Sabía que aquello no era buena idea. Algo se lo gritaba desde el interior de su cabeza.
Pero como nunca me hacía caso a mi mismo pues había acabado aquí, encerrado en una jaula enorme que dificilmente podía abrir con unas estúpidas patas de gato.
Era de noche, así que hacía un frío del demonio que me hacía acurrucarme en un rincón de aquella jaula.
Consciencia: Te dije que no salieras de casa.
Lo sé, pero la curiosidad me estaba matando.
Consciencia: Eres idiota, nunca le hagas caso a una voz que te habla.
¡Tu también eres una voz!
Consciencia: Ya, pero no es lo mismo.
¡Sí que lo es!
El sonido de una rama rompiéndose hace que me ponga en alerta, enseñando mis colmillos amenazante, listo para añar o morder en cualquier momento.
- Pero mira que tenemos aquí -canturrea una voz femenina, sonando contenta y divertida-. Un gatito hechizado.
Me acurruco más en un rincón, chocando la mitad de mi cuerpo contra las rejas.
- No esperaba que fueras tan imprudente como para llegar hasta aquí siguiendo una voz en tu cabeza ¿Sabías que pudo haber sido alguien horrible que te tendiera una trampa y acabara contigo? Suerte que era yo.
La mujer da un paso hacia adelante, mostrando un rostro de una anciana. Lo más sorprendente de esto es la sonrisa dulce y maternal que la mujer tenía.
- Eres más bonito de lo que me esperaba -dice sonrprendida, poniendose de cuclillas y mirarme con curiosidad.
Consciencia: Tranquilízate.
¿Cómo voy a tranquilizarme? Tengo delante de mi la persona que me ha convertido en gato.
Consciencia: No tiene malas intenciones.
¿Cómo puedes saberlos?
Consciencia: Intuición.
...
- ¿Sabes gatito? Derek es la persona más terca que he podido ver en mi vida ¿Tienes idea de lo difícil que es hacer que admita que está enamorado de tí?
Si tuviera algo que escupir ya lo habría hecho.
- ¿Meow?
- Sí como lo oyes, el gran y frío Derek Hale enamorado del chico más molesto e hiperactivo que hay en Beacons Hills pero también la persona más cariñosa y de buen corazón que él podrá conocer, sois tan jodidamente tiernos juntos que casi me da un ataque de fangirl cuando os observababa.
Oh, Dios otro Peter.
- ¿Qué te parece si observamos un poco lo que hacen tus amigos en estos momentos? Se han dado cuenta de que has desaparecido.
Asiento con la cabeza, acercándome a ella lentamente con algo más de confianza. Al chasquear los dedos, una televisión antigua aparece de la nada, haciéndome retroceder asustado.
- No te asustes gatito, solo es una televisión mágica.
Observo atentamente como la televisión se enciende golpe, apareciendo en ella la imagen del loft de Derek con toda la manada. Todos se ven serios y preocupados, buscando en todos los rincones del loft.
- ¿Dónde demonios se ha metido? -habla Scott desdesperado, tirándose de los pelos una y otra vez.
- ¡Estaba a mi lado cuando nos fuimos a dormir! ¡Te juro que no lo he sentido! -grita Derek con preocupación, corriendo de un lado para otro al igual que la otra manada.
