Le toco la puerta a Mangel y me abre dejando la puerta abierta para luego irse a la sala donde estaba la televisión.
-Mangel-no contesta
-Mangel-le digo unos minutos después.-Eh roto el papel donde estaba su número. ¿No dirás nada?
-Pues...que bien.-dice tragando saliva y sin decir más.
Suena mi celular y sin mirar atiendo.
*hablando por el móvil*
-¿Hola?
-¡Hola Rubén, soy Mara!
-Ah...hola M-mara-digo mientras Mangel y yo nos mirábamos fijamente, como nos habíamos mirado en la plaza, esa mirada que hace que sienta como el calor subía a mis mejillas.
"Hola, hola", se escucha que estaba repitiendo y contesto.
Hola no se...escuchaba-digo mirando como Mangel se va a su cuarto cuando termine de contestar.
Luego de hablar unos 10-15 minutos con ella, habíamos quedado para mañana salir y acepte.
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-Mangel-digo mientras camino hacia su cuarto y abro la puerta.
-Mangel-repito.-perdón por tratarte así.
-¿Eso es todo, ya te has disculpado?
-Pues, si.
-Vale puedes irte.
-Pero tío ¿que más quieres que haga? ya te he pedido disculpas.
-Quiero que te vayas de una puta ves.-digo elevando la voz.
No digo más y me voy.
-Suena mi móvil nuevamente y atiendo:
-Hola madre, ¿ya estas en casa?. Esta bien voy para allí.
Mangel sale de su cuarto ya que había escuchado mi conversación con mi madre.
-¿Ya te iras?
-Si, ¿no era eso lo que querías?.
-Adiós.
-Adiós.
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*En la casa de la madre ruben*
-¡Hola Madre!.
-Hola hijo, ¿como estas?
-Bien ¿y tu?, he estado en la casa de Mangel.
-Oh pues que bien, iré a preparar algo para comer.
-Vale.
Voy a mi cuarto para ver la foto de ese hombre extraño y la verdad tengo mucha intriga de saber quien es pero tal vez no deba preguntar, como no se quien dijo: "El que se mete en lo que no debe, se entera de lo que no quiere" , así que lo pensare mejor y luego veré.
-¡Rubén a comer!
-¡Voy mujer!
-Hice sándwichs de milanesa, jamón, queso y tomate, como te gustan a ti.-dice con una sonrisa de oreja a oreja, lo que me parece muy extraño.
-Que rico, gracias madre.
Luego de cenar, me lleno de valentía y le pregunto a mi madre sobre ese hombre.
-No se de que me estas hablando -dice cortante
-No me la hagas más difícil.
-Pero no se de que ni de quien me hablas.
-¿Por qué me ocultas todo?
-No te oculto nada.
-No te muevas de aquí, ya vengo.
No quería hacerlo, no quería mostrarle la foto, porque se enojaría conmigo pero debo saber quien es ese hombre.
-¿Quien es este hom-?- y antes de terminar la frase me quita la foto y se va corriendo- Te quedas aquí. ¡Dime quien es!
-¡No, déjame en paz!
-¡Necesito saberlo, dímelo!
-No no no-repite mil veces en vos baja-no no.
-Por favor, dímelo.
-E-es tu...
-¿Quien, quien es?
-Tu padre- y larga a llorar.
Yo sin decir nada regreso a mi cuarto y me recuesto, solo para pensar un poco sobre todo lo que paso.