Noventa Días (SDLV #2)

Seis de Enero

POV MATTY

Siento que alguien corre las cortinas de mi habitación dejando entrar toda la luz de sol y esta llega directo a mi cara. Como odio despertar de esta manera, es horrible. 

Y no es lo único horrible. Siento unas punzadas en mi cabeza, como un martilleo. Tengo mucha sed también. Necesito agua y una ducha urgentemente. ¿Qué pasó anoche?

Abro los ojos y veo que la persona que ha corrido las cortinas es Asher. ¿Qué está haciendo aquí? No suele subir a nuestras habitaciones. En verdad, ni siquiera sube al segundo piso y va a subir al tercero.

-¿Mucha resaca?- pregunta Ash riéndose en mi cara.

¿Resaca? Por eso es que me duele tanto la cabeza. Tiene sentido. Recuerdo que Mia, cuando se fue Asher a buscar a Lexie anoche, me convenció de tomar unos tragos. No estoy acostumbrado al alcohol. No es lo mío.

-Mi cabeza va a salirse de mi cuerpo en cualquier momento- respondo.

Eso hace que Asher se ría más. Parece que soy un payaso para mi amigo en este momento. Intento recordar lo que pasó después de tomar esos tragos con Mia anoche y no recuerdo nada. Voy a matar a esa niña por hacerme beber. Sabe que no estoy acostumbrado, pero igual es mi culpa. Yo fui el tonto que me deje convencer por ella.

Ash me da un vaso con agua y se lo agradezco. Hay un saco de dormir en el suelo y Asher está sin playera. 

-¿Dormiste aquí?- pregunto y él asiente- ¿Te das cuenta de que hay otras habitaciones con un colchón de verdad donde pudiste haber dormido?

-Alguien tenía que cuidar de que no te ahogaras en tu propio vómito mientras dormías. Lexie no iba a hacerlo.

Cierro los ojos y me maldigo mentalmente. Aunque dejo de hacerlo porque parece que hasta pensar duele en este minuto. Los vuelvo a abrir cuando escucho la risa de Ash. Él si que está disfrutando de mi sufrimiento.

-¿Está muy molesta?

-¿Lex? Si, bastante.

-¿Sólo por haberme emborrachado? Lo dudo mucho...

Asher me queda mirando con el ceño fruncido y luego ríe. Nuevamente. Su risa me da más dolor de cabeza del que tengo ahora y no pensé que eso fuera posible.

-¿Recuerdas algo de lo que pasó anoche?

-Sólo que Mia me convenció de tomar unos vasos de algo verde. Después de eso, nada

Él asiente y me pasa una pastilla para el dolor de cabeza que suelo guardar en mi mesa de noche. A veces me dan unas jaquecas horribles que ni se comparan a esta. Efectos secundarios de todo el tratamiento que tuve que pasar cuando tuve leucemia cuando era bebé. Menos mal que no recuerdo nada de eso. Tomo la pastilla con el agua que Ash me dio antes y espero que me haga efecto pronto. Odio las jaquecas, de verdad que las odio mucho y por eso no me gusta beber. Más que mamá odia que lo haga porque después de que tuve leucemia todo, absolutamente todo, según ella, me dará leucemia otra vez, pero han pasado casi diecisiete años desde que pasó eso, es imposible que me vuelva a dar, pero si dejo a mamá tranquila cuidando de mi salud, lo hago. Todo por ella.

-¿Hice algo anoche?

-No estuve mucho tiempo contigo borracho. Caíste muerto antes de llegar a casa, pero...

-¿Pero qué?

-Alcance a escuchar una conversación que tuviste con Lexie. Bueno, más bien el final y creo que ella no estaba muy feliz después de eso.

Frunzo el ceño e intento recordar alguna conversación que haya tenido con Lexie, pero lo último que recuerdo de ella es que fue al baño y tardó mucho en volver. Quise ir a buscarla, pero Ash me convenció de que él iría porque conocía mejor el bar.