Nota 5.
Me hice llamar Afrodita porque vivo de la ironía.
No tengo menor idea con respecto al amor.
Quizá y el que sea la diosa más egoísta y traicionera del Olimpo es a lo que quería llegar.
Aunque fue el primer nombre que se me vino a la cabeza cuando llegue a el prostíbulo.
No amo.
No me amo.
Porque es inevitable mirarme en un espejo y que me den ganas de vomitar al ver mi reflejo.
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Estaba en mi camerino retocandome el maquillaje y varias chicas entraban para prestarme algunos de mis trajes para ellas lucirlos, sabiendo que no se compararían a mi nunca.
Paloma entró y me miró por un rato. Sus enormes ojos café me miraban como si fuera una pequeña presa la cual será atacada en cualquier momento.
-Es cierto lo que dicen todas. Eres muy hermosa. -dijo ella. Por primera vez en toda la semana que ella llevaba ya aquí instalada me habló.
-Gracias. Aunque siempre pensé que las niñitas de aquí me tendrían cierta envidia como para decir una cosa buena de mi. -dije sin dejar de mirarme en el espejo.
-Lo cierto es que todas te odian. -comenzó a caminar hacía mi y se colocó a mi espalda, tocando la silla con su abdomen desnudo. -Pero me gustan los retos y quise venir y conocerte personalmente.
-¿Por qué? -levante la vista para mirarla por primera vez a través del espejo.
-Porque eres hermosa, no hay un hombre que no caiga a tus pies cuando te ve. -suspiró y tomó mi cabello entre sus manos. -Porque veo ganas de morir en tu mirada y eso me recuerda a mi.
-No estoy interesada en tener una amiga. -me levante de la silla y comencé a caminar hasta la puerta para salir.
-Y yo no estoy buscando una amiga. -me di la vuelta y la miré. Ella estaba mirándome con una sonrisa vacilante en su rostro. -Sólo necesitó a alguien que me escuche maldecir la vida que tengo mientras mire a la nada frente al espejo y que no sepa lo que quiere en la vida al igual que yo.
Como no dije nada en respuesta, ella caminó y cuando ya estuvo a mi lado tropezó mi hombro y salió por donde mismo vino.
Paloma tuvo razón en una cosa. Realmente tenía ganas de morirme.
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AFRODITA
Short StorySiempre me elegían a mi por ser la más preciosa, no era mi culpa. • inicio 17/05/2016 • fin 16/08/2016 | ésta historia la publiqué hace un buen tiempo y aún sigue sin edición. Perdonen los errores ortográficos que encuentren. | ©namjourney