A Rubius lo trato como un si fuese un amigo de toda la vida y aunque no lo sea, se lo merece.
Estaba por llover y lo veía muy tenso.
-Eh Rubiuh...¿Estah bieh?
-Si, no te preocupes.
-Vale, cualquier cosa me avisah.
Estaba terminando de decir la frase cuando de repente se lo oye a Rubén gritar y pega un salto.
-Joder tío, ¿Qué ha pasado?- pregunto elevando el tono de voz.
-¿Has oído ese trueno? Ha sido brutal.
-Claro que lo oí, pero te he oído máh a ti con ese grito que has pegado.
-Lo lamento, desde muy pequeño odio las tormentas fuertes, mi madre siempre se acurrucaba conmigo a mitad de la noche porque no podía dormirme.
-Dehcuida, ya se pasará.- le dije dando ánimos, estaba devastado.-Bueno, mira aquí dormirás tu-digo mostrandole.
-¿En tu cama? ¿Dónde dormirás tu?.
-En la cama de mis padres.
-Va-vale.
-Me iré a dormir.
-¿Mangel?.
-¿Que pasa Rubiuh?.
-P-puedo...no nada. Buenas noches.
-Buenas noches Rubiuh -lo note nervioso, ¿Tendrá tanto miedo para no poder estar en una habitación el solo? Vale necesito dormir.
Al instante que cerré los ojos, escucho a Rubén.
-¡Mange, Mangel!- dice en un tono bajo.
-¿Rubiuh, que paso tío?.
-¿Eh, p-puedo dormir contigo?
Wow, al final no estaba diciendo gilipolleces, no pensé que Rubius era tan miedoso, el estaba ruborizado y no pude evitar soltar una pequeña carcajada y decirle- Pues, vale.- no podía dejarlo ahí solo me daba pena.
-Gracias Mahe- dice un poco más tranquilo.
-¿Mahe?- es tierno, como el cuando esta asustado, ya no se que cojones digo pero lo que si se es que debo dormir.
-Pues tu me dices "Rubiuh" y yo te digo "Mahe"- suelta una risa.
-Vale Vale- y nos quedamos un instantes mirando de una forma muy gay.
Rubén estaba rojo y me dice.
-B-buenas noches.
-Buenas noches.
Y por fin nos dormimos, aunque no se a el, pero a mi me no me fue tan fácil, no se que me estaba pasando.
10:17 am.
Ahg-digo estirándome- ¿Y Rubiuh?- el no estaba en la cama así que me levanto y voy a la cocina donde estaba Rubius, estaba sentado con el desayuno preparado y dice:
-Ay mi querido, te estaba esperando.
Suelto una carcajada y le digo:
-¿Que haceh gilipollas?
-Pues, he preparado el desayuno, ven siéntate.
-Vale, tiene muy buena pinta lo que has hecho.
-Pruebalas.
Las pruebo y las acompaño con un poco de café con leche que había preparado Rubius.
Hezkyzitho, dhelyziozo, zukulhentho- le digo deformando la cara y sacando la lengua.
Rubius suelta una risa y dice:
-Eres un subnormal, pero te quiero.
-Lo mismo digo- hablo con la boca llena.