Te necesito [Shizaya|Omegaverse]

Capitulo I:Ni loco se lo digo

Me encontraba sentado en el sofá de mi apartamento, mirando con detenimiento aquel pedazo de papel que tenía en mis manos. Releía una y otra vez las palabras marcadas en color rojo, palabras que hubiera preferido, que nunca en mi vida, estuvieran relacionadas a mi persona.

Prueba de embarazo: POSITIVA.

"¿Esto debe ser una broma, cierto?" Era la pregunta que desde hace una semana me hacía en mis adentros. Pero para mi mala suerte, no lo era.

[Hace una semana]

Izaya se encontraba tranquilamente en su escritorio, mirando algunos documentos que la familia Awakasu le había enviado; ya saben algún que otro pedido como informante, algunos cheques, sobres de dinero y alguna que otra carta dándole las "gracias" por su trabajo.

Se encontraba aburrido; quería salir a pasear por su ciudad, hacer algún plan, saltar en edificio en edifico pero no podía... Si se arriesgaba a esto se encontraría con él. Y eso era algo que prefería evitar a toda costa por estos momentos.

Todavía no podía borrar de su mente lo que había ocurrido con el ex barman hace apenas dos semanas, algo que prefiere rotundamente borrar de su mente pero cada vez su subconsciente le recordaba una y otra vez lo ocurrido en su apartamento.

Sacudió su cabeza fuertemente, sintiendo como los colores se le subían al rostro. "No recuerdes, no recuerdes, no recuerdes. Solo olvídalo, haz como si 'eso' nunca hubiera ocurrido. ¡Solo olvídalo!" Se repetía una y otra vez el informante.

Escucho como la puerta principal fue azotada, Namie se adentro en el apartamento y dejo todas sus cosas en el sofá.

—Bueno, como se que no me darás vacaciones ¿Qué quieres que haga?—pregunto con cansancio.

— ¿Por qué no comienzas ordenando aquellos archivos que están por allá?— dijo señalando estos.

Sin rechistar la secretaria fue a hacer lo que le había pedido el pelinegro, pero se sorprendió al ver a este correr, a toda velocidad, hasta el baño.

Por mera curiosidad, se acerco a este y toco tres veces, sin recibir ninguna respuesta a cambio.

— ¿Izaya?— siguió insistiendo—. Sé que algunas veces le pido a los dioses que te mueras pero por favor no lo hagas, todavía no me has pagado mis vacaciones.

Escucho el sonido del inodoro, y el agua del lavabo. La puerta se abrió dando la imagen de un Izaya mas pálido de lo normal, y frotándose su estomago.

— ¿Estás bien? Te veo un poquito decaído— bromeo, mientras hacía con sus manos un gesto de 'pequeñez'

Izaya solo se limito a reír con sarcasmo y decir un 'Que graciosa...' para después dirigirse de nuevo a su amada silla giratoria.

—Deberías ir a donde tu amiguito el doctor, ¿No lo crees?

—~Ah Namie-chan, se preocupa por mi~

—No, solo no quiero venir un día aquí y encontrarme con tu cadáver. Después de todo seria yo la que limpiaría el desastre.

***

—Izaya, que grata sorpresa tenerte aquí — exclamo Shinra abrazando efusivamente a su amigo— ¿Necesitas mas supresores?