Eras tú... [Levi X Petra].

Capítulo 37: Por siempre.

Levi caminó por el campo de entrenamiento con el cuerpo de Petra en sus brazos, ella tenía la cara relajada y una sonrisa en los labios, toda la legión estaba de pie frente a el capitán que tenía la cabeza agachada y sus lagrimas caían sobre la camisa de su amada, temblaba con cada paso que daba, Erwin, Hange y Mikasa caminaban atrás de ellos.

Cuando el ojigris llegó a la puerta de la enfermería se quebró y cayó de rodillas, recargó su cabeza en el hombro de su esposa y un sollozo se hizo presente.

-Levi...- dijo Hange mientras se ponía detrás de él.

-No quiero, no quiero Hange, no creo poder soportar esto una vez más- dijo él mientras la voz le comenzaba a faltar.

La sub comandante puso su mano en el hombro del capitán.

-Quiero platicarte algo, ven- dijo mientras le abría la puerta de la enfermería a Levi.

Él puso el cuerpo de su esposa en una camilla y se puso a lado de ella para contemplarla por una ultima vez.

Hange salió de la habitación para dirigirse a la cámara de medicamentos.

-Me dejaste Petra, todo lo que me reclamaste no importó, la razón por la que no quería que fueras a ese lugar se cumplió, te largaste y nos dejaste a tus hijos y a mi, ¡dime!,¿ porqué la gente que más amo en esta vida se va de mi lado?, tu maldita necedad hizo que todo esto pasara, si tan solo no hubieras ido... Nos quedaban muchas cosas por vivir juntos,  cumplir la promesa que nos hicimos cuando nos casamos, ver el mar y caminar junto a los niños sin ninguna preocupación, te amo tanto Petra, no tenías porqué haberme dejado, Kuchel, Levot y yo te necesitamos más que a nadie maldita mocosa- apoyó su cabeza sobre el pecho de la castaña- no nos dejes- sus lagrimas caían nuevamente.

Hange regresó con una pequeña botella en sus manos.

-Levi.

él levantó su cara y observó muy detenidamente la botella que tenía su amiga en la mano.

-¿Qué traes ahí?- dijo mientras se incorporaba completamente sin soltar el cuerpo de su esposa.

-Esta medicina-Dijo mientras se ponía frente a él- es el resultado de muchos años de investigación y de múltiples desastres en mi laboratorio.

-¿Para que es?.

-Esta pequeña botella hace que el tejido se repare automáticamente como el de los titanes, y más que nada hace que vuelvan a funcionar como si nada hubiera pasado- dijo ella mientras una pequeña sonrisa se dibujaba en su cara.

Los ojos del capitán se iluminaron.

-El único problema es que jamás lo he probado con un humano, en todos mis experimentos ha habido efectos adversos severos- dijo mientras miraba seriamente a Petra.

-¿Qué tipos de efectos adversos?.

-Las ratas que fueron inyectadas con el medicamento ya habían fallecido, su corazón y órganos dañados fueron reparados y su fisiología se volvió normal, pero todas cayeron en coma y no han despertado, podría decirse que están en un sueño profundo pero están vivos, no sé si vayan a despertar algún día- su expresión cambió a una donde se podía leer el miedo- es una opción si no la quieres perder definitivamente, pero no te aseguro que algún día pueda despertar.

Levi miró el cuerpo de su mujer, cada minuto que pasaba se veía más pálido, Hange le estaba regalando la oportunidad de poder mantener viva a la mujer que más amaba, pero el miedo de que ella no despertara también lo invadía, ¿De que serviría que ella viviera si no la vería sonreír, si no escucharía su voz ni sus regaños?.

-Tienes dos horas para decidir, piénsalo muy bien y búscame- dijo ella mientras se llevaba el frasco- es lo más que puedo hacer por ti Levi, en verdad quiero que seas feliz- lo abrazó y salio.

Cerró la puerta de su habitación, sus hijos estaban dormidos y junto a sus cunas estaba Eren que de igual manera estaba dormido.

-Mocoso, ya te puedes ir- dijo él mientras le pateaba la pierna.

-Eh?- se estiró un poco cuando vio a Levi- ¡Capitán!- se levantó e hizo un saludo- la sub capitana Petra me pidió el favor de cuidar a sus pequeños gemelos mientras salia a buscarlo, ya comieron, los cambie y acaban de dormirse.

Levi miró a sus pequeños.

-Señor, si no es imprudente, ¿Donde está la capitana?- dijo Eren mientras buscaba con la mirada a la chica.

-Está... - recordó todo lo que había pasado hace unas cuantas horas- está dormida en la enfermería, estaba algo cansada, ya te puedes retirar cadete, yo me encargo ya de los niños, gracias por cuidarlos- le agradeció con una leve sonrisa y cerró la puerta de su casa.

Se sentó junto a las cunas de sus hijos y los miró dormir tranquilamente, Kuchel se parecía tanto a Petra cuando estaba dormida, el pensar que probablemente su esposa estaría así lo que restaba de su vida le hacia pensar muy seriamente si era la mejor decisión; pero no quería que ella se fuera, si estaba dormida por lo menos seguiría con ellos y él podría verla diario, la atendería y sus hijos no se quedarían sin una figura maternal.

-No sé que hacer pequeños, ¿será lo mejor dejar ir a su mamá?.

Levot se despertó un poco y comenzó a bostezar.

-Mmmma- dijo mientras miraba los barrotes de su cuna.

Levi lo miró detenidamente, buscaba con su pequeña mano algo en el colchón, el capitán le extendió la mano y Levot le tomó el dedo lo jaló y se acurruco en el.

-Mmmmma- rió con un dulce tono y se volvió a quedar dormido.

Levi sonrió y con delicadeza dejo la cabeza de su hijo en la almohada, se levantó y camino hacia la puerta, listo para darle una respuesta a Hange.

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Lamento si el capitulo pasado fue pesado, para mi fue feo escribirlo, tenía planeado desde el principio terminar con la vida de Petra, pero después de leer todo lo que he escrito al rededor de un año supe que ella no se podía ir tan fácil, este es el ultimo capitulo, el siguiente es el epílogo y bueno, veremos que decisión tomo Levi, ya tengo planeado el final en mi mente, muchas gracias por leer esta historia, sin ustedes, no sería lo que es en este momento.

Un saludo enorme.