Envidia de envidias!
De flores benditas,
de campos verdosos...
Que yo revolvía!
Maldad en envidias!
Que flores marchitas,
de campos secados,
de mi bosque amado.
Regodeo airoso, tuyo!
De mi alma mustia,
que un día fue gozo...
Y ahora es angustia!
Mas no perfumaste
tu esencia, tu vida
nunca de ese bosque
de paz y alegría.
Desazón e ira...
A mí los recuerdos,
nostalgia, morriña,
futuro borroso...
Y a ti que te queda?
Envidia maldita!
Fantasmal...
Envidia podrida.
r.v.