TÓMAME (+18)

Capítulo 10 FINAL

Sus corazones latían al unísono en una carrera por recuperar el aliento. Definitivamente, tendría que dar algunas explicaciones. No quería perder a su mejor amigo, pero Angela era importante para él.

La quería como su novia, su sumisa. Demonios, probablemente más.

Percatándose de que estaba aplastando su menuda figura, se deslizó de su cuerpo y rodó desde la cama. Al entrar en el baño cercano, agarró un suave paño, lo empapó en agua caliente, y regresó con ella. Su mirada le siguió,con cuidado y cautela. Parecía nerviosa.

—Por favor, no me digas que te arrepientes de lo ocurrido—Su
voz sonó suave y ansiosa, tal vez asustada.

Él exhaló fuerte y dejó escapar un fuerte suspiro.

—No, Angel, no me arrepiento.

Ella se incorporó rápidamente y se dirigió al otro lado de la cama, arrastrando la sábana alrededor de su cuerpo ya que no tenía ropa en la habitación.

—¿Adónde vas?

—Me voy antes de que me rompas el corazón—Tropezó con la ropa de cama y él corrió a la esquina de la cama, bloqueando su salida.

—No te irás.

—Sí me voy, vi tu rostro, escuché la resignación en el suspiro. Sé lo que viene a continuación y prefiero no escucharlo.

Las lágrimas escaparon de sus ojos y le desgarró el corazón. Ella le había malinterpretado.

—No, no te vas esta noche y si tengo algo que decir al respecto, puede que no te vayas nunca.

Ella se detuvo en seco, con la cabeza inclinada hacia el suelo. Los segundos pasaban y Angela no se movía, sólo el sonido de su respiración llenaba la habitación.

—Angela, mírame—Sus dedos alcanzaron su barbilla y le inclinó la cabeza hacia atrás de forma que sus ojos húmedos fueran de nuevo visibles para él.

Realmente parecía diferente sin la masa de rizos rodeando su rostro.

—Tu hermano puede lastimarme por esto, pero no te voy a dejar ir. Eso es si todavía me quieres.

Angela vaciló durante varios minutos antes de que una sonrisa maliciosa apareciera en su rostro. La sábana cayó y ella saltó a sus brazos riendo y besándole el cuello y los hombros hasta que se
desplomaron juntos sobre la cama.

—Tomaré eso como un sí.

—¿Estás loco? ¿Sabes cuánto tiempo he esperado por este día? Por supuesto que es un sí.

—¿Te das cuenta de que esto lo cambia todo entre nosotros? Soy lo bastante duro para vivir como un amigo, pero como tu Dom...

—He oído las historias. -Ella empujó los dedos por su cabello.

La lujuria fresca le dio una patada en el estómago. La mirada en su rostro...

—Bueno, toma lo que has oído y multiplícalo por diez y, tal vez, acertaras en la extensión de lo que he planeado para ti.

—Lo que quieras, Ethan—susurró.

—No hagas promesas que tu trasero no pueda pagar, Angelita.

Ethan entrelazó sus brazos a su alrededor y se lanzó sobre ella hasta que yació bajo él, boca abajo.

—Pero lo tomaré como punto de partida—Pese al increíble orgasmo que acababa de tener, su polla comenzó a moverse.

Si fuera por él, y lo sería, habría muchos más orgasmos aún más grandes durante el resto de la noche. Poniéndose en pie, frotó los cachetes de su trasero antes de dejar caer una de sus manos con un buen golpe fuerte.

Ella jadeó y giró la cabeza.

—¿A qué vino eso?

Una sonrisa malvada se extendió por su rostro.

—Creo que es hora de tú próxima lección, Angela.

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Novela escrita hace muchoooo tiempo. Editada porque la escribí en el teléfono y se hizo un desastre jeje... Espero que la hayan disfrutado

XoXo