Capitulo Dieciseis

613 42 4
                                    

Jack

Maldito Ian hasta las profundidades más abismales del infierno. Laura estaba de regreso al punto de partida con su desamor, y yo estaba de nuevo en el punto de partida con ella. Habíamos tenido ese increíble momento —habíamos compartido su primer beso—, pero ella ni siquiera pudo mostrarme una sonrisa a la mañana siguiente en la escuela.

Toda esa semana no pude conseguir mucho más de ella que dos —o tres— frases. Estaba demasiado ocupada observando a Ian desde la distancia. Él se había reincorporado al equipo de ciencia para el almuerzo, pero estaba claro que realmente ya no era parte del equipo. Estaba seguro de que Laura se culpaba por ello.

También sé que ella quería hablar con él, pero de vez en cuando él apartaría la mirada de nuestro camino, deslumbrando

con tanto odio que haría que Laura se sintiera mal del estómago, y no pudiera atreverse a hablar con él.

Su muerte parecía que lo era todo para mí. Lo sé porque me lo dijo. Me acusó de robarle a su mejor amiga. Le dije que no era un robo si él ya la había arrojado a la acera como un pedazo de basura. Casi llegamos a los golpes por ello. La única razón por la que no le di un puñetazo fue porque eso heriría a mi pequeña y ella ya había sido herida lo suficiente. Pero

de nuevo ella vio su enojo y se culpó a sí misma.

El viernes Ian dejó la cafetería temprano. No había prestado atención, así que no estaba seguro de lo que Laura quiso decir

cuando dijo —No comió nada de su almuerzo.

—¿Qué? —pregunté.

Seguí su mirada preocupada justo a tiempo para ver a mi hermano merodeando fuera del lugar.

—Ian —explicó Laura—. No comió nada de su almuerzo. Sólo lo tiró. ¿Ha estado comiendo en casa?

—No lo sé. —Él no había salido de su habitación en toda la semana, excepto para buscar pelea conmigo. Si ahora estaba

teniendo un momento difícil, yo digo que lo dejen sufrir. Tal vez eso hará que lo piense dos veces antes de actuar como un idiota en el futuro.

Laura dejó la manzana que había estado mordisqueando. —Él está completamente solo ahora, Jack. Estás molesto con él. No quiere tener nada que ver conmigo. Nuestros amigos lo toleran, pero está claro que todos se han puesto de mi lado; y ahora que ha terminado con Mindy, no tiene a ninguno de sus nuevos amigos, tampoco. Me escabullí a su

debate de ayer por unos minutos, sólo para ver cómo estaba, y parecía que Mindy había puesto a todo su equipo en su contra. Él ya no tiene ningún amigo.

—Lo hizo él mismo, Laura.

—Lo sé, pero aún así me siento mal por él.

Laura suspiró.

—¿Por qué no vamos a hacer algo divertido esta noche? —sugerí—. O podríamos hacer algo para el experimento. No hemos

trabajado costantemente en él.

Laura me cortó con una mirada profunda. —Trabajar en el experimento es lo que hizo este lío tan grave en primer lugar.

Fue difícil para mí no perder la paciencia. Estaba tan cansado de esto. En su mayoría había estado bromeando la noche que le pedíque me besara por razones científicas. Sí, realmente pensé que eso la ayudaría, pero principalmente sólo quería besarla. Pensé que ella entendió eso, pero se había aferrado a la idea de que nuestro beso no fue nada más que un proceso de prueba y error desde que sucedió. Supongo que pensó que si se decía a sí misma que eso no significó nada, entonces tal vez Ian no estaría tan disgustado con ella por besarme... ya sabes, dado que él me considera la máxima escoria del universo.

El ExperimentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora