Caos

I

Nuevamente se sentía fuera de lugar, en un mundo que nunca había sido suyo un mundo que nunca había conocido.

Sentía que se hallaba en un mundo al que no pertenecía.

A veces dejaba volar su imaginación y podía vivir en un mundo donde toda su vida estaba llena de luz. Donde no todo era tormenta y oscuridad.

Imaginaba un mundo donde era realmente libre de las repercusiones y las miradas de desprecio, asco y lástima que le dirigían a diario aquellos quienes creen tenerlo todo y se sienten libre para echártelo en cara cada día.

Sentía que el mundo donde "existía", no era real. Vivía en medio de una sociedad narcisista ocupada en juzgar por tu acento, el lugar de donde provienes, un determinado número de likes o por la cantidad de dinero que se tenía en el bolsillo. Un lugar desagradable, donde no había lugar para los sueños, los errores ni para las mentes libres. Un lugar donde no había espacio para ella... Un alma pequeña, pero con sueños incluso más grande que sí misma. Sabía que le era imposible conseguirlos, pero aun así siguió soñando porque era la única forma de conseguir tranquilidad donde la libertad no existe.

Lograba desprenderse de la realidad al jugar con su imaginación y eso era lo único que la mantenía fuerte y con ganas de seguir luchando por sobrevivir. Imaginaba mundos donde se le permitía volar, donde podía ser feliz. Sin embargo, un dragón enorme, capaz de destruir todo a su paso "La realidad" destruía sus sueños y siempre volvía al punto de partida, aferrada al futuro tratando de liberarse de su pasado y la tristeza que este traía consigo.

Dejándola nuevamente sola

Nuevamente triste

Nuevamente con lágrimas en sus ojos, aquellos que no tenían más que reflejar que tristeza y soledad.

Nuevamente fuera de lugar en ese mundo que no era suyo. Viéndola pasar sin decir nada... Dirigiéndole una mirada lejana, intranquila y sombría que aún no era capaz de asimilar lo que veía.

Aunque la vida sigue, para ella no... Siempre vuelve al lugar donde su tristeza y soledad empezó... todo se resume a lo mismo, la misma historia, la misma gente, las mismas calles, la misma luna, el mismo cielo, las misma estrellas, la misma tristeza, la misma cárcel y la misma mierda.