Capítulo 7.

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Resoplé con desesperación mientras leía la carta.

-¿Y yo qué pido?-pregunté-No sé qué coger…

-¿Qué te parece si pedimos una pizza para las dos?-sugirió Bego.

-Bestial. ¿De qué la quieres? Puedes pedir la que quieras, eres libre. Pero, por favor-dije, recordando mi aversión por el marisco-la de marisco no.

-Descuida, esa a mí tampoco me gusta.

-Bien.

Entonces, la mano de Harry, supongo que fue sin querer, rozó mi mano derecha y me giré para mirarle.

-¿Qué te crees que haces tocándome la mano?

-¿Yo?-dijo él, fingiendo sorpresa-Pero si has sido tú, que querías cogerme de la mano.

-Perdona, ¿qué yo qué? ¿Tengo pinta de desesperada?

El fondo norte de la mesa rió.

-Mira-dije, trazando con el dedo sobre la mesa una línea-Esta es mi parte de la mesa y esta es la tuya. Tú te quedas en la tuya y yo en la mía. Está prohibido pasar de la línea.

-¿Y qué pasa si lo hago?

-Que te explota la cabeza.

Más risas.

-Vosotros dos sois un caso-dijo Louis.

-No me incluyas en el mismo pronombre que a él-dije, señalando a Harry con la cabeza.

-Ja, ni que yo quisiera estar incluido contigo en…

-Cucho, cucho que no te escucho.

-No querría ir contigo ni a la vuelta de la esquina, vamos…

-Pío, pío, que paso de tus rizos.

-Sí, permíteme dudarlo.

Me llevé las manos a la cara de pura desesperación.

-¿Nadie quiere cambiarme el sitio?-dije, con pena.

-¿Por qué?-preguntó Harry-¿Has decidido que ya no me quieres de primer plato?

-No, porque como no me vaya de aquí te voy a soltar tal ostia que se te van a alisar los rizos.

-Dios-dijo Liam-Que agresividad.

-Puedo ser más agresiva, ¿sabes? Pero sólo como curiosidad.

-¿Ya han decidido lo que van a tomar?-dijo el camarero mostacho barra de pan.

Zayn fue el encargado de decírselo, Mostachini lo apuntó y se fue, feliz. Hay que ver lo felices que son algunas personas con nada.

Al instante, apareció con las bebidas y yo eché un trago a mi Coca-Cola. ¡Aw, pero si me había dado pajita y todo!

-Eh-dije, observando los vasos de los demás-¿Por qué el mío es el único que tiene pajita?

-Puede que, por tu altura, se pensaron que eres una niña pequeña-dijo Niall.

-¡Ah! Creo que les mataré a todos, aunque a lo mejor ellos no tienen la culpa. Hoy en día, el mundo está muy estereotipado.

-¿Y eso?

 -¿Tengo pinta de saberlo? Solo soy una niña con una pajita.

Nos pusimos a hablar de todo y de nada en general, esperando el regreso de Mostachini con la ansiada comida.

Cogí mi vaso y me llevé la pajita a los labios.

Moví las piernas para poner una sobre otra y entonces rocé, sin querer, con la pierna, la parte que Louis llevaba remangada de los pantalones.

Forever youngDonde viven las historias. Descúbrelo ahora