• En Problemas Otra Vez.

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El agarro su ropa, fue a ver su ropa que estaba mas que húmeda por mi culpa obviamente, el director me vio y después a Cárter, así hizo consecutivamente hasta que se dio cuenta.

- los dos, castigados. Limpiaran esta semana las piscinas y la próxima los gimnasios.... Incluyendo los baños.- yo abrí los ojos como platos, no podía castigarme

-¡no puedes castigarme marshall! ¡yo no tuve absolutamente nada que ver en esto! - el me reprendió con la mirada, sabia que el odiaba que le dijeran marshall, pero como era yo, bueno.- ¡el se callo con su ropa, se la quito mientras yo limpiaba la otra mitad de la piscina y cuando vine a ver estaba bañándose en ella! - mentí, aunque no era del todo mentira.

- ¡¿que yo que?! No, yo no hice nada, Maya me empujo a la piscina y se metió ella con su traje de baño segundos después de yo haber salido- el director nos miro, el examino mi cabello mojado y lo señalo.

Ahora tenia que verme como una niña buena frente a marshall. Agite mis pestañas y agarre mi bolso, no estaría más de una semana con ese imbécil de Cárter. Y si lo estaba, tendría que aguantarme. Quisiera o no.

-director, usted sabe muy bien que yo puedo llegar tarde, hacer fiestas, unas que otras bromas a las rubias con aire de cerebro, pero....... Tirarme a una piscina sucia en la que se bañan algunos estudiantes sudorosos que les toca natación, sabe que no es lo mio. Y si examina mi cabello, huele a vainilla con menta, si me hubiera bañado, ahg, ahi- señale la piscina llena de cloro - tendría el olor a cloro y demás productos que no le harían bien a mi cabello.

-bien, limpiara esta semana con el señor Blake las piscinas. - yo Sonreí y el director se dio la vuelta, quedando de espaldas a mi, yo mire a cárter que me miraba con la boca abierta.- y usted señor Blake, limpiara los gimnasios por su falta de respeto a la señorita y usar la piscina para su único beneficio cuando es claramente de todo el instituto, rompió las reglas, así que se atiene a las consecuencias.- el director se fue y yo atravesé la puerta, dejando a cárter solo, por no cumplir su trabajo.

Subí a mi jeep comander negro con vidrios polarizados, estacionado en el instituto de St Chards. El cual ya estaba casi vacío gracias a la hora. No digo que sea muy tarde, pero a nadie le gusta estar en la institución cuando no hay clases. Agarre la ropa que tenia puesta antes de tirarme a la piscina y la coloque en el a ciento del copiloto.

Moví el carro a un callejón detrás de St Chards y me quite toda la ropa para poder ponerme la otra que constaba en: un jean negro con una camisa gris manga larga, mis botines cortos, mas mi pulsera con una pluma de plata y por ultimo mi chaqueta de cuero.

Conduci por mas de media hora, para poder llegar a mi restaurante favorito de comida italiana: Angelo's. Las pizzas venían de un real italiano, con un sazón exquisito.

Estacione el auto algo lejos de los demás, y atravesé la puerta. Me senté en una de las mesas con el mantel rojo, y llego un camarero a pedir mi orden, lo mire fijamente, era guapo además de que tenia unos ojos negros hermosos.

Creo que se fijo que lo estaba mirando, ya que cuando se llevo mi orden: Una pizza doble queso con peperonie, jamón,maíz y otras cosas mas. El me guiño un ojo y yo lo ignore.

Se me olvido pedirle algo mas, así que lo llame.

-¿si hermosa? - lo mire y hice lo que mejor sabia hacer, intimidarlo hasta que dejara las babosadas.- ehhh, disculpe señorita ¿que otra cosa desea?

-si, por favor llame al chef, necesito hablar con el para pedirle lo mejor del menú.- se que el restaurante no era esos lujosos ya que no tenia como pagarlo. Y tuve que trabajar arduamente para pagar mi jeep.

Dangerous Bad Girl.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora