•Dia De Bromas.

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Me levante de na cama de cárter con algo de pereza. Me senté y restregue mis ojos. Era de dia. Mire al otro lado de la cama. Nadie. Solo.

Me volví a tirar. Era chistoso. La noche anterior había tenido un sueño en el que cárter me besaba como en una estúpida película romántica y no lo había golpeado. Después, me quería besar de nuevo y yo entre a su auto. Y cocinamos y hablábamos como personas civilizadas y no quemamos la cocina. O por lo menos no yo. Pero era imposible. Eso jamas pasaría ya que si el me besaba yo lo golpeaba. Estaba claro que eso no había pasado.

Mis ojos se hallaban cerrados. Sentí la puerta y en la puerta pasaba cárter con un plato de pancakes y jugo de naranja.

¡diablooooooos!!!!.

—. Aquí esta tu desayuno. Me doy cuenta que te levantas muy tarde, ya son las once de la mañana. ¿no tienes que visitar a tu mama en el hospital?.— lo había olvidado. Si lo se, era una completa idiota. Pero que más queda. ¿me trajo el desayuno?. Bien. Creo que estoy soñando con que lo tengo de sirviente. Y si es así. ¡que no me despierten nunca!.

—gracias. Pero cuidate. En cualquier momento me vengare de la manera mas cruel que haya cárter. — el se río. Me entrego el plato y salio del cuarto. Bien. Esta extraño.

Después de comer entre en el baño. Cuando salí con la toalla envuelta en el cuerpo entre en el mediano armario que tenia cárter. La mitad era mía y la otra mitad de el. Era un trato justo.

Me coloque un short de algodón y a lo lejos ví una camisa negra de Cárter que llamo mi atención, agarre la camisa y me la puse encima, me llegaba hasta los muslos y dejaban ver un poco de mi short.

Salí y baje las escaleras con el plato en manos. En el sofá estaba cárter viendo los Simpsons, yo me acerque y me senté a su lado. Todavía estaba pensando una venganza.

—¿es mi camisa?— lo mire, el enarco una ceja y me miro de arriba a abajo sin ningún pudor. Yo sentí. No tenia sentido negarlo cuando el lo sabia— se te ve muy bien. Te queda mejor que a mi— el levanto la comisura derecha de sus labios. bien, se sigue comportando extraño.

¡DING DING DING! ¡tenemos un ganador!.

Ya tenia la broma perfecta. Pero, necesitaba un teléfono publico para esa broma e irme antes para la institución mañana. Iba a ser perfecto. Lo mire y Sonreí inocentemente.

Me levante y subí a la habitación. Cerré con seguro y me coloque un jean y mis vans negras. Me dio flojera cambiarme la camisa así que me la deje. Encima de la camisa me coloque una sudadera y listo.

Agarre mi teléfono. Y dinero para la llamada pública y salí. Cárter no se dio cuenta, así que no me pregunto nada............. Después de caminar calle tras calle, logre hallar un teléfono publico del cual llamar.

Coloque mi moneda en el aparato y marque el numero. El atendería en tres. Dos. Uno.

—¿alo? ¿que se le ofrece?— yo me mordí el labio para evitar no reír. Calme mis latidos y hable.

—hola. Hablamos de la institución. Lo estamos llamando para informarle que mañana los estudiantes tienen que ir vestidos como los años disco. Ya que es una celebración que a partir de ahora, ordenado específicamente como el director de la institución. Se realizará cada año. —no sabia de donde había sacado esa voz tan adulta y profesional para hablar,pero me había servido.

—oh, claro. ¿ya llamaron a Maya Mcmahon? — ¡demonios!.

—si,ya le informamos y creo que nos dijo que si iba. O algo parecido, no estoy muy segura ya que hemos llamado a tantos alumnos para decirles— me volví a morder el labio— bueno, adiós. Que tenga un buen día.

Dangerous Bad Girl.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora