Princesa griega - Los Tres Reinos #1 (Nico di Angelo)

Capitulo 4: ¿Hija de...?

.... Estamos cayendo ¡Reacciona! — grita mi conciencia

Pero por extraño que parezca no tenia miedo, de hecho me sentía segura como si estuviera en mi territorio. Sin pensarlo imagine un suelo debajo de mis pies y al instante sentí un tirón en el abdomen y deje de caer.

Me imagino yendo hacia arriba y me da risa al recordar que parezco la mujer maravilla volando. Comienzo atacar y destruir a todas las dracaenas que me encuentro.

— Oficialmente estas recordando — dijo Luna que llego a mi lado cuando no había más monstruos.

Noto que su pelaje blanco esta teñido de rojo. Controlo el viendo para que lleguemos al campamento más rápido sin que ella tenga que hacer mucho esfuerzo.

— Kayla ¿Donde te habías metido? — preguntó Percy que apareció de la nada, según Luna muy cerca del campamento.

— ¿Donde te metiste tú? Se supone que debías guiarme — le reproche

— No eres mi responsabilidad solo te encontré de casualidad — dijo molesto y se va volando en su pegaso negro.

— Lo lamento princesa — me dijo el pegaso marron y se va volando detrás de Percy

¿Princesa?

— Ya te explicare todo, ahora creo que ya no puedo seguir en el aire — me dijo Luna que apenas podía mantener bien los ojos abiertos

Acelero la velocidad y llegamos a un arco de piedra, grito por ayuda en cuanto tocamos el suelo.

Un rubio oji azul aparece y rápidamente grita varios nombres. Llegan más rubios con una maleta gigante. ¿Estoy en un campamento de rubios?

— Necesito que se acueste — dijo el ojiazul. Lo admito me encantan sus ojos azules

— Luna ¿Puedes acostarte? — le pregunto y ella asiente

Se sienta despacio y luego se tumba de lado.

El rubio limpia la herida y le cose unos puntos. Le pone algo raro y veo como la herida se empieza a cerrar sola, pero no se cura por completo. La venda antes de levantarse y recoger sus cosas.

— Listo, solo necesita reposo junto a mis hermanos la llevaremos al establo — asiento con la cabeza y lo miro agradecida — Mi nombre es Will Solace, hijo de Apolo

— Kayla Kane, hija de anónimo — respondí, él se rió y me sonrió.

— Tranquila ya te reconocerán ¿Llegaste sola o alguien te trajo?

— Técnicamente un tal Percy me trajo pero me dejo a mi suerte a mitad de camino — dije un poco molesta

¿Un poco?

Okey, muy molesta. Pero si el idiota de Jackson hubiera estado con nosotras seguramente Luna estaría bien.

— Seguro tuvo un mal día, Percy es buena persona — lo defiende el rubio mientras yo solo asiento con la cabeza. Sinceramente no estoy nada convencida de lo que dijo— No te preocupes por tu pegaso que ella estará con buenas manos — dijo al ver como miraba preocupada a Luna que la iban llevando en una camilla aunque se notaba que era muy pesada. — ¿Quieres que te acompañe a la casa grande?

— ¿La casa grande? —pregunte confundida

— Vamos, tienes mucho conocer — Will pasa su brazo por mi hombros y comienza a contarme todo lo que hay aquí, sobre los dioses y de Quirón el centauro que junto a Dionisio dirigen este campamento.

Recorremos el pabellón, admito que la cabaña que más me gusto fue la primera. Vamos al lago, luego pasamos por el muro de lava, el campo de entrenamiento. El campo de fresas, en donde salimos corriendo ya que las hijas de Demeter nos perseguían por que robe unas poquitas fresitas del arbusto.