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Nota 10.

Es normal pensar siempre.

Para mi.

No es normal pensar siempre en él.



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Estaba sentada sobre el regazo de un hombre. Él tomaba con sus compañeros de trabajo y yo sonría sólo porque para eso me pagaban.

Paloma estaba sentada en el brazo del sillón mientras un horrible hombre besaba su cintura como si fuera un un caramelo. Ella me miraba y me daba sonrisas cortas como haciéndome saber que estaba tan sucia como yo.

El hombre me llevó a una habitación e hizo lo que le dio la gana con mi cuerpo. Pero sólo pensaba en el rostro de Marco, en sus ojos color noche y fantaseaba la manera en la que sus manos recorrerían mi cuerpo.

AFRODITADonde viven las historias. Descúbrelo ahora