Decidida a dejarlo todo

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Esa tarde me decidí a olvidarlo todo, no sin antes ir a despedirme de esa única persona que había logrado que por momentos olvidara todo el mal que cargaba conmigo, al igual que los otros días seguía añadiendo hilos a mí red de mentiras, una vez mas a escondidas de todos iba a encontrarme con aquel chico que tanto me encantaba, únicamente para verlo por una ultima vez.

Tenía todo preparado, alcohol, pastillas, cigarrillos y algo de marihuana que había conseguido no es que todo eso logrará matarme pero si que conseguiría tener algo de valor como para arrojarme frente algún camión, nunca tomaba alcohol, rara vez tomaba medicamentos para algo mas que no fuese migraña y jamas habia probado la marihuana... que cobardía la mía, una muerte así luego de consumir todo eso, sería probablemente la menos dolorosa, pero al fin y al cabo, eso era lo que yo quería y aunque no fuera precisamente la muerte más rápida, los efectos de la droga y el alcohol me harían olvidarme de la agonía en mis ultimos momentos, no quería tener que lidiar con el dolor fisico de una muerte dolorosa después de tener lidiar con mi dolor psicológico.

Yo arrastré ese tipo de problemas desde hacía muchos años atras (4 años aproximadamente, aunque puede que más)  y finalmente había rebasado mi límite.
Ese día fuí a verlo sin haberle avisado que iría, le mande un mensaje cuando recién salía de la estación del tren, y espere afuera de su privada a que el saliera a recibirme.

B:-Por que no me dijiste que ibas a venir?
A:-perdón por no avisar, es solo que quería hablar contigo, e-estoy mal, volví a recaer y ya estoy harta...

Caminamos un poco hacia un lugar con algo sombra y nuevamente me preguntó que era lo que me ocurría

A:-volví a cortarme mientras estaba en la escuela... - dije con mi voz que apenas se escuchaba, mientras mostraba la parte interna de los bolsillos de mis pantalones, estaban llenos de sangre de las cortadas que había hecho esa mañana, y por la cantidad de sangre que se veía no habían sido solo un par de cortadas, si no muchas mas y en ambas piernas.

El sólo me miró con preocupación y me abrazó sin decir nada, yo lo abracé queriendo romper en llanto, me limité a soltar solamente un par de lagrimas que sequé casi instantáneamente mientras lo abrazaba, mi cuerpo temblaba, mi respiración estaba acelerad,mis ojos como platos clavados hacia la nada y solo tenía un hilo de voz que se cortaba para convertirse en sollozos. Luego de calmarme, comenzamos a charlar y me dijo que en cierto modo comprendía como estaba sintiendome, el también tenía problemas pero decidía ignorar a las personas y simplemente centrarse en su problema hasta resolverlo o en todo caso huir de el, también me dijo que así como yo me cortaba el fumaba para calmarse, era su manera de escapar de eso y de alguna forma lo lograba aunque solo un poco, no dijo nada más. Dijo además:
B: -cada quien se destruye a su manera, está es la mia...

Yo no podía hablar, mi mente estaba inundada de tantos pensamientos y de emociones tan intensas, solamente aguardando a desbordarse por mis ojos a forma de lágrimas.
Después me tomo de la mano y comenzamos a caminar, yo caminaba mirando hacia el piso, mi mano no apretaba la suya con fuerza, me sentía realmente desganada y en mi mente solo pensaba "no quiero apartarme de el, no quiero que este momento termine"
Nos sentamos en la banqueta unas calles más adelanté y comenzamos a charlar, ya no sobre el tema, si no sobre cosas que pudiesen distrer mí mente, nos acostamos sobre la banqueta y mirabamos hacia el cielo, las nubes, las aves... yo no podía abrir mis bien mis ojos, estaban algo hinchados por haber llorado y la resolana del atardecer y el reflejo de la luz me obligaban a entrecerrar mis ojos por lo que puse mi antebrazo en mi cara; despues se recostó sobre mi estomago, poco después que logre tranquilizarme, comenzaron a surgir las bromas, las cosquillas, los abrazos cálidos que me reconfortaban el alma y esos besos que me hacían olvidar el terror de la depresión que taladraba mi cerebro.
De nuevo el había logrado hacerme sentir mejor, logró darme calma aunque fuese por unos breves instantes y en sus brazos yo era realmente feliz.
Lamentablemente todo eso debía terminar, el tenía otras cosas que hacer y yo no podía interrumpir en sus deberes dado a que fuí yo quien llegó allí sin avisar y el se disculpó por tener que dejarme y  le dije que estaba bien, así que nos levantamos del suelo y tomamos un autobús para ir hacía donde el tenía que ir, cerca estaba una de las estaciones donde yo abordaría el tren, era ahí donde nos separariamos para tomar caminos distintos, nos despedimos y nuevamente me abrazó pidiendo que me cuidara y no volviese a cortarme, me dijo que se preocupaba por mí y que no quería verme mal, que no le gustaba verme estando así... yo entendí y dije que si, que trataría tanto como pudiera, nuevamente lo abracé y le dí las gracias por haberme escuchado, crucé la calle y entré a la estación mientras el se alejaba hacia el otro lado.
Al entrar al tren yo estaba cabizbaja, puse mis audífonos y la música a todo volumen, las lágrimas comenzaban a caer una tras otra por mis mejillas, mi mente desbordante de pensamientos finalmente comenzaba a fluir a través de mi mirada triste.
Una vez más no había sido capaz de decir nada, sin embargo no fue necesario, no quería que se quedara más angustiado por mi.

Me And My Love #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora