Black

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—Noah Blackdeath, ¿eh?

—S-sí— tartamudeo, tratando de buscar las palabras — ¿Qué pasa?

Me giro a tiempo para que Lucy y sus amigos me rodeen. Lucy es una chica alta y esbelta, aunque ella sola no puede parecer una amenaza, en realidad... Sus amigos sí que dan miedo.

Sus amigos son los típicos que han levantado pesas desde que tenían chupete.

—¿Me haces los deberes?-me tiende varios folios en los que puede haber más de cincuenta ejercicios y sé muy bien que realmente no me lo está pidiendo.

—N-no puedo, Lucy.— las palabras apenas salen de mis labios —Tengo cosas que hacer esta tarde.

—Sabías que no te lo estaba pidiendo, ¿verdad?— sonríe, lo sabía, no soy idiota. Puede parecer inocente, pero en realidad es como un lobo acechando a su presa.

—P-pero...

—Vamos Noah, sabes que no quieres que te obligue a hacerlo.

Respiro hondo, llevamos así años. Esta no es la primera vez que esta escena ocurre. En absoluto, lleva repitiéndose año tras año, día tras día.

No puedo aguantar más. Sé que debería decírselo a mis padres, pero no tengo el valor suficiente para hacerlo.

Aún cuando se lo cuento todo al chico de mis sueños.

No, no es en sentido figurado, todos los días sueño con un chico. Desde hace dos años.

A él le confío todos mis secretos, todo lo malo que ocurre en mi día a día, porque él para mí es mi mejor amigo.

Lo sabe todo sobre mí, aunque no sea real.

"No puedes seguir así" me dijo hace unas noches "Debes plantarles cara."

Armándome de valor, le digo a Lucy:

—Lucy, llevo haciendo esto desde primaria. No puedo seguir así. Tenemos quince años, sabes hacer los deberes tú sola.

—¿Cómo te atreves a decir eso, emo?

—Porque...— empiezo retrocediendo asustada.

—Oye.— escucho una voz familiar a mis espaldas— ¿Quién te crees que eres para hablarle así?

Lucy y sus amigos abren el círculo, mostrando milagrosamente al chico de cabello castaño oscuro, casi del tono de la obsidiana y ojos azules, pero no azules como el color del cielo, sino el color azul de la noche más oscura.

Su capa le da un aire de autoridad, por lo que en cuanto de debajo de la capa negra saca una espada negra todos retroceden, asustados.

—Guarda eso, ¿quieres?— dice Mason, uno de los "amigos" de Lucy, con la voz temblorosa.

—¿Temes a una espada?— dice el chico con un tono divertido mientras dibuja una media sonrisa— Creí que en la Tierra teníais armas más avanzadas.

—¿De qué hablas? ¿La Tierra?— dice Lucy intentando ser el centro de atención, como de costumbre.

—Me llevo a Noah, con o sin vuestro permiso.

Dicho lo cual, se acerca a paso decidido, marcando fuertes pasos a un ritmo regular. Mientras se acerca, mi corazón late más y más rápido.

¿Es él?

Agarra mi antebrazo y tira de mí tras de sí. Sin pensarlo dos veces, voy tras él, intentando seguir sus pasos.

—Te dije que debías enfrentarte a ella, no a todos ellos.— me reprocha ni siquiera resollando por falta de respiración.

—¿Tú...? ¿Tú eres...?

—Sí, Noah. Soy el chico con el que llevas hablando dos años.

—¿Eres Black?— le observo desde atrás, maravillada al ver su cabello oscuro.

—Sí.— suspira— Pero, por favor, no le cuentes a nadie nada de que me has visto.

—¿Por qué? ¿Es que no puedo contarles a mis padres que...? ¿Que eres real?

—No.— continúa el camino hacia mi casa. Un momento... ¿Cómo sabe dónde vivo?— No puedes. Mañana te contaré el por qué.

—¿Por qué no ahora?

—Es peligroso.— mira a ambos lados de la calle antes de cruzar.

—Cuéntamelo ahora.— me zafo de su agarre— O de otro modo dudaré de que seas Black.

—No puedo contártelo, Noah.— su voz suena cansada.— Si pudiera ya lo habría hecho, pero no puedo. Y mucho menos ahora.

—¿Es que no confías en mí?

—La verdadera pregunta es, ¿confías en mí?

Abro la boca, dispuesta a contestar con un "Sí", pero la cierro en el acto. No, no confío en él.

No puedo confiar abiertamente en él sin saber bien si puedo hacerlo.

— No, no confío en ti.

— Espero que confíes en mí lo suficiente para seguir mi consejo: Mañana prepárate para partir.

— ¿A dónde?

— Lo sabrás.— sonríe de lado— Cuando lleguemos.

Tras decir las últimas palabras da media vuelta y se va en dirección opuesta.

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Hey, aquí Claire.

Esta novela es una novela propia, sin ningún tipo de personaje de cualquier saga y/o anime.

Espero que os guste esta primera parte de la novela Crónicas del Reino de la Gema Oscura.

Se despide emocionada,

Claire.

Revelación (Las Crónicas Del Reino de La Gema Oscura)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora