Capítulo 45

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Elisa:

-Ed, no quites el brócoli de tu plato-Refunfuñé, sintiéndome como una adulta.

Esto es tan extraño. Me encontraba sólo minutos, de abandonar la casa Sheeran. Es como el colegio, primero vives tu infancia tranquila y normal, luego viene la universidad, donde no hay nadie que te vigile, puedes hacer lo que quieras y sentirte libre de presiones. En cambio ahora, sólo tengo que aceptar el hecho de que no habrá nadie que me vigile (hablando en seguridad adulta) porque tengo el horrible presentimiento de que Ed pueda estar encima de mí uno de estos días.

SÍ... tengo un poco de miedo.

Es que es algo extraño, duermo con él y me acorrala en sus brazos y me deja sin aire, pero... es... HOMBRE, y no soy tan ingenua de creerme ese cuento de que 'no haremos nada malo en mi casa'

-El brócoli es asqueroso-Comentó con aires infantiles, sacándome la lengua.

-Ed, ya eres un adulto maduro y aún no sabes que el brócoli es una de las verduras que más aporta al bien de tu organismo-Atacó Imogen, pero de manera suave y maternal.

-Ya soy un adulto y aún no entiendes que odio el brócoli, mamá.

Qué interesante. Yo debatiendo conmigo misma sobre mi estúpida situación, que tal vez no sea así y solamente me esté creando películas y la infantil conducta que Ed mantiene hacia el brócoli. Genial.

-Mamá, la comida estuvo espectacular, a pesar de que desprecio el brócoli-Avisó Ed, parándose de la mesa, e instantáneamente, su mano buscó la mía-. Iré con Elisa a arreglar las cosas para irnos a mi casa.

Esto sólo significaba una cosa.

Cerré y abrí mis ojos de golpe, me levanté de la mesa, solté la mano de Ed, agradecí mi comida y caminé hacia la cocina para dejar el plato en el lavabo. Ahora, debía... empacar todo, y... uh, algo se me olvida...

-¿Calmarte, no será? Histérica de porquería.

Ah, sí. Eso era.

Rodé mis ojos y sin más titubear, mentalmente, obvio. Subí a la habitación y me encontré con Ed, estaba con un bolso medianamente grande introduciendo algunas de sus pertenencias.

Miré a mi alrededor. Inhalé. Exhalé y una sonrisa se dibujó en mi cara. Ed plagió el último gesto mostrando ampliamente sus parejas perlas.

Tan sólo con ese gesto, mis preocupaciones por el "qué pasará" desaparecían. Así de fácil, así de sencillo.

***

Bajé por la escalera procurando mantener cautela, aunque junto con las pesadas maletas, sólo aumentaba la posibilidad de ver mi cara estampada en el piso.

Me dirigí a la salida, donde todos los Sheeran se encontraban en hilera, así podían apreciarme para conmemorar mi despedida. Me paré en frente de todos para verlos directamente a los ojos, así que quise comenzar dedicando unas palabras a la persona que más me tocó psicológicamente.

-Imogen, en toda esta semana que tuve para conocerte, quiero que sepas que fuiste como la madre que nunca tuve-Reconocí con mis más sinceras emociones-. Fue todo un placer haber estado en un ambiente familiar como éste-A dicha le surgió un brillo en los ojos y corrí hacia sus brazos.

-Cuando quieras, eres bienvenida en nuestra casa-Musitó en mi oído, luego me soltó y me dedicó una sonrisa.

Después de un rato, terminé de despedirme del resto y Ed hizo lo mismo. Admito que esto ha sido algo difícil, sobre todo con Imogen, me trató como la madre ideal que una chica puede desear. Pero bueno, son recuerdos memorables que me alegro de haber disfrutado al máximo.

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⏰ Última actualización: Jul 15, 2016 ⏰

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Mi Mejor Casualidad (con Ed Sheeran)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora