Almas En Llamas

"Tiempos"

Quisiera haberte conocido antes, no por cobardía, no porque no quisiera, pero siento que llegué en el momento necesario pero no en el indicado para nosotros.

La historia que nos planteo la vida podría ser la más hermosa que nos podría ocurrir a ti y a mí. Es por eso, que quisiera haberte conocido antes, simplemente esa es la verdad.

Tu sensual y oscura mirada, pero también dulce y tierna, me provoca estremecimientos cada vez que me miras y sé que no es exageración. Sé que tus ojos pueden reflejar las maravillas de tu alma y me llevan a imaginarme a tu lado. Puedo perderme en esa mirada sin ganas de ser rescatada. Puedo declararme completamente perdida en ella. Pero debimos conocernos antes, no porque no brilles con plenitud o porque no seas el indicado, solo que antes habría sido un poco más sencillo.

No es por egoísmo que te digo esto, pues a pesar de no deber, me he extraviado en ti, en tu forma de ser, en tu gran corazón y en la luz de tu alma.

Me has cautivado con tu experimentado conocimiento, con la sabiduría de tus años, con tu inesperada, pero bienvenida llegada. Llegaste así, de repente y sin avisar. Te cruzaste en mi camino cautivándome con tu auténtica sonrisa, contagiosa y llena de vida. Me has cautivado con tus ardientes miradas, con miradas que ponen mi mundo del revés. Fue tu constancia, tu sinceridad y tu predisposición las que me hacían saber que estabas aquí, que me completaban y me iluminaban.

Eres la parte que falta para completar el rompecabezas que soy.

Me atrapaste, en todos los sentidos posibles. Alteraste mi rutina, me devolviste los colores, me alentaste, me ayudaste, me tendiste tu mano y no me soltaste. Me enseñaste a volar. Pero creo que debimos conocernos antes y no es por nuestra edad, no es por los años o por el paso del tiempo. Es porque ahora, precisamente ahora, no es posible.

Tu vida y tu tiempo están ocupados y yo llegue tarde.

Es irónico, porque sabemos que estamos irremediablemente unidos por nuestras almas, las cuales se buscarán constantemente. Estamos unidos por sentimientos y emociones.

Admiro tu valor para luchar por aquello que quieres. Sinceramente me gustaría poder tener tiempo para darte más de mi porque tú, mi ángel, te mereces todo lo que alguien como yo, pueda darte. Te mereces mucho más. Por años busque alguien como tú, alguien que pueda ver más allá de las apariencias, alguien que descubra todas y cada una de las facetas de mi alma. Alguien que me valore como soy.

Puedes creerme, habría caído en tus brazos sin dudarlo.

Tan dulce y tan sincero, con esa encantadora y oscura mirada, con ese brillo tan especial en tus ojos pero más que nada con tu hermosa alma que irradia bondad, sencillez, madurez y cariño. Porque lo das todo sin esperar nada a cambio. Porque prefieres sufrir tu, y no ver sufrir a los demás. No encuentro las suficientes palabras para describirte...solo entiende, que para mí, eres especial. Eres el hombre más especial que he conocido en mi vida, completamente único e inigualable. De corazón noble.

Debí conocerte antes. Antes de que lo nuestro fuera solo un secreto. Antes de que fuéramos prohibidos. Aunque pienso que el encanto de lo nuestro es que, llegaste en el momento adecuado para mí. El momento en que yo necesitaba a alguien como tú.

Entraste a cambiar mi mundo completamente, haciéndome ver que, a veces, las cosas que no planeamos son las que mejor resultan. Contigo comprendí que la vida está compuesta de momentos.

Momentos especialmente diseñados para ser vividos. Tú, me llenaste de esos momentos y fueron los más hermosos que he compartido con alguien. Provocaste tempestades, dejando caos a tu paso, pero un maravilloso caos, pues créeme no dudaría ni un minuto en dejar que entres una vez más. No dudaría en dejarte desordenar mi vida aunque, esa vez, tampoco dudaría en pedirte que te quedes conmigo.

Vivimos poco tiempo con tanta intensidad que parecieron años y en el proceso comprendimos que no podemos ser más que un dulce recuerdo.

Duele no poder mirarte, no poder besarte, ni abrazarte. No poder tomar tu mano, no poder desearte a mi lado. No poder dormir en tus brazos para despertarme en ellos. Pero es así como debe ser.

Algún día miraremos al pasado y recordaremos estos momentos, porque yo no te voy a olvidar. No te quiero olvidar y aunque quisiera no podría. Vivirás en mi memoria, en mis pensamientos, en mi mente. Tienes tu lugar en mi corazón y en mi alma. Cada recuerdo dibujará una sonrisa sincera e iluminará nuestras miradas, sin que importe el lugar, las personas o el momento. Tal vez, nos preguntaremos que hubiera pasado con nosotros si...hubiéramos tenido más tiempo, más opciones.

Te prometo que jamás olvidaré nuestros mágicos momentos. Prometo recordarte con una sonrisa y con esperanza. Si, con esperanza, con un tal vez, con un posible.

Nuestra historia estará en nuestros corazones con la fuerza de la nostalgia, con la fuerza del cariño que nos tenemos, con la intensidad que nos caracteriza, con el valor inigualable que tenemos en la vida del otro.

En fin, tal vez, debimos conocernos antes o tal vez no. Quizás nos volveremos a encontrar en otro tiempo, en otro lugar y ahí podríamos ser....tu y yo.-