Me And My Love #Wattys2016

¡PROBLEMAS!

Cuando me acerqué con el para ver que ocurría, me comentó lo que había dicho el guardia:

B: -Dicen que por la tormenta las vías del tren están completamente inundadas y no habrá servicio del tren por un buen rato.

¿¡QUE!? ¿¡NOOOO!? ¿¡PORQUE A MI!? ¿¡PORQUE AHORA!?
Todo iba bien y de pronto solo pasaban cosas malas, estar bajo la lluvia y no poder disfrutar mucho del día ya era algo, pero eso estaba por sacarme de mis cabales, comencé a preocuparme mucho, sentía una angustia que golpeaba mi estómago, debía pensar en algo y actuar ya! salí de la estación junto con el y nos dirigimos hacía su casa a un par de calles de la estación, al llegar yo lo espere en su pórtico escondida entre las grandes macetas y plantas que había allí, mientras el iba por dinero suficiente ya que había usado el mío en pagar un tren que no iba a llegar nunca, un par de chamarras y un paraguas.

Para ese momento yo sentía una gran ansiedad recorriendo todo mi cuerpo, me limité a enterrar las uñas en mi brazo y mover mi pierna repetidas veces mientras esperaba a que el saliera, no quería entrar y que alguien de su familia me viera, comenzarían a hacer preguntas que francamente me darían algo de pereza contestar, mucho menos dejaría que me vieran en esas condiciones, con cara de pánico.

Al salir me prestó una de sus chamarras, abrió el paraguas y me dijo mientras caminábamos deprisa que deberíamos tomar un autobús que me dejase justo en la línea de transbordo, pues aquella línea era subterránea y no habría problema con eso de la inundación, así que comenzamos a caminar hacia la parada del autobús para que yo pudiese regresar a mí casa, el me acompañó en todo momento pues estaba muy lejos de mi casa y en ese momento solo quería llegar ya y evitar un castigo por parte de mis padres y peor que un castigo, que se enterasen de lo que había sucedido ese día, de las mentiras que había dicho.

Subimos al bus y así emprendimos viaje hacía la estación.
Ya era tarde, pasaban ya de las 7:00 de la tarde y estaba segura de que mis padres comenzaron a llamarme al móvil, como lo hacían siempre que salía de entrenar para saber que yo ya regresaba a casa y poder ir por mi a la estación más cercana a donde vivía.

Yo estaba angustiada, había mucho, demasiado tráfico! el autobús iba muy lento entre todos los carros, tomando tantos atajos para evitarlo que incluso el viaje se volvía más y mas largo, la desesperación comenzó a consumirme lentamente y en ese momento sólo podía imaginar lo peor, abandoné la última pizca de positivismo que guardaba en mi interior y en su lugar se vio reemplazada por un sentimiento de enojo, de ansiedad, miedo y una ganas de llorar inundaban mi cuerpo, escuchaba los gritos de mis padres resonando en mi cabeza, taladrando mi cerebro junto con toda esa angustia e impotencia de no poder hacer nada, simplemente podía sentarme en silencio, a esperar, mientras me sumergía en un mar de pensamientos negativos y rogaba por que no me diera un ataque de ansiedad con el que comenzará a rascarme mis brazos, lo último que hubiera querido es que Bryan presenciara ese episodio de terror en mi.

Yo aún temblaba de frío, por lo que Bryan me abrazó y trató de mantenerme caliente y tranquila, estoy segura de que el notaba en mi cara esa desesperación por llegar, no porque quisiera apartarme de el, si no porque de no llegar rápido tendría problemas, demasiados como para ser la última vez que lo viese.
Pronto mi teléfono comenzó a vibrar y mis ojos se cristalizaron entre lágrimas y una cara de terror al ver en la pantalla de mi movil llamadas y mensajes de mis padres, tenía miedo a contestar y escuchar sus reproches, sus gritos, miedo a que al escuchar mi voz descubrieran que mentía, así que apagué el teléfono un momento y traté de calmarme.

Así transcurrió el resto del viaje, acurrucada en sus brazos, mientras mantenía una pequeña sonrisa por tenerlo ahí a mi lado, pero mi cara y mi cuerpo denotaba angustia, denotaban PROBLEMAS.
Un tramo más adelante volví a encender mi móvil, nuevamente entró una llamada de mi papá, no estaba molesto, se le escuchaba con una voz seria pero serena, me pregunto donde estaba y se llegaría pronto, le dije que recién salía del gym pues estaba lloviendo mucho y a penas se estaba calmando, me dijo que estaba bien y que me relojería donde siempre al bajarme del tren.
Colgué notablemente aliviada por aquella mentira que agregaba como un hilo a mi telaraña de engaños, sin embargo me ayudaría a ganar algo de tiempo para que no pasara nada.

El tráfico seguía terriblemente lento, ibamos a penas un poco más de la mitad del camino y yo seguía terriblemente asustada, ni siquiera recuerdo si durante ese trayecto entable con Bryan alguna clase de conversación, solo recuerdo mis pensamientos y ese enorme peso sobre mis hombros, la forma en que hundía mi cabeza, el como aferraba mis uñas a mis brazo,el como sentía esas enormes ganas de llorar, dormirme y despertar en seguida, que todo fuese un sueño o mejor dicho una pesadilla que no quisiera recordar.
Un poco mas adelante ya un poco mas cerca mi padre volvió a llamarme, no contesté, ésta vez no sabía que inventarle, había pasado bastante tiempo ya desde que había dicho que iba en camino y sí decía otra cosa no iba a creerme o comenzaria a dudar de lo que dijera, así que decidí no contestar.

Finalmente llegamos a la estación, Bryan me acompañó dentro y me dijo que el debía regresar también, así que nos dimos un beso de despedida, le debolví su chamarra, el insistió en qué la llevará pero le expliqué que si me la veían puesta, tendría que dar muchas explicaciones en mi casa, me abrazo fuertemente intentando tranquilizarme y me dijo que le avisara por mensaje en cuanto llegara a mi casa.

Asentí con la cabeza y baje por las escaleras para tomar el tren.