Capítulo 11

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Ese mismo día, de noche

Anaïs camina sola por la ciudad. Parece que oye un ruido. Es una voz familiar. Una voz que conoce muy bien. Son Xavier y Iñaki.

-Va, tío. Calla y sube. -parece que discuten.
-Ya voy joder. No me des órdenes.

Xavier y Iñaki entran en un edificio.
Anaïs los sigue dentro. ¿Qué estará pasando?
Suben a lo alto del edificio. A la azotea. Xavier e Iñaki empiezan a hablar

-Me pareció exagerado lo de matar al chaval
-Él me hizo algo horrible y tu lo sabes. Debia hacer algo. -contesta Xavier.
-Ya pero... ¿Matarlo? Es muy exagerado.

Anaïs no se lo puede creer.

-¿¡Qué!? -pregunta Anaïs. -¿Qué tú qué?
-Anaïs... Mi vida. Iba siendo hora de que te enterases.
-¿Enterarme de que? ¿De que mi novio es un puto asesino?
-No soy un asesino. Tenia que hacerlo. Debía matarlo.
-¿Que que?
-A ver. Hace tiempo salía con Marina pero ella me dejo por Sebastián. El me la quitó.
-¡Ese no es motivo para matar a alguien! -responde. Alterada.
-Tenia que hacerlo. Pero bueno. Ya nada me importa. Ahora te tengo a ti.
-No Xavier. Ya no.
-¿Qué? ¿Me estás dejando?
-Sí.
-No puedes dejarme.
-Sí que puedo.
-Si lo haces me suicido.
-¡Pues suicidate! -Anaïs sale corriendo del edificio.

Xavier se acerca al borde del precipicio.

-Tío. ¡No hagas una locura! -le grita Iñaki
-Iñaki, tío. Dile a Marina que lo hice porque tenía que hacerlo y dile a mi madre que la quiero y dile a Anaïs que sin ella la vida no tiene sentido.

Xavier se tira al vacío. Acabando asi con su vida. O al menos, intentándolo.

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