—Kuru-nee~ Me duelen los pies de tanto caminar—Exclamo la castaña mirando con cansancio a su gemela quien asintió. — ¿Cómo cuanto llevamos caminando? ¿Dos horas?
—cuatro— respondió Kururi.
Las gemelas habían estado caminando por toda Shinjuku e Ikebukuro, entrando en tienda en tienda buscando un pequeño obsequio para su futuro sobrino o sobrina.
Sabían que faltaban algunos meses para que su testarudo hermano mayor diera a luz pero de todas maneras no quitaba el hecho de que el tiempo pasaba muy rápido y en tan solo en un parpadeo los tres meses faltantes ya no serian nada.
Querían encontrar algo lindo, tenían muchas opciones pero de cada cinco descartaban tres.
No querían comprar ropa de bebe, después de todo —y para sorpresa de muchos— Shinra no había dicho ningún indicio del sexo del bebe, de igual manera tenían la idea de comprar algún pequeño juguete pero en cada tienda que entraban eran juguetes que no les llamaba la atención ¿Tan difícil era encontrar un regalo para un bebé?
Las dos gemelas siguieron caminando a un paso un poco desganado, observando por encima algunas tiendas. Mairu y Kururi detuvieron su caminata, al ver a lo lejos a una mini van muy conocida para ellas, cerca de esta se encontraban Erika y Walker teniendo una conversación muy animada probablemente de algún manga u anime nuevo o de moda; Togusa en su celular con una cara de éxtasis —lo más probable de algún foro o grupo de fans de Ruri Hijiribe— y por supuesto Kadota apoyado en la Van, como siempre transmitiendo un aura de calma y serenidad.
Este ultimo al ver a las gemelas, las saludo con una amable sonrisa y estas de igual forma respondieron este gesto.
—Kururi, Mairu ¿Qué hacen por aquí?—pregunto el mayor.
Kururi miro con disimulo a su alrededor, cerciorándose de que nadie estuviera demasiado cerca para escucharlos para después acercarse al mayor y susurrar en su oído.
—Estamos buscando un regalo para nuestro futuro sobrino o sobrina, pero ya hemos caminado casi todo el centro de Ikebukuro y algunas tiendas de Shinjuku pero no hemos encontrado algo lindo— Kadota miro enternecido a las dos castañas. Después de todo no se le hacía sorpresa que estas estuvieran buscando algún pequeño presente para el bebé de Izaya —ya que estas estaban más impacientes por la llegada de este—.
Las gemelas aunque no lo demostraran muy a menudo le tenían un inmenso cariño a su hermano mayor, Kadota podía recordar aquellos días de preparatoria cuando acompañaba a Izaya hasta su casa y como estas al verlo llegar corrían alegremente a recibir a su hermano.
— ¿Y cómo está Izaya?—Kadota tenía ya un tiempo sin ir a visitar al pelinegro, había tenido más trabajo de lo normal estos días, quitándole el tiempo para ir a visitarlo—pero eso no lo detenía de enviarle alguna que otra golosina al Omega con las gemelas o con Namie—.
—Está bien— respondieron al unisonó—.Aunque ahora mismo disminuyeron sus antojos.
Kadota rio—Me lo imaginaba, ¿Y que tienen pensado en regalarle?
—No tenemos idea
— ¿Necesitan mi ayuda chicas?— Erika se introdujo en la conversación, asustando un poco a las dos pequeñas Betas y al Alfa.
—Hola Erika-san, bueno estamos buscando un regalo pero no sabemos en donde encontrar alguna tienda en donde vendan algo interesante—Explico Mairu.
— ¿Emm, creo que conozco una tienda?—Llevo uno de sus manos hasta su barbilla, masajeándola—Queda cerca de aquí, si quieren las llevo.
Las dos castañas se miraron, diciendo en su mirada 'No hay nada que perder' y asintieron al mismo tiempo.
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Te necesito [Shizaya|Omegaverse]
Fanfiction∞No soy muy buena con las descripciones que digamos, pero haré lo mejor posible∞ *** Izaya esta cansado de todos los estereotipos de los omegas, cansado de siempre...