Salud y República

Capítulo XI.

El punteo de la guitarra acústica de Black & White Eyes y los primeros rayos de sol que me pegaban en la cara me despertaron y creía que fue todo un sueño, tenía un brazo rodeando mi estómago, miré a la derecha y Pablo seguía dormido en la misma postura, aparté su brazo con cuidado para no despertarlo y se dio la vuelta, pude verle la maldita cicatriz que empezó todo.

Me levanté y fui a ducharme y preparar el desayuno, todavía no podía creer que lo hayamos hecho, ni siquiera sé como pasó, simplemente lo hicimos y ya está sin planearlo, de improvisados... Salí de la ducha y quise preparar el desayuno pero Pablo ya lo había preparado, había hecho tortitas, café y zumo, ¿tanto había tardado en ducharme?

-Buenos días.- dijo cogiendo una tortita, estaba en boxers como si nada, despeinado, con la melena de león al viento.

-Buenos...- dije yo sentándome y dando un trago de zumo.- ¿He tardado en ducharme?

- Ah que te has duchado.- dijo cortando un trozo de tortita caliente y metiéndoselo en la boca, se había quemado y puso una cara que me hizo reír como una tonta.

-No tiene gracia.- dijo escupiendo el trozo y bebiendo zumo.

-Hombre un poco sí que tiene, desde que se inventó el soplar el que se quema es que porque es tonto.- dije tratando de aguantarme la risa, corté un trozo de tortita, soplé y me lo metí en la boca.

-Vaya, muchas gracias.- dijo tratando de hacerse el ofendido, pero no pudo y sonrió tontamente.

-Oye tenemos que volver allí.- dije tomando un poco de café.

-No pienso volver allí, me presionan demasiado me levantan dolor de cabeza.- dijo muy serio, le había cambiado la cara radicalmente.

Le miré con tristeza porque no quería recurrir a eso de los vídeos, seguimos desayunando en silencio y yo seguía pensando lo que había pasado la noche anterior, no me lo podía creer, estas cosas suelen pasar después de beber absenta o grandes cantidades de alcohol pero por no beber no bebimos ni agua, pasó todo demasiado rápido y a la vez lentamente.

-¿Y dónde decías que tenías esos vídeos? Quiero verlos.- dijo después de fregar todo.

-Aquí en el ordenador...- dije entristecida.

Pablo lo notó y se sentó a mi lado agarrándome las manos, mirándome a los ojos, por alguna razón esa idea me hacía pensar lo peor y me hacía llorar como una niña pequeña.

-Eh, ¿qué te pasa?- dijo secándome las lágrimas.

-Que podría salir mal y no quiero perderte, ahora soy yo la que no quiere perderte Pablo.- dije medio llorando.

-Oye... No me va a pasar nada, de verdad... Mira escucha la canción... Habla por mi, tonta.- dijo abrazándome contra su pecho.

You worry about everything, you worry about everything, don't you worry about it, don't you worry about it.

Era lo que sonaba de fondo, seguía siendo Syd Matters, Attractive y era verdad, me preocupaba por todo, me ponía siempre en lo peor.

-Eres idiota, ¿lo sabías?- dije sonriendo tontamente, aquél hecho me había hecho sonreír.

-Sí, yo también te amo.- dijo besando mi frente.

Y el maratón de vídeos y noticias comenzó, parábamos para ir al baño y para comer algo, no tenía fe en esto la verdad pero de alguna manera estaba resultando.

-Y yo hice todo eso, bueno, nosotros.- dijo Pablo alucinado.

-Sí, entre todos conseguisteis eso...- dije algo orgullosa.

-Nosotros no, todos, sin el pueblo no somos nada, solo somos la voz que os representa, vosotros habéis hablado, eso es todo.- dijo sonriente.

-Tenemos que volver a conseguir la democracia y volver a como estábamos antes.- dije.

-¿Tenéis los planos y los planes?- dijo serio.

-Sí. No.- dije, teníamos los planos pero no los planes, habíamos reunido a los twitteros y al fandom pero no a la gente por razones políticas y obvias.

-Sí. No. ¿Qué significa eso?- dijo.

-Que necesitamos el plan para ir a la torre de emergencia y sobretodo necesitamos lo que vas a decir, que no es por ofender pero te expresas como el culo.- dije.

-Auch. Eso ha dolido...- dijo poniéndose una mano en el pecho.- Pero es verdad, no se expresarme y doy a malentendidos después y si se me saca fuera de contexto más todavía...- dijo.

Por alguna razón no podía enfadarse conmigo, si eso se lo hubiera dicho Íñigo seguramente le habría mandado a la mierda sin perder tiempo discutiendo sobre eso.

Sin más pérdida de tiempo fuimos a la base y ya estaba Íñigo de los nervios, cuando nos vio fue corriendo hacia nosotros, estaba tan nervioso que casi se da con las vías y se abre la cabeza de la hostia que se metió.

-Pero ten más cuidado hombre que te abres la cabeza.- dijo Pablo con un brazo pasando por mi hombro apoyándose en mi.

-No tiene gracia, ¿dónde habéis estado todo este tiempo?- dijo nervioso.

-No te pongas nervioso, Íñigo...- dijo, no sé por qué pero eso me hizo gracia, me empecé a reír a carcajadas, sin querer se lo pegué a Pablo y nos empezamos a descojonar.

-No es gracioso, tenemos cosas que hacer como recuperar tu memoria por ejemplo.- dijo cabreado.

-¿Otra vez? Qué aburrido.- dijo sonriendo.

-Ya la has recuperado... ¡Gracias Johnny!- dijo empujando un poco a Pablo y abrazándome fuertemente.

-Vale pero es mía, quiero hacértelo saber.- dijo recomponiéndose del empujón que le había metido.

-¿Estáis juntos? Joder Pablo que rápido eres...- dijo sorprendido.

¿Espera qué? ¿Desde cuándo estamos juntos? No era oficial pero sí se podría decir que estabamos juntos. Nos separamos en dos grupos, unos hacían el plan para entrar en la torre de emergencia y otros el discurso, el fandom, unos cuantos de UP y yo nos pusimos a hacer el discurso de Pablo. Debatimos (por no decir discutimos que así pues queda más formal.) sobre lo que debería decir o como debería hablar y al final decidimos que tendría que ser algo como V cuando captó la atención de todos.