Después de los bolos me ofrecí a ayudar a Jack a escribir un artículo sobre su clase de física aplicada en los bolos—. Como parte del club de ciencias, si escribes un informe sobre lo que has aprendido durante nuestras actividades, puedes cambiarla por una tarea perdida o un una prueba fallada en la clase del Sr. Walden.
—¿En serio? Sr. Walden no parece que sea cool.
Suspiré—. Jack, la mayoría de los profesores están muy bien cuando se trata de eso. Lo creas o no, en realidad quieren ver a sus estudiantes tener éxito. Si ven que realmente te estas dedicando, son por lo general bastante flexibles.
—Si tú lo dices. Pero si vamos a escribir un artículo, vamos a ir a mi casa. Mi mamá ha estado bastante malhumorada ya que ella y Kaitlin están peleadas. Tal vez si te ve, se ablandara.
Jack vio la expresión de mi cara y dijo—, No te preocupes, Ian y la Pasea Perros ( riefere a que la novia de Ian lo lleva con correa) pasan la mayor parte de su tiempo en su casa.
No tenía más excusas, así que llamé a mi mamá y me fui a la casa de Jack, por primera vez desde las vacaciones de invierno.
La casa de West, a pesar de ser tres veces más grande que la acogedora dos dormitorios que mi mamá y yo alquilemos, siempre se ha sentido como una segunda casa para mí. Incluso en cierto modo tenía mi propia habitación. Bueno, técnicamente, era una habitación de invitados, pero guarde un montón de mis cosas ya que he venido muchas veces. Se sentía bien estar de vuelta, pero al mismo tiempo se sentía diferente.
—¡Laura! Hola, cariño!
Ana estaba sentada en su escritorio con un montón de papeles apilados casi hasta el techo. Era un privada asesora fiscal, por lo que de enero a abril básicamente vivía en su oficina. El resto del año tenía mucha más libertad para pasar el rato y hacer cosas de ama de casa como cocinar.
Entré en la oficina y le di a la madre de Jack un abrazo—. Hola, Ana. Espero que no te importe que viniera. Sé que ha sido incomodo desde el Año Nuevo.
—Siempre eres bienvenida aquí, lo sabes. Eres prácticamente de la familia. Se supone que debes estar pelada con mis hijos.
—No creo que sea solo una pelea —dije tristemente.
Los ojos de Ana se suavizaron—. Ustedes lo solucionaran. —Dirigió su mirada a Jack y encontró su sonrisa de nuevo—. Pero tú y Jack se han hecho mucho más cercanos, así que no todo está perdido, ¿no?
—De acuerdo. —Quería sentirme feliz, pero tenía que sacar algo de mi pecho—. Ana, lo siento por lo que pasó con Ian. Sólo quiero que sepas que no lo culpo.
Jack resopló con disgusto. No le hice caso y seguí el discurso que había estado ensayando desde que el me pidió que viniera—. Por favor no te enojes con mi mamá más. Sé que fue extremadamente protectora, pero eso fue mi culpa. No debería haberme asustado tanto. Debería haber comprendido mejor a Ian. En realidad no hizo nada mal y-
—¡Laura, para! —Jack dijo bruscamente, sorprendiendo tanto a la señora West como a mí—. Es posible que ya no te sientas enojada, sin embargo, pero yo sí. No puedo escucharte estar allí y defenderlo. Ian no lo merece. ¡Te trato como una mierda!
—Jack, cálmate.
—¡Es verdad, mamá! Él la abandono en la feria de ciencias, y aunque dijo que todavía quería ser su amigo, no ha hablado con ella en semanas. El primer día de regreso a la escuela, se sentó en la mesa del almuerzo con todos sus amigos, e iba a pedirle que no se sentara con él más. Iba a pedirle que se fuera de su propia mesa de almuerzo!
Ana se quedó sin aliento, y rápidamente negué con la cabeza—. Probablemente me iba a pedir que cambiara de asiento con Libby para que no me sentara a su lado.
