124. Solo tu y yo

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- Donghae yo...- susurre siendo presa de la emoción al sentir su calidez en mi mano- no puedo....- y deje caer la mano que acariciaba su mejilla, pero así mismo el no me soltó.

Donghae aspiro aire ruidosamente por la nariz, y lo expulso de su boca. Note como el aire caliente chocaba contra los poros de mi piel y me estremecí.

- Tu no puedes, y yo no aguanto mas...- musitó- no puedo aguantar verte con ella...

- Donghae, esto ya lo habíamos hablado...

- Que mas da?- alzo la voz aferrándose aun mas a mi mano- Hablado o no, yo jamas podre dejar de quererte.

- Pero estás con SaGan...

- Si- alzo la cabeza y me miro- pero nada de lo que siento por ella es comparable a lo que tu me haces sentir.

Suspire, controlando mis sentimientos, y cerré los ojos asimilando la situación.

Los últimos meses habían sido maravillosos. Quería a IU, la amaba, y el haber arreglado la situación con DongHae me hacia tener fuerzas para continuar en mi relación con ella. Si Donghae se hubiese negado, si Donghae me hubiese parado en su día, yo jamas me hubiese ido con ella. Pero el no actuó así. Me dejo marchar, me recriminó, me culpó, y me señaló, haciéndose la víctima de todo. Y no le culpaba. Siempre había sido yo el que fastidiaba nuestros momentos, el que le hacia perder los nervios y el que le hacia llorar, por ello decidí alejarme de el, por ello decidí continuar, aunque con ello le hiciese por ultima vez daño. No quería verlo sufrir mas, ni que derramara una lágrima por mi egoísmo y mal carácter. No podía dejar de amarle, de pensar en el, de querer sentirlo a mi lado, día y noche, todos los días de mi vida. Pero cuando se es el dolor de alguien, aunque le ames con locura, lo mas sabio es alejarse, por uno mismo, y por el otro también. Como hizo Hangeng.

- Donghae...- dije con la voz quebrada- Donghae, debes... debes seguir adelante.

- Yo sigo adelante, pero tu... tu...- Donghae soltó mi mano y dejo caer las suyas- tu me impides avanzar. Quiero, creeme que quiero. Es una tortura el saber que tu solo me ves como un amigo, mientras que yo...

- Donghae para- le interrumpí.

- Mientras que yo te sigo amando.

- Para!!- chille y aporree la pared de mi lado.

Donghae dejo de respirar y se tensó. Tenia los ojos completamente abiertos, y las pupilas dilatadas. Tenia miedo joder, tenia miedo de mi y de mi estúpida e infantil reacción.

- Donghae...

- Déjame- gruño y se fue directo a la puerta.

- Donghae, espera- corrí para ponerme a su lado y bloquear la puerta con una mano- espera...- susurre.

Donghae giró su cuerpo, y este quedo atrapado entre la puerta y mi cuerpo. Aun me dolía la nariz, pero ningún dolor era comparable a lo que sentía en mi pecho en ese mismo momento. El corazón me latía incesante, bombeando mi sangre con rapidez. Donghae me miraba fijamente, y su nuez subía y bajaba, tragando saliva. Le mire con atención, como hacia semanas que no lo hacia.

El cabello le había crecido, ni mucho ni poco, lo justo para que el flequillo le cubriese las cejas. Estaba mas delgado, aunque nada preocupante. Tal vez, menos musculado. Sus facciones seguían teniendo esa mezcla entre hombre y niño que tanto me gustaba, una mezcla entre inocencia y madurez, entre inteligencia y despiste. Su mandíbula se marcaba a la perfección, y su piel había adquirido un tono blanquecino debido a las bajas temperaturas de Diciembre.

Este humedeció sus labios con su suave y deliciosa lengua aterciopelada y la boca se me hizo agua, como si delante de mi tuviese la mayor de mis tentaciones.

Estaba entre la espada y la pared, entre la verdad y la mentira, el egoísmo y el cinismo, entre el amor y el desamor, entre Donghae y IU.

Con un golpe de pecho, empuje a Donghae completamente sobre la puerta y cese su paso con el cuerpo, pegandolo al de el. Este tragó aire estrepitosamente por el susto, pero respiro entrecortadamente cuando solo pocos centímetros nos separaban. Notaba su fuerte respiración en mi boca, y sin quererlo, mi mano comenzó a rodearle su pecho desnudo.

Roce mis labios con los suyos, y estos estaban secos. No era de extrañar. Le bese, y me olvide de todo, olvide donde estábamos, olvide mi relación con IU, olvide mi enfado por su rechazo, y olvide practicamente el como besar, ya que los dos ansiábamos tanto hacerlo de nuevo, que nuestros dientes chocaron y no pudimos evitar sonreír. Este me devolvió el beso, dejándose guiar y cuando note su lengua rozando mis labios, no dude dos segundos en corresponderle, y entreabrí mi boca también, besandonos con intensidad.

Nos separamos al mismo tiempo, pero Donghae se quedo con la frente apoyada sobre la mía esbozando una gran sonrisa.

- mierda... - exclamé.

- Te he echado tanto de menos...

Le bese de nuevo, haciéndole callar. En ese momento no pensaba en lo que hacia, no pensaba en que le estaba siendo infiel a mi novia con mi ex, no pensaba en que era Donghae, mi Donghae, el mismo Donghae con el que había experimentado tantísimas cosas, el mismo Donghae que me había hecho feliz de una manera tan incondicional. Puse las manos sobre sus caderas y lo alce. Donghae dio un pequeño salto, y enrosco sus piernas alrededor de mis caderas. Me abalance sobre el, y este choco con su espalda en la puerta ruidosamente. Donghae alzo la cabeza y yo pase a besarle el cuello, mientras este se agarraba a mi espalda con fuerza.

Estiro de mi cabello apartandome, y me beso con frenesí de nuevo, estando ligeramente por encima de mi en altura. Agarre su cabello y este gimió, y fue ese mismo sonido, ese sonido gutural y masculino que me hizo reaccionar.

- Donghae... no... Donghae, no podemos hacer esto.

- Por que?- me pregunto este casi en una suplica.

- Por que yo estoy con IU y...

- Te amo.

- Yo también, pero...

- Solo hace falta que no se entere, que nadie se entere. Solo tu y yo lo sabremos. Solo tu y yo.

Dreams Fulfilled (Parte 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora