Music: The Real Story

Rock bottom

—¡No me entra en la cabeza como rayos pude meterme con un tipo como tú!

—Sabiendo cómo eres pues debí habérmelo pensado dos veces.

—Eres un maldito infeliz Evan— Dije y me baje de la isla de la cocina.

Evan me tomo del brazo y hablo.

—¡No seas infantil y quédate a terminar con lo que iniciaste!

—Vete a la mierda Evan.

—Pues tu vete con tu noviecito...

—¡Ya te dije que yo no estoy engañándote! Pero una vez que algo se mete en tu cabeza nadie lo saca.

—Pues dime testarudo, dime tarado dime lo que quieras pero yo no soy idiota y sé que sientes algo por él.

—Evan sí, eres un idiota ¡MALDIGO EL MALDITO DIA EN QUE TE CONOCÍ Y CREÍ QUE CONTIGO TODO SERÍA PERFECTO!

Me alejé de Evan y cubrí mi cara con mis manos.

Aquél día. Ese hermoso día que Evan y yo nos conocimos.

Creí que todo esto jamás me pasaría a mi... una y otra vez peleamos sin parar estas estúpidas batallas campales con armas de plástico, y aún así seguimos volviendo por más explotando el poco amor que queda entre nosotros.

Llevábamos cuatro meses así y ya los momentos bonitos se contaban con los dedos de una mano... pero a pesar de estar a punto de tocar fondo seguimos estando juntos.

(...)

—Te amo— Dijo Evan.

—Yo también—Dije y me apegué más a él en el pequeño sillón en el que nos encontrábamos.

—No me gusta pelear contigo... lo siento.

—No quise decirte infeliz, ni idiota ni mucho menos maldecir el día en que te vi—Agregué, mientras comía golosinas.

—Ya lo sé. De todas formas sé que me amas.

—Eres un tonto—Reí.

—Pero amas a este tonto—Dijo

—Cállate—Dije y metí un caramelo a su boca.

(...)

—¡Vamos mete la maldita pelota en el arco! Amor córrete no eres hija del vidriero—Oí decir a Evan.

—¿Como dijiste?

—Que te quites estoy viendo la televisión.

—Ahora la televisión es más importante que ver como esta vestida tu novia.

—Estas bonita ¿Vas a salir?

—¿Lo olvidaste? Lo sabía.

—¿Qué cosa?

—Íbamos a salir...

—¿Ah sí?

—¡Por mi cumpleaños Evan! —La cara de Evan fue memorable.

—¡Wow! Y yo que creía que mi novio iba a ser mejor persona.

(...)

—Mi amor perdóname de verdad ¿Sigues enojada?

— Un poco, si.

— De verdad perdóname—Dijo acercándose a mis labios.

Me beso y yo le correspondí tiernamente, lo amaba de formas inmensurables.

Entramos al lugar todo estaba inundado por la música y la gente bailando al son de ésta.

Evan fue por unos tragos y yo me quedé en la pista.

—¡Hey cumpleañera! —Gritó alguien detrás.

—¡Diamond!

—¿Y tu novio?

—Tu amigo fue por unos tragos.

—Señorita cumpleañera ¿Me deja acompañarla? — Dijo haciendo una divertida reverencia.

—Jajaja. Claro Diamond.

Fui a la pista con él y bailamos un rato.

Y entonces de repente miré a la barra y Evan nos observaba con desprecio y tristeza.

Lo miré confundida y de un momento a otro él se fue.

—Diamond lo siento pero debo irme— Dije alejándome.

Salí del Bar y comencé a mirar hacia ambos lados en busca de Evan, pero nada. Entonces dejé que mi corazón me llevase y comencé a caminar con desesperación.

¡Qué hermoso cumpleaños estoy pasando!

Mi corazón comenzó a latir fuertemente y aviste un taxi, saqué la mano de mi bolsillo frenándolo, subí a este y me puse a llorar. No quería de nuevo pelear con él por algo que no había ocurrido, pero tampoco podía perderlo.

Lo amaba demasiado era como el lado bueno de un mal karma, lo amaba al mismo tiempo que él lo hacía y él me odiaba al mismo tiempo que yo lo hacía.

Pero al fin y al cabo volvíamos por más.

—Deténgase por favor.

Me baje del taxi y corrí hacia Evan.

—¡Evan detente!

—Para qué. Para que me engañes en mi cara.

—Por favor Evan otra vez no. Esto es estúpido—Dije respirando profundo— ¿Por qué estamos peleando? Parece que lo hiciésemos solo por diversión.

—¡No lo sé! Yo no lo sé. Lo único que si se es que te amo y que jamás conocí a alguien que se metiera tanto dentro de mí. Pero cuando te veo con otro se que conseguirás a alguien mejor.

—Nadie será mejor que tú.

—Te amo—Dijo abrazándome.

Y entonces ahí es que me di cuenta que decimos mucho y que estamos tocando fondo y seguiremos cayendo pero seguiremos volviendo por más.