Lauren G!P
-Odio a Camila Cabello- entre gritando mientras Normani cerraba la puerta del departamento detrás de mí. -Es una gran idiota- me tire sobre el sillón tomando la cerveza sin abrir que estaba en la mesa.
-No la odias Lauren, tú la amas pero odias que este con otro- tome otro sorbo de la botella mientras mi amiga se sentaba a mi lado. -Odias que este con tu "mejor amigo"- dijo lo último haciendo comillas con los dedos en el aire.
-Ese idiota dejo de ser mi amigo desde que sale con Camila- mi teléfono comenzó a vibrar en mi bolsillo, lo saque para encontrarme con la foto de Camila en mi pantalla. -Hablando de la reina de Roma- dije irónicamente mientras contestaba y lo ponia en altavoz.
"Lauren sabes que no es lo que parece" fue la primera línea que escuche al responder.
"Ahora me imagino cosas. Literalmente Shawn y tú se estaban devorando" volví a tomar otro sorbo de la botella mientras que esperaba una respuesta y repetía la imagen de ellos dos besándose.
"Oh callate Jauregui y abre tu maldita puerta porque estoy afuera" se corto la llamada y enseguida sentí como tocaban desde el otro lado de la puerta.-Ustedes son intensas- dicho eso por parte de Normani, se giró sobre su eje y se fue a su habitación, escuche como se cerraba su puerta y camine hasta la entrada, tome una bocanada de aire y la abri. Camila estaba al otro lado de brazos cruzados mientras yo imitaba su postura.
-¿Me dejaras entrar?- me hice a un lado para darle la pasada mirando como movia culo de un lado a otro. Negue con la cabeza mientras cerraba y la seguia por detrás.
-¿Qué haces aquí?- volvi a mi lugar en el sofá mientras Camila se sentaba a mi lado. Podía sentir su aroma distrayéndome como siempre al igual que su corto vestido ,que se había subido por qué se había sentado dejando a la vista sus tonificadas y morenas piernas.
-Sinceramente no lo sé. Tenía la necesidad de verte, después de ya sabes- vi como alargaba su mano hasta mi botella de cerveza y se la llevaba a los labios que alguna vez ya había probado.
-Después de verte siendo tragada por otra persona- abrió la boca para decir algo pero enseguida la cerró. Como siempre no lograba decir nada y simplemente se iba. - Mejor te vas Camila, tú noviecito se puede enojar- le robe la cerveza de las manos para llevarla hasta mis labios y después dejarla en la mesa.
-No es mi novio- fue lo único que dijo mirandome directo a los ojos.
-A mí no me pareció eso- termine por decir, la sangre ya comenzaba a hervir dentro de mi cuerpo por los celos que estaba sintiendo.
-Maldita sea Lauren, cállate de una vez y deja de decirme qué hacer y no. No tienes ningún derecho- sentia la ira en su voz al igual que lo podía ver en sus ojos que estaban más oscuros y su respiración se había agotado.
-No tengo derecho porque no estamos juntas. Eres una maldita jugadora Cabello, esto se termina aquí- nuestros cuerpos estaban más cerca de lo esperado y el ambiente estaba cargado de tensión y rabia. -Y te amo idiota- su rostro se suavizó al igual que el mío, mi mano viajó hasta su mejilla en donde Camila recargo su cabeza.
-Eres una mierda Lauren- nego con la cabeza para luego abalanzarse sobre, cayendo de espaldas sobre el sillón. Sus labios reclamaban los míos, al igual que yo los de ella. Era un beso desesperado y hambriento, nuestras lenguas ya estaban compitiendo una contra la otra. Sus manos estaban apoyadas sobre mis hombros mientras que las mías apretaban su culo, dejándole escapar pequeños gemidos ahogados y cortados por los besos.
Su cuerpo se estaba restregando en mi entrepierna, donde mi pene ya estaba erecto por lo caliente del ambiente. Sus delgadas manos se metieron por el interior de mi camiseta en donde comenzó a rasguñar todo mi abdomen y empezando a jugar con el dobladillo de mi boxer.