Me desperté de un sobresalto al sentir una mano en mi boca, tratando de salir del agarre me removí en la cama.
-Shh soy yo Megan, no grites- Dijo en un susurro y sacando su mano- Nos están atacando tenemos que salir de acá-
-¿Qué? ¿Quién?- Pregunté asustada
-Vampiros, solo salgamos de acá- Lo dijo tranquila pero en su cara vi preocupación, me levanté y me vestí- Vamos Valery ya se fue con Asthon tenes que ser lo más silenciosa posible y ponte esto para que no sientan tu olor- Me paso una pulsera de piedras de colores extraña.
-¿Pero qué está pasando?- Me coloque la pulsera.
-No hay tiempo para explicar- Me agarró fuerte las manos y salimos de la habitación.
Pegadas a las paredes mirando a todos lados bajamos en silencio la escalera, nos dirigimos a la cocina donde se encuentra la salida al patio trasero. Se escucho ruidos en la puerta principal estaban tratando de tirarla. Megan apuró el paso y salimos encontrándonos con tres vampiros, se nos pusieron frente- Mantente detrás mio pase lo que pase-
Dicho esto Megan comenzó a transformarse sus uñas se agrandaron, sus colmillos también, de su espalda salió una joroba con pelos que la hizo doblarse en cuatro patas, el ruido de huesos rompiéndose me dio escalofríos. Cerré los ojos y cuando los abrí frente a mi había un lobo de 2 metros de altura color café gigante. Los tres hombres dejaron ver unos enormes colmillos y ojos rojos, se abalanzaron a la loba sin compasión pero ella los pudo evitar y con sus garras pudo arrancarle la cabeza a uno de sus atacantes, el vampiro se convirtió en cenizas al instantes. Y así hizo con los otros dos.
Comenzó a caminar camino al bosque yo la seguía de cerca aunque me daba un poco de miedo semejante animal. Nos adentramos al bosque no veía nada, la loba se acercó a mi y con su hocico me hizo una seña para que me agarre de su pelaje, hice lo que me indicó no me quería perder en la oscuridad caminamos unos minutos hasta llegar a un lago. La luna brillaba y por la falta de árboles en ese lugar podía ver un poco el camino.
Ruidos entre los árboles que rodeaban el lago se escucharon y muchos ojos rojos que pronto se formaron en siluetas nos tenían rodeadas, Megan se puso en guardia gruñendo y mostrando sus dientes, eran más de quince vampiros yo me escondí tras de un árbol muerta de miedo. Eran muchos y Megan estaba sola, podía notar que con la lucha ella se estaba cansando y no era tan precisa aunque siguió luchando, se escuchó un gruñido, estaba lastimada un vampiro la mordió y entre sus brazos agarró a la loba destrozando sus costillas, Megan soltó un aullido de dolor y calló al suelo parecía muerta, yo que me mantuve callada en toda la pelea no pude evitar gritar al verla caer y llamé la atención de los vampiros que quedaban en pie.
Estaba sola en el bosque rodeada de vampiros, nunca en mi vida sentí tanto miedo se me iban acercando pero no me atacaban me observaban como esperando una reacción mire mi alrededor y no tenía nada con que defenderme, era mi muerte segura. Uno de los vampiro que se notaba que era el líder el que mató a Megan, de 2 metros, musculoso y pelado me hizo una sonrisa diabólica dejando ver sus colmillos.
-Antes de matarte vamos a divertirnos mucho con vos- Dijo con una voz ronca y potente que hizo que mi piel se erizara, se acercaba a paso lento oliendo mi miedo eso lo divertía.
No podía moverme estaba paralizada por el miedo, no tenía escapatoria estaba totalmente rodeada, el vampiro una vez estando cerca me agarro de los pelos y tiró mi cabeza hacia atrás, pasó su asquerosa lengua por el cuello. Me repugno y trate de zafarme de su agarre pero ero mucho más fuerte que yo estaba a la vista.
Unos gruñidos y algunos golpes se escucharon a nuestro alrededor y el vampiro miró e inmediatamente me agarró del cuello apretando demasiado. Pude ver que solo quedábamos él y yo.
-Si se acercan le rompo en cuello- Amenazó. Salieron de entre los árboles cuatro siluetas de lobos, la visión se me torno borrosa por la falta de oxígeno, patalee trate de empujarlo pero no podía hacer nada para que él me suelte, cada vez su agarre era más fuerte y los lobos lo acechaban era su fin pero también el mio, cerré los ojos nose cuanto tiempo paso, ya no sentía su agarre, el oxígeno entró por mi boca tan rápido que comencé a toser, me lleve las manos al cuello me dolía por lo fuerte que me apretó, no entendía lo que había pasado, seguía mareada.
Pude sentir unas manos levantando mi cuerpo del suelo, traté de mirar a mi alrededor pero no podía enfocar la vista ni hablar por el dolor en la garganta la poca luz de la luna tampoco me ayudaba, una silueta me llevaba en brazos y escuché -Vas a estar bien- Sabia que era un hombre pero como fue un susurro no pude saber quien era, me sentía débil y cerré los ojos dejando que la oscuridad se adueñe de mi.
Matt:
Los tres lobos me siguieron cruzamos todo el bosque corriendo, faltando pocos metro para llegar escuchamos un aullido de dolor proveniente de Megan.
-Ayudenla, la va matar- Nos pidió al sentirnos cerca.
Pude ver la escena Megan muy lastimada en el suelo, Katherin contra un árbol rodeada de seis vampiros y completamente asustada. Un chupa sangre alto y pelado se acercaba a ella de una manera lenta para divertirse con su miedo, no se percataba de nuestra presencia estando concentrado con la niñata, nos encargamos de cada vampiro hasta que solo quedo él, al ver la amenaza y que no iba a poder solo con cuatros de nosotros decidió tomar del cuello a Katherin pensando que con esa acción se podía salvar.
-Si se acercan le rompo el cuello- Nos advirtió. Podía ver que cada vez apretaba más el cuello de Kat y eso me enfurecía.
-¿Qué hacemos?- Preguntó Noha.
El vampiro estaba cada vez más asustado si fuese humano estaría temblando y sudando. Katherin nos observó y podía ver el sufrimiento que estaba pasando trato de patearlo para zafarse pero le era imposible.
-Cuando yo ataque encárgate de que Katherin no choque contra el suelo- Me dirigí a Diana que asistió con la cabeza.
-Es una locura la va a matar- Scott trato de que entrara en razón pero los segundos que estaba perdiendo a ella se le estaba yendo la vida.
La vi cerrar los ojos y sin dudarlo con un salto rápido y mis garras arranque la cabeza de aquel vampiro que no se esperaba el ataque, Dejando a Katherin libre la cual comenzó a toser se llevo las manos al cuello.
Scott y Noha se acercaron a Megan para ayudarla ya transformados en personas. Diana y yo ayudamos a Katherin la tomé en mis brazos.
-Vas a estar bien- Le dije cuando se desmayó sabia que no me iba a escuchar y comencé a caminar.
-¿Dónde vas?- Preguntó Diana.
-La llevo con Marlene como debí haber hecho desde el principio, cuiden a Megan- Guiñe un ojo y me adentre al bosque.
