidado de la casa del segundo piso en la que nos encontrábamos, para dirigirnos con los niños. Nos ibamos a acercar con ellos hasta que un adulto nos vio.

-¿Y que o que son ustedes?¿Que hacen aqui?

-Ah, jeje, es que nos reportaron un problema eléctrico en la casa de arriba y lo tuvimos que arreglar.-dice Samantha para remediar el asunto.

-¿Sin uniforme de la compañia de electricidad?

-Am... si... porque... porque nosotros damos servicio particular, y por eso usamos esta ropa blanca y no la de la compañía de electricidad. Son trajes nuevos que los estamos probando.

-Ah... ok, esta bien.-dijo el adulto.

¡Que nervios! Por poco y nos atrapan. Nos dirigimos lentamente al niño, sin detonar algún tipo de sonido fuerte que asustara a este.

-Hola... je-dice Tony al niño.

El niño no responde el saludo.

-Emm... ¿como te la estas pasando en esta fiesta? ¿Bien? ¿Mal? ¿Como?- dice Samantha.

El niño sigue sin responder.

-Vaya, de seguro tienes hambre, ¿Quieres que te traiga pastel u otra cosa?-digo yo ahora.

El niño, al estar sentado en una silla de madera en la esquina del patio, con la mirada en el piso, se da la vuelta en señal de evitar responder a nuestras preguntas simples y de recibirlas.

-¿Estas bien? ¿Que tienes?-dice ahora Alin.

-Dejenme... solo-responde por primera vez aquel niño pero en voz baja.

-¿Mande? No te escuche, perdona.-Dice otra vez Alin.

-¡Que me dejen solo!-respondió el niño, pero esta vez se le noto enojado y con poder de gritar, pero no pudo debido a un nudo en la garganta. Después de gritarnos, se le derrama una lágrima en la mejilla, se limpia con su brazo derecho y cierra los ojos, evitando llorar.

-Al parecer tienes un problema, si quieres, dinos que pasa, platicamos y resolvemos juntos ¿Que te parece?-dice Alin.

-No, gracias... pero no. Prefiero... prefiero intentarlo hacerlo solo.-dice el niño.

-¿Intentar que?

-Intentar... conseguir amigos.

-Oh, ahora ya entiendo, te sientes mal por no poder hacer bien amigos ¿Cierto?-intervengo yo

-Mmm... digamos que si, pero... ash... me choca algo. ¿Ven ese niño sentado, en el centro de esa mesa?-señala a Tony de pequeño mientras este levanta un vaso, fingiendo "brindar".-Me choca como el puede hacer amigos fácilmente y yo no. Si el empieza a decir algo, todos le hacen caso, en cambio a mi, me ignoran, poniendo cualquier excusa para evitarme.

-No te debes sentir así, solo no te tienes que aferrar a las personas que no te quieren o te ignoran, solo enfocate en los que te vean como algo valioso, tarde o temprano, llegara esa amistad, solo ten paciencia.-dije yo.

-Ya me canse, ¿Saben algo? Me voy a ir de esta... sucia fiesta solo para "populares"-dice enojado el niño.

En eso, se ve como el pastel va llegando a ponerse en la mesa en donde todos los demás niños se encontraban sentados platicando. Ya estabamos en contrarreloj. ¿Como hacerle para dar un "tiempo" antes de partir el pastel para que el se junte con ellos? Estuvimos todos desesperados pensando en alguna forma, hasta que Samantha se le ocurrió algo peculiar: jugar "El juego de las sillas".

-Oigan chicos-dice ella-¿Que les parece si todos jugamos a las sillas antes de partir el pastel?

-¡Si!-responden gritando todos los niños emocionado al unísono (bueno, casi todos).

-Oye, ¿Y que les vamos de dar de premio al que gane?-dice Tony entre dientes a Samantha.

-¿Y si vas por la bolsa de dulces mas grande que encuentres en la tienda?-responde ella de la misma forma a el.

-Pero... no tengo tanto dinero.

-Bueno, compra algo que te alcance, cuando llegues yo te pago, asi que no te pongas de nena y ve por los dulces.

-Ok

Tony se va a la tienda a buscar los dulces mientras los demás estamos organizando el área de juego. Los niños, emocionados, empiezan a sentarse en cada una de las sillas puestas espalda contra espalda, tal como se hace en el juego original. Yo busque en mi celular la poca musica que tenia para ponerla de ambiente para el juego con un cable que se conectaba a un estéreo grande que se encontraba fuera de la casa.

Invitamos al niño a que se uniera al juego, pero se puso de brazos cruzados y ceño fruncido en señal de negación. Ante esto, Alin se le acerca, le dice algo al oído del pequeño, cambiándole de opinión, por lo cual se levanto de la silla y se dirigió al campo de juego.

El juego estuvo divertido, entre risas y gritos de los niños y padres de familia que contemplaban felices de aquel juego entre niños. Pero lo que me impresiono mas, fue como Cristopher se movía en cada ronda, era rápido el niño, que al final el resultó ganador de aquel magnifico juego. Justo llego Tony cuando todo termino. El traía en una bolsa verde de aza paletas, chicles y mentas para todos los niños, pero para el ganador (que fue Cris) le dio un chicle grande sabor mora, el cual quedo fascinado.

Entre eso, vimos como un niño le pregunto a Cris si el podia ir a su casa por su cumple en dos días, el cual el respondió afirmativamente. Nuestro plan ya había sido cumplido.

-Parece que lo lograron chicos.-dice la voz-Ahora bien, suban a la casa del segundo piso, donde les espera otro viaje casi igual como este.

Todos nos dirigimos a esa puerta de la casa y vimos que ya no daba paso a la casa, sino a la misma luz cegante que nos absorbió en aquel cuarto. Esta vez, cuando entramos en el, la voz dijo:

"Ahora seguirá la historia de alguien mas, el cual revelaría un secreto tan malo que los hará dudar sobre si hacen bien lo que hacen actualmente."