Fuga |j.b.|

Capítulo 15. "Sabía que te dejaría sin palabras."

Narra _____:

*Al día siguiente hacia el mediodía*

Estoy más que lista. He decidido ponerme un vestido blanco ancho y corto, por mitad del muslo, así muy veraniego e ibicenco* y unas sandalias blancas con florecitas pequeñas decoradas. En el pelo me he hecho ondas suaves al final de él y una diadema de florecitas blancas y rosas para adornar.

Estoy sentada en el borde de mi cama perfectamente hecha, en mi cuarto perfectamente recogido y limpio y con la espalda perfectamente recta, con las manos en mi regazo, esperando que Justin venga. Pongo el aire acondicionado porque comienzo a sudar más por los nervios que por el calor.

Escucho como el pomo de la puerta del baño se gira. Se entorna pero no llego a ver a nadie.

"¿Lista?" La voz de Justin entra en mi habitación y la recorre entera, haciendola ver más bonita y más viva hasta finalmente entrar en mi y hacerme reaccionar.

"Sí, acabo de terminar." Respondo lo más tranquila que puedo.

"Vale." Dice entre risas.

Mentira. Llevo una hora sentada en la puta cama, esperando, sin mirar el reloj para no desesperarme más, pero estoy lista y es lo que cuenta.

Escucho a Justin trastear en el baño, me se los pasos de memoria. Abre el grifo para mojarse el pelo, lo mantiene abierto durante todo el proceso por si necesita empezar de nuevo. Abre los cajones y saca un cepillo de rulo, la espuma, la cera y la laca. Se echa un poco de espuma en el pelo y se lo peina con las manos, coge el cepillo de rulo y se da cuenta que no ha cogido el secador. Abre las puertas del mueble del baño y lo saca, lo enchufa, tarda en atinar. Comienza a darse formay cuando acaba se moja la puntita de los dedos en cera, para acabar peinándose. Se echa la laca y deja todo de nuevo en su sitio.

Espero que abra de nuevo la puerta del baño pero no. Sale del baño, trastea en su dormitorio y sale por la puerta del hall, para tocar seguidamente la mía.

"Voooooy." Digo intentando no sonar desesperada.

Me levanto y cojo mi movil, el cuál dudo donde meter porque no llevo bolso ni el vestido tiene bolsillos. Recurro a la forma más vulgar (según los ojos por los que se miren) y me meto el movil el la tira del tanga. No penseís mal, es la tira de la cadera y sí, si lo sujeta. Me dirijo hacia la puerta y antes de llegar a tocar el pomo, dejándolo a escasos centímetros de mis dedos pienso el algo que hace que un escalofrío me recorra todo el cuerpo.

"¿_____?" Escucho a Justin, con un tono de impaciencia.

Reacciono de nuevo y sacudo la cabeza, girándome poco a poco sobre mi misma mirando al suelo, arrastrando los pies hasta la cómoda de enfrente de mi cama. "Voy, voy." Respondo sin ganas. Abro el primer cajón y meto la mano hasta chocar con el fondo del cajón. La agarro con fuerza con los dedos pulgar, índice y el corazón (dedo de en medio) e intento palpar con lo que me queda de mano por la zona, lo encuentro y lo agarro como puedo, saco la mano.

Reviso la munición que le queda dentro a la pistola. Bien, solo faltan dos balas, de las cuales no me acuerdo en qué las he usado. Reviso el cartucho que he cogido y está hasta arriba. Le pongo el seguro a la pistola y me la coloco debajo de la axila, agarrada bajo la tira del sujetador y hago lo mismo con la munición al otro lado de mi torso.

Me coloco bien el vestido y me miro rápidamente en el trozo de pared inmensa que Mike y  me tapó completamente por espejos, para así poder bailar sin tener que ir al pabellón. Todo en su sitio, no se nota nada al menos a simple vista, al trasluz, ni idea. Que Dios se apiade de mí y no hay más.

Por fin agarro el pomo de mi puerta y la baro, encontrándome un enorme ramo de flores rojas que tapan a Justin por completo, dejándome ver solo sus finitas piernas.