Camila POV
Nunca había sido una fanatica de la clase de deportes, siempre tenía que correr, saltar o hacer un esfuerzo físico que es una de las cosas que más detesto en la vida, incluso odiaba al profesor que era un tipo por el cual todas las chichas se morían, se llamaba Dereck, era el típico hombres musculosos de pelo claro que revoluciona las hormonas de todas las chicas pero en mi no tenía ese efecto porque soy lesbiana.
-Mila no corras tan rapido, no están mirando- escuche gritarme a Dinah, disminuí un poco la velocidad para que pudiera alcanzarme. -Relájate un poco, es solo el calentamiento-
-Dinah tú sabes porque estoy corriendo- hacia unas 2 semanas había llegado una ayudante para Dereck, ella se llamaba Lauren Jauregui la profesora más caliente que he visto en la escuela, era la razón por la que siempre me esforzaba ahora en la clase y me comenzaba a gustar, aunque me molestaba que el cabezota de mi profesor le pasara coqueteando pero me alegraba cuando ella lo rechazaba.
-Lo entiendo pero no es para tanto es solo un crush, nunca te dirige la palabra o te ignora cuando le quieres hablar- Dinah tenía razón cada ves que intentaba hablarle o preguntarle algo me ignoraba por completo, ni una sola palabra salía de su boca conmigo.
-Tal vez si me esfuerzo me felicite o que se yo-
Luego de esa última frase no recuerdo mucho, solo sé que escuche gritar a Dinah un "Mila cuidado" y sentir un fuerte golpe en la frente. Abrí un poco los ojos, supe enseguida que estaba en la enfermería, tenía una bolsa de hielo en mi frente, la quite lentamente porque me dolía mucho el ares que creo me había golpeado. Deje que pasaran un minutos he intente pararme pero me mareé enseguida.-Yo que tú no intento eso- esa voz rasposa la conocía en cualquier lugar, Lauren me había hablado. Enseguida sentí como mis mejillas se tornaban rojas debido a que me había visto en mi peor estado.
-Es solo un golpe- mire hacia dónde estaba ella, se encontraba con los brazos cruzados apoyada en una pared esperando de pie. Su pelo ahora estaba suelto, ya no en su típica coleta aún así seguía siendo hermosa y se veía aún más sexy que antes. -Deberias llevar el pelo suelto- dije para mí misma sin dejar de mirarla.
-Gracias por lo del pelo- una sonrisa se extendió por su rostro, de nuevo sentí el calor en mis mejillas. En serio lo dije en voz alta, seré idiota.
Un silencio se instaló en la pequeña sala, ella dejó su apoyo en la pared y camino hacia mi provocando que mi corazón se acelera. Cuando estuvo frente a mí pude ver que sus ojos tenían distintos colores pero predominaba el verde, sus labios eran voluminosos perfectos para un beso y en su nariz había un pequeño agujero.-¿Ocupas un pircieng?- ella asintió mientras metia su mano al bolsillo y me lo mostraba. -Deberias ponértelo- dudo por un instante pero luego se lo colocó. Sería poco decir que es una de las mujeres más perfectas del mundo. -Te queda bien- susurro un pequeño gracias que solo me hizo sonreír.
De un momento a otro tomo mi cara entre sus dos manos, pensé que me iba a besar pero solo fue para revisar mi frente, debido a su proximidad podía sentir su perfume de vainilla y como su cuerpo irradiaba calor robándome un suspiro.-Camila no lo hagas más difícil- me sorprendió cuando fijos esas palabras y me miró directo a los ojos sin dejar de sostener mi cara.
-¿Qué? Que hice yo ahora. Nunca me diriges la palabra y ahora te lo pongo difícil. No entiendo Lauren- no podía negar que me gustaba que aún no quitará sus manos de mis mejillas pero era intimidante como no dejaba de mirarme con sus ojos y más aún cuando relamio sus labios.
-Me gustas Camila y no sólo como alumna como algo más- no podía reaccionar ante las palabras de Lauren. -Creeme que si pudiera ahora mismo te besaría hasta quedar sin respiración- no fue necesario que hablara más para que impactará mis labios sobre los suyos.
En un principio no respondió, lo que me hizo asustarme pero de un momento a otro tomo el control del beso, sus labios se movían con agilidad sobre los míos mandándome escalofrios por mi cuerpo.
Mis manos fueron hasta su pelo enredándose en el y atrayendola más a mi cuerpo, su lengua pidió entrar en mi boca y la deje con gusto. Podía escuchar como nuestras bocas hacían ruido, mi cuerpo pedía más contacto de ella por lo que deci bajar mis manos hasta su polera y levantarla un poco acariciando su plano abdomen.
Nos comenzó a faltar el aire por lo que nos tuvimos que separarnos, sus labios estaban rojos y húmedos, si respiracion estaba agitada al igual que la mía y sus ojos estaban más oscuros de lo normal. Me preocupé cuando corrio a la puerta pero al saber que estaba haciendo me tranquilice, la había puesto el seguro para que nadie entrara.-No aguanto más Camila- su voz estaba más rasposa provocando una extraña sensación en mi.
-Creeme que desde que te vi me traes loca- no fue necesario decir para acortar la última distancia y comenzar una nueva batalla por el dominio que ella gano, solo me deje llevar.
Mientras continuábamos con el beso, sus manos bajaron por los costados de mi cuerpo llegando al borde de mi camiseta, la levanto lentamente sacandola completamente, enseguida saco mi sujetador y lo tiro a algún lugar. Sus manos enseguida se apoderaron de cada seno apretandolos y masajeando con sus pulgares mis pezones dejándolos totalmente erectos. Mi centro ya estaba humedo, palpitante por atención. Lauren bajo su boca hasta uno de mis pezones mordiendolo dejandolo sensible para luego chuparlo aliviando el dolor y transformándolo en placer.
Mis manos inquietas se movían por su pelo sin soltarla de mi pecho. Sentia como mi vagina estaba más humeda y palpitante con cada pequeño toque que daba en mis zonas sensibles, los que se expresaban en pequeños gemidos.-Sácate el pantalón- ordenó la ojiverde, enseguida me saque las últimas dos prendas y me volví a sentar en la camilla, se arrodilló ante mí mientras con sus manos abria mis piernas. Partió dando cortos besos por la cara interna de mis muslos hasta llegar a mi humedad, se relamio los labios ante la vista.
Lo primero que hizo fue soplar sobre mi clitoris provocando que un gemido escapara sin mi permiso, volvio a repetir la acción un par de veces más antes de lamer mi humedad. Cuando comenzó a juguetear con su lengua y boca sobre mi clitoris sentí un placer que se expresó en gemidos más seguidos uno tras el otro y más fuertes aparte de apretar con más fuerza su cabeza. Hábilmente metio su lengua en mi interior mientras que con su pulgar hacia circulos lentamente, aprete con mis piernas su cabeza haciendo que no se separara de mi, su lengua entraba y salía, succionaba mi humedad, lamia toda mi intimidad y volvía a repetir el proceso.
Dejó de atenderme con su boca y la subió hasta mi boca dejandome sentir mi propio sabor lo que me excito más, puede sentir como sus dedos entraban fácilmente en mi interior comenzado un movimiento constante de adentro hacia afuera haciendo que en cada salida su palma chocara con mi clitoris enviando oleadas de placer por mi cuerpo.
Mi estómago se tensaba cada vez más y a Lauren le era casi imposible amortiguar mis gemidos con sus besos, cada vez hacia más rápidos sus movimiento y moviendo sus dedos en el interior tocando mi punto G llevandome a mi primer orgasmo.-Mierda mierda mierda- fue lo único que dije antes de que Lauren volviera besarme más lento y suave. Comenze a sacarle su ropa pero me detuvo.
-Ahora no cariño. Será en otro momento- me dio un corto beso mientras me pasaba mi ropa y caminaba a la puerta a sacarle el seguro.
-Entonces ¿habrá segunda vez?- se giró sobre sus talones mirándome fijamente mientras me terminaba de poner la última prenda.
-Claro. Te invito a mi casa hoy por la noche, te tendré una pequeña sorpresa-
Sonrei ante su propuesta que era más que nada una orden que no iba a rechazar y de seguro que me encantaría la sorpresa tanto como me encantaba ella.Holaaaa!! Aquí está lo que tenía preparado para ustedes.
Si pudieran dar me gusta a la página que está en mi perfil sería hermoso. Si hacemos que llegue a los 1000 me gusta subire enseguida otro One Shot😊