Manos cálidas (KagexYama)

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-Tobio...mientras lavaba encontré una camisa de Tadashi-kun-su madre dejó una bolsa-...pensaba entregársela yo misma, pero no ha venido últimamente...acaso ¿Pelearon?

-Esta saliendo con alguien...no hay motivos para que venga

-¡¿Qué?!...pero si ustedes estaban saliendo-Kageyama observó a su madre preocupado, ¿Los había descubierto?-...no me mires así, soy tu madre...jamás habías traído alguien a casa y menos para que se quedara a dormir... ¿Creíste que pensaría que solo eran amigos?

-No quiero hablar de esto y menos con mi madre...-desvió la mirada molesto

-Bien, bien...si no quieres hablar no te obligaré, pero ten-le acercó la bolsa-...tendrás que entregar su camisa, y espero que tengan una bonita charla

La madre se marchó, Kageyama no estaba de humor...en especial porque no quería hablar con él y menos acercarse...¿Cómo podría enfrentarle después de todo lo que dijo?

El amor correspondido debía ser algo hermoso, pero Kageyama había estropeado todo...dejo ir a Yamaguchi, lo mando directamente hacia los brazos de Tsukihsima, sabia que el pecoso estaba en lo cierto...ya no podrían volver a ser lo de antes, ahora él estaba saliendo con el molesto rubio y Kageyama solo se lamentaba por todo lo que ocurrido.

-Neee...Kageyama...¿Hasta cuando piensas estar enojado?-suspiró la rubia

-Hasta que se me de la gana....¿No ven la realidad de las cosas?...ahora esta todo peor que antes

-¡IDIOTA!...-Hinata le gritó-deja de quejarte hombre, en primer lugar debiste desde un principio decir todo lo que sentías, pero eres cobarde...así que no nos culpes por esto, nosotros solo te ayudamos y tu desperdiciaste esta oportunidad.

-¡LO SE!...todo eso ya lo se, por eso estoy tan disgustado

Cuando la práctica terminó, Kageyama buscó al pecoso, pero no lo encontró...pensó que quizás estaba en el baño, luego de un buen rato decido ir en su búsqueda. Llevaba la bolsa que le había pasado su madre.

Pero no lo encontró...supuso que no habría más opción que contar con su ayuda, Tsukishima caminaba más adelante solo, no llevaba puesto sus audífonos así que el rey aprovechó la oportunidad.

-Tsukishima-el rey llegó hasta su lado-...¿Dónde esta Yamaguchi?

-Dijo que tenia algo que hacer-no apartó su vista del camino

-Puedes entregarle esto...-el rubio lo observó esperando algún tipo explicación-...es una camisa que se quedó en mi casa

-No soy el chico de los mandados-dijo molesto, pero de todas maneras tomó la bolsa-...así que...ustedes, si tenían ese tipo relación...no lo creí cuando Yamaguchi me lo contó...¿Vienes a presumir?

-El único que debe presumir aquí, eres tu-lo observó molesto-...eres el que esta saliendo con Yamaguchi

-¿Qué se siente ser mi reemplazo?-se rió sarcásticamente

-Nada mal...el reemplazo sustituyo al personaje principal...dime ¿Qué se siente ser el segundo?

-Seré el segundo, pero también seré el ultimo

-Espero que lo disfrutes tanto como yo...-apresuró el paso para irse a su casa, pero antes de tomar el desvió, se giró y observó al rubio-...no dejes que Yamaguchi te haga sexo oral...es condenadamente bueno en eso...

Sin esperar la respuesta del molesto rubio, Kageyama se fue en paz, no era lo que tenia pensado decir, pero ya se había estado a costumbrado a decir todo lo contrario que tenía en mente...

Hitoka había dado la idea de organizar una fiesta sorpresa para los de tercer año, que dentro de poco se graduarían, así que se repartieron las tareas. Kageyama también quiso ayudar, de cierta manera era una forma para tener su mente ocupada mientras no estaba jugando vóley.

Pero no servia de nada, de todas formas estaba pendiente de aquella persona que aparentemente no estaba aquel día...no había estado en la practica, ni después cuando se juntaron a preparar los adornos, quería preguntar donde estaba...pero su orgullo era más fuerte...

Comenzó a preocuparse en serio cuando al  día siguiente no fue a clases...¿Qué le habría pasado? Miraba su celular pensado en una posible escusa para hablar con él y saber que estaba pasando, pero no había nada que pudiera decir para ocultar lo muy preocupado que estaba...

Si le preguntaba a Hitoka, ella lo molestaría, si le preguntaba a Hinata también lo haría...Tsukishima no era una opción, obviamente el no le diría nada sobre Yamaguchi...¿Qué podría hacer?

Con el tercer día, en el cual Yamaguchi no apareció...Kageyama pensó que debía tirar su orgullo, no podía permitir que su amada persona despareciera sin ninguna razón.

Caminó por el pasillo en busca de Sugawara, estaba seguro que el podría tener algún tipo de información y no sería molesto conversar con él como lo seria con Hitoka o Hinata.

-Kageyama...

Se giró y se encontró con Tsukishima quien estaba parado contra la pared...tenía una expresión de tranquilidad en su rostro,entonces no estaba buscando problemas. El rey se acercó para saber que demonios era lo quería, además estaba apurado.

-¿Qué sientes por Yamaguchi?

-No tengo tiempo para tus estupidos juegos sarcásticos-se giró para marcharse

-¿Por qué no eres sincero?-se acomodó los lentes-....te diré donde esta Yamaguchi si me respondes

-Tu...¿Para que demonios quieres saber eso?

-Solo contesta de una maldita vez...-chasqueo la lengua molesto

-Me gusta...¿Contento?

-Yamaguchi no volverá...tomará el tren hoy,  a las seis, se trasladara-se cruzó de brazos

-¿Haa?...-el corazón del rey se retorció, ¿No podía ser verdad? ¿Por qué tan de repente?-...no te creo

-Me le declaré...pero fui rechazado porque a Yamaguchi le gusta el estúpido rey, así que no estamos saliendo...

-¿Por qué no me lo dijo antes?... ¿Porque tu me dices esto?

-¿Por qué?...tu asumes las cosas antes de que pasen, quería ver hasta donde llegaba tu cobardía, para Yamaguchi tu eres más importante...no pudo soportar todo esto y pidió ser trasladado...no quería verte la cara

La mente de Kageyama estaba en blanco ¿De verdad no lo volvería a ver? ¿De verdad todo terminaría de esta manera? ¿Por qué no solo se arriesgó y le confesó todo lo que sentía?

-El reemplazo se convirtió en el personaje principal ¿No?...es una estúpida ironía...me alegra que ninguno de los fuera correspondido...pero al menos yo me declaré-dijo con sarcasmo-...en fin, ya no quiero seguir perturbando tu estúpida mente, pero quería que supieras que, fuiste el culpable de que Yamaguchi abandonara todo lo que más quería...Kageyama

¡NO!...¡NO! ¡DE NINGUNA MANERA!...de ninguna manera el rey quería permitir que las cosas terminaran así, no podía permitirse que el ultimo recuerdo de Yamaguchi, fuera aquel rostro pidiendo disculpas por algo que ni siquiera fue su culpa...no lo permitiría.

Con la ayuda de Hitoka, consiguió el numero de la familia y les pidió que le dijeran en que estación se encontraba. Kageyama no lo pensó y salió corriendo..si la decisión estaba tomada, no podría hacer nada...pero esta vez, hablaría correctamente las cosas...no quería que su último recuerdo fuera aquel rostro a punto de llorar...

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