Sin planes →avc. editando.

Capítulo 15 //muerte.

7 am y como siempre Natalia me tiene despierta con sus mensajes y llamadas, pero de todas formas no pude dormir, como ya dije odio ser tan miedosa.

Alonso pasará por mi a las 8 y nos llevara en la camioneta de su padre
Opte por prepararme, me bañe, vestí y até mi cabello. Sería un desastre si no lo hago.

Baje a desayunar ya que mi madre se levantó muy temprano.

—¿Que hay ma?

—No mucho, ¿segura que no quieres que los lleve?

—No gracias, nos llevara Alonso.

—Pero tengo miedo por ti...no quiero que te desmayes...¿que tal si te roban?

—Yo no fuí la que  se burló ayer de mi incidente con los juegos mecánicos  —rodé los ojos, pero sabía que iba a estar bien...asustada.

—Ay mi niña —me abrazo, como que mi madre es muy bipolar.

El timbre de la puerta indico que Alonso había llegado, abrí y apareció el ojiazul con una gran sonrisa.

—¿Lista?

—No.

—Entonces... ¿preparada?

—¿Tengo opción?

—No, no en realidad.

—Pues entonces, creo que si.

—Yo se que te va a gustar —2 cabezas se asomaron, era Braulio y Male— espero no te moleste, se lo prometí a Male —sonrió mostrándo los dientes.

—Para nada, hola —saludaron de igual forma y me senté en él asiento de copiloto.

—Okey, pasamos primero por Jos, es él que vive mas cerca, después por Natalia y al último a la casa de Bryan —informó Alonso.

—¿Y Freddy y Alan? —pregunté.

—Se la viven ahí si que.....ah por cierto Jos va a menejar, no quiero matar a todos antes de llegar.

—De acuerdo —me recoste en su hombro.

Llegamos con Jos y me pase al asiento trasero, en él camino a casa de Nat, Male hacia preguntas verdaderamente extrañas.

• • •

—¿Te gusta el chocolate?

—¿A quien no le gusta el chocolate?

—¡Alonso! Ella si te conviene ¿porque no se casan?

—Lo consideraré —dijo Alonso y yo reí— mientras...cierra el pico.

—¿Te gustan los patos? —Preguntó de nuevo la niña.

—Uhmmm si.

—No te noto muy segura...¿cuál es tu animal favorito?

—Los pandas.

—¿Enserio? Los mios son los patos, son tranquilos pero también agresivos —reí de nuevo— ¿cual es tu juego favorito?

—¿Juego de que?

—Mecánico, vamos a un parque de diversiones, duh.

—En realidad les tengo un poco de miedo.

—¿Enserio? —asentí— ¿que tipos de patos te gustan?

—Haces preguntas muy extrañas.

—¡Igual que tu! —grito Alonso desde él asiento de adelante.