Prologo.

46 2 1
                                    


"Todo estaba frio, hasta el asiento, no podía creer que Mamá quisiera salir conmigo a la academia de baile con un clima tan gris, las montañas ni se veían, las calles eran como si estuvieras recorriendo las nubes, neblina en todos lados, los arboles estaban cristalizados, el piso de la carreteras podían ser pista de patinaje sobre hielo, aun así mamá quería verme bailar, ella era demasiado feliz solo viéndome hacer locuras, aunque no culpa que su única felicidad era yo. Tal vez desde esa vez que mis padres se divorciaron ella tuvo que construir su felicidad solo conmigo. El toque frio no impidió que no divirtiéramos en el carro, ella encendió el radio y por supuesto está sonando su canción, "Rolling in the deep", le encantaba Adele, podría escuchar esa canción todo el día y no se aburriría, me encanta la manera como se sacude su gran cabellera castaña mientras cantaba, sus ojos grises alumbraban tanto que podríamos decir que te asesinaría con la mirada, me encantaba su personalidad, supongo que saque la de mi padre, supongo que con ella hago el papel de su mama en vez de ella la mía.

Al terminar la canción ella clava su mirada hacia mí, sabía perfectamente que tenía algo que decirme...

─ Norah... hija­─ Me mira mientras lanza una sonrisa.

─ ¿Qué?, ¿Pasa algo?­─ Pregunto confundida.

­­─ Nada malo, solo quería decirte que...─La interrumpo.

─ ¡TEN CUIDADO! ─Grito.

Todo había pasado muy rápido, recuerdo que cuando grite todo se puso en blanco, podría escuchar y sentir mi corazón aun latir, no estoy muerta, lo decía dentro de mí, podría escuchar a la ambulancia, podía recordar el carro que salió de la nada, imagina esos minutos mientras mi mama se bañaba, puedo sentir todos los copos derritiéndose encima de mí".

─ ¿Todo bien? ─ Dice mi padre, mientras conduce.

─ Como siempre­─ Digo.

Era increíble solo han pasado 4 años desde aquel accidente donde allí murió mi madre y aun podría recordarlo como si fuera sido ayer, me sigue doliendo todavía, era increíble que la poca pérdida de memoria que tuve, no pudo borrar el accidente, al principio no recordaba nada, pero luego todo eso fragmentos volvieron hacia mí.

Mi padre lo ha intentado de todo, pero aun así no podía aceptar que estaba sola, que no estaba con mamá, solo era, Norah West, la chica de 17 años, la chica demasiado odiosa o muy poco social, en fin, sus comentarios no me importaban, pues yo no era nada igual que mi padre, mi cabello era muy negro, ni con el sol se aclaraba, mis ojos eran iguales a los de mi madre grises, aunque los mío no brillaban por felicidad, podría decir que mi cuerpo era como una guitarra, tenía curvas pero no tan destacada, era normal, para mí, mi físico no era importante, por ultimo debemos destacar que me gustaban los piercing así que hace un año me coloque 1 en la nariz, aunque mi padre no le gustaba para nada

En la escuela, todos tienen un grupo, podría ser de estudio, o de alguna cosa estúpida para pasar el tiempo, probablemente podría haber estado en el de baile, pero no me jodan ahí solo habían niñatas de papá y mamá y la verdad prefiero, así que quería hacer algo diferente, así que aquí fue donde llego "The Fake", si, somos el único grupo que no hace nada importante para la escuela, no competíamos en algo para obtener premios para que el director nos reconocieras y nos elogiaras, no necesitábamos eso, más que todo era para poder hablar y desahogarte, escaparte un rato de la vida cotidiana, campamentos entre nosotros y así, todos tenemos una historia, obviamente ellos sabían de la mía, ellos son los únicos que lo sabían, nos apoyábamos, la verdad es que ese grupo era mi salida a tantos problemas, en total solos éramos 4 personas en el grupo, teníamos una sala muy alejada a los demás grupos, o mejor dicho "Club", en un grupo normal al terminar el año escolar o empezando se hacían unas pruebas para entrar a los grupos o simplemente ponía una lista de inscripción y listo, felicidades estas en un grupo, nosotros no queríamos que entrara nadie más, así que no lo hacíamos, en realidad no lo necesitábamos, estamos bien siendo 4 personas, cada vez que terminaba el lapso de inscripciones se le pasaba la lista al director, como siempre nosotros no lo hacíamos, el máximo de un grupo eran 30 personas, El director no le gustaba que solo estuviera un grupo de 4 personas, pero de alguna extraña manera ya no nos decía nada.

No sé si lo que siento es emoción de poder verlos de nuevo.

The Fake.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora