Un par de horas mas tarde, en un local de yogur helado...
-Vamos. -Dice Gonzalo al mismo tiempo que guarda la navaja en el bolsillo.
-¿A dónde? -Pregunta Xavier.
-¿A dónde va a ser? Pues a matar al gilipollas de Alberto.
-Gonzalo, eso no es buena idea.
-Mira quien fue a hablar, el que mató a su ex mejor amigo por salir con su ex novia...Xavier se levanta bruscamente de la silla y lo agarra del pescuezo.
-Mira, Gonzalo. Me tienes hasta los cojones. Te dije que nunca más me recordases eso.
-Ya, lo se. Pero, colega. Me pones de los nervios.
-¿Y que te crees? ¿Que tu a mi no?
-Xavier... Estoy muy rayado. ¿Me vas a ayudar?
-No, Gonzalo. No lo voy a hacer.
-Está bien. Entonces tendré que ir yo solo.Gonzalo sale del establecimiento. Xavier sabe que va a hacer una locura, pero aun así no lo detiene. Prefiere mantenerse al margen, pues sabe que si se mete va a ser peor.
Gonzalo camina al mismo tiempo que le manda un mensaje a Alberto diciéndole para quedar en una zona de la ciudad que esta abandonada y no hay nadie. Después de enviar el mensaje se dirige al lugar. Tiene que esperar bastante tiempo, pues Alberto no es que llegue lo que se dice puntual. Es un sitio al aire libre pero abandonado. No hay nadie y no se escucha ni un ruido. Sólo se pueden ver coches destartalados, sofás viejos y maleza. Mucha maleza.
-¡Ey, Gonzalo! -Escucha a lo lejos.
-¿Sí? -Pregunta
-Soy yo, Alberto.
-Ven y no hagas mucho ruido.Alberto se aproxima hacia donde está Gonzalo sin hacer el mínimo ruido.
-Bueno, ¿qué pasa? ¿Por qué me citaste en este lugar? -Pregunta Alberto.
-Nada. Quería hablarte de Anaïs.
-Mira, Gonzalo yo...
-Ya lo sé, Alberto. Sé que le hiciste daño, se por todo lo que paso. Y también se que la quieres reconquistar y que tu la amas y que no se qué y no se cuanto.
-No es eso... En verdad la amo.
-Ya... Claro. -Dice, al mismo tiempo que va sacando la navaja. Alberto la ve.
-Gonzalo... ¿Qué vas a hacer?
-¿No lo ves? Voy a matarte.
-¿Qué?
-Te mataré, Alberto. -Aproxima la navaja.
-¡No, por favor! Gonzalo, ¡no lo hagas por mi! ¡Hazlo por el hijo de Mery!
-¿Qué pinta el hijo de Mery aquí?
-Yo soy su padre.
-¿Qué dices? ¡Eso es imposible!
-Es posible.
-¡No! ¡Es imposible! Porque su padre... Soy yo.Los dos se quedan callados hasta que Gonzalo vuelve a hablar.
-Bueno, en realidad no.
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Green Eyes
Teen FictionEl accidente de Martin hizo ver a Berta lo que realmente sentía por él. Pero cuando se atreve a ir a confesarle sus sentimientos... Alguien se le ha adelantado. Y a todo esto se le junta un triángulo amoroso con Iñaki. Anaïs descubrirá que su novio...